Con motivo de las Jornadas Nacionales de Derecho Civil, el presidente de la
Corte Suprema de la Nación, Ricardo Lorenzetti, estuvo en Bahía Blanca y habló
con la prensa sobre el nuevo Código Civil y Comercial y su balance a dos meses
de la puesta en vigencia del mismo.

Bahía Blanca fue sede de las XXV Jornadas Nacionales de Derecho Civil
organizadas por el Departamento de Derecho de la Universidad Nacional del Sur
que son consideradas como el acontecimiento académico más importante de esa
materia tanto para la Argentina como para toda Latinoamérica. Tal es así que
las jornadas contaron con la presencia de nada más y nada menos que del doctor
Ricardo Lorenzetti, presidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación y
de su vicepresidente Elena Highton de Nolasco.
Además de los mencionados, 2 mil especialistas sesionaron en las jornadas entre
los que se pueden contar a juristas, académicos, miembros del foro y
estudiantes.
Las jornadas se desarrollaron en el Teatro Municipal y en esta edición hubo una
característica muy especial ya que se debatió el nuevo Código Civil y Comercial
que recientemente entró en vigencia en nuestro país.
Según se informó, se trató del primer evento académico sustentable debido a que
entre las acciones previstas se estipuló la gestión sustentable de los residuos
durante las conferencias, la utilización de productos amigables con el
ambiente, la difusión del patrimonio natural y cultural de la región, la
forestación, sensibilización ambiental sobre el suelo y la promoción del
consumo saludable.
También se proyectó el documental “Navetierra: un nuevo mundo en el fin del
mundo” cuyos responsables son la cantante y actriz Elena Roger, y el actor
Mariano Torre.
Pero más allá de todos estos puntos de alto interés e importancia, las miradas
se la llevaron las figuras más destacadas en el ámbito del Derecho y sobre todo
por la cuestión que refiere a detallar los aspectos más relevantes del nuevo
Código Civil y Comercial.
Sobre eso disertó el doctor Lorenzetti en la sala principal del Teatro
Municipal y a su finalización, se acercó a la Sala Payró del mismo teatro para
conversar con la prensa que concurrió al lugar en la lluviosa mañana del jueves
1 de octubre.
Como ya se dijo, en agosto comenzó a implementarse el Código y Lorenzetti
reflexionó sobre esos dos meses transcurridos: “La verdad que el Código está
pensado para la solución de problemas, esto es muy importante entenderlo. Es
decir, normalmente a veces se discute el Derecho en abstracto, nosotros hemos
tratado de hacer un Código para solución de problemas concretos de las personas
y esto se está notando porque es impresionante el nivel de aplicación.
Rápidamente cuando un juez ve un problema, lo resuelve con el Código nuevo y
hay muchísimos fallos en todo el país, en todas las áreas, esto es muy bueno,
la verdad que estamos muy contentos”.
Hace 200 años, clarificó Lorenzetti, se regulaba mucho en abstracto a las
personas, mientras que hoy el pensar a la persona en concreto es lo que rige
como primordial: “El ciudadano de hoy tiene problemas muy concretos, por
ejemplo la protección como consumidor. Todos nosotros somos consumidores y
siempre tenemos problemas, es lo que nos amarga la vida todo el día. Entonces
el Código protege al consumidor. Después protege distintas etapas de la vida
por ejemplo cuando uno es niño. Este Código regula al niño y le da derechos por
ejemplo a ser escuchado en el juicio, en la adopción. Regula la vida de los
adolescentes, les da derechos también y deberes a los padres”.
Siguiendo con las franjas según las edades, en el Código también hay lugar para
las personas de edad avanzada: “Fíjense que nosotros tenemos una población cada
vez más adulta y esto plantea problemas porque dentro de 20 o 30 años pensemos
que las personas van a vivir en un complejo sistema tecnológico. Y hoy ya nos
cuesta entender el celular o nos cuesta entender cómo funciona la computadora o
ir a cobrar la jubilación. Entonces cada vez va a ser más difícil y este Código
protege eso”.
Dentro del espíritu del nuevo Código Civil y Comercial, se destaca el hecho de
elevar algo tan simple pero necesario en lo cotidiano como son los valores: “La
idea es iluminar algunos valores, la sociedad tiene que tener valores y esos
valores son muy importantes. La vida humana no tiene sentido si nosotros no
sabemos qué perseguimos. Y tiene que haber una ética, tienen que haber valores.
Uno de esos valores es la protección de los vulnerables y de la persona. Es
decir, tenemos que cuidar a nuestros hijos, cuidar a los chicos, a los niños.
