El presidente Oscar Arias decidió finalmente convocar un referéndum para decidir si el país debe sumarse al acuerdo de libre comercio de los países centroamericanos con Estados Unidos.
Arias afronta una dura oposición popular a sus planes para incorporar a Costa Rica al tratado. Este país es el único miembro del CAFTA que aún no ha ratificado el acuerdo. En los restantes también hubo opositores a la firma, pero los gobiernos decidieron suscribirlo y no convocaron ninguna consulta popular.
Aunque no puso fecha, Arias dijo que “por primera vez la ciudadanía costarricense -haciendo uso de su voluntad soberana- tendrá la posibilidad de definir directamente la suerte de un proyecto de ley de gran trascendencia para el país”. Pero esta decisión no ha sido fácil ni gratuita. Durante más de un año, organizaciones sociales y populares han realizado múltiples actos y manifestaciones rechazando el acuerdo por los perjuicios que ocasionaría al país, el acuerdo “asimétrico” (desparejo, desigual) entre la poderosa