Otro de los valores es el cuidado del ambiente que está muy presente en este
Código. Otro de los valores es cuidar a los ancianos que también está muy
presente. Otro de los valores es la seguridad jurídica porque este es un código
comercial entonces también es importante que protejamos el comercio, las
empresas, su funcionamiento pero todo tiene que ser equilibrado, no excedernos.
Se ha tenido mucho cuidado”.

Un Código que se adapta
Al momento de las preguntas, una de ellas refirió a que si se tardaron 144 años
en modificar el Código, va a haber que esperar otros tanto para volverlo a
cambiar: “No, porque justamente la diferencia que hay es que en el Código de
Vélez Sarsfield, piensen ustedes que en esa época la expectativa de vida era 40
años, hoy es el doble o más. Los cambios económicos eran muy lentos porque se
viajaba en carreta porque no había Internet, no había aviones. SI nosotros
hubiéramos regulado la sociedad con los criterios de Vélez que no eran malos,
eran los de su época, este Código duraría muy poco. Por eso nosotros lo que
hicimos fue establecer criterios más generales que permitan que después se
adapten a los cambios. Entonces no es necesario cambiarlo tanto porque se va
adaptar, hay un gran espacio para que se adapte”.
A modo de graficar situaciones, Lorenzetti explicó que se han reconocido
algunos derechos de los adolescentes: “Si nosotros hubiéramos puesto en detalle
lo que puede hacer o lo que no puede hacer un adolescente, esto dentro de cinco
años habría que cambiarlo. Sin embargo pusimos criterios genéricos entonces eso
se va a ir adaptando, no es necesario cambiar la ley. Hay que pensar sobre todo
que la ley debe ser un modo de solucionar problemas, no de crearlos. SI uno es
muy específico tiene que cambiar la ley a cada rato entonces hay que pensar en
eso y además hay que pensar en el respeto de las personas porque si la ley y
los jueces le van a ordenar la vida a todos los ciudadanos, está mal”.
Lorenzetti señaló que los argentinos tenemos mucha iniciativa, queremos nuestra
libertad y decidir las cosas de la manera que nos parece: “En eso el Código ha
tenido mucho cuidado en respetar el derecho que tiene cada uno de organizarse
como quiere. Entonces por eso no va a haber que cambiarlo tan rápido porque hay
un amplio espacio para que las cosas cambien”.
Por otro lado es sabido que estamos ya en mes de elecciones y a razón de ello
se le consultó a Lorenzetti sobre el futuro cambio de gobierno. El presidente
de la Corte aclaró con una sonrisa que había venido a hablar del Código Civil
pero igualmente declaró: “Nosotros siempre hemos dicho que la Corte Suprema no
es la Corte de un presidente en especial entonces nosotros seguimos trabajando
como tal porque la función nuestra es darle confianza a la población y la
confianza a la población es que esté quien esté en los otros poderes, la Corte
va a decidir igual. Va a seguir protegiendo los derechos de los ciudadanos, va
a poner límites, es decir no puede cambiar las decisiones de un tribunal si
cambia el gobierno. Tiene que seguir siempre igual porque nosotros lo que
hacemos es interpretar la Constitución y la Constitución no cambia con los
gobiernos entonces nuestra función es darle tranquilidad y seguridad a la
población de que sus derechos, esté quien esté van a ser protegidos igual”.
En cuanto a la comunidad en general y una posible pérdida de confianza hacia la
justicia, Lorenzetti consideró que no hay tal pérdida y que “justicia” es un
término muy amplio: “No se pueden establecer tantas precisiones porque es muy
difícil hablar de “la justicia” porque hay justicia nacional, provincial,
federal, civil, comercial… Yo creo que nosotros tenemos que hacer un esfuerzo
permanente y sobre todo los cambios necesarios que no dependen mucho del Poder
Judicial sino de legislación y presupuesto y designaciones para que la justicia
satisfaga las necesidades de la población porque lo que sucede es que la
población va a la justicia, va muchísimo. La cantidad de causas aumenta en
todos los temas entonces más que preguntarnos si la gente confía lo que hay que
hacer es satisfacer esa confianza y ahí hay que hacer un gran esfuerzo todo”.
Casi al final del encuentro con la prensa, Lorenzetti respondió una pregunta
sobre el futuro alejamiento de Carlos Fayt -de 97 años- a su cargo como juez de
la Corte: “Es una decisión personal, nosotros tenemos un gran cariño por él y
la verdad es que llevamos unos buenos años compartiendo decisiones. La verdad
es que es su decisión, la respetamos y mucho más no hay que decir”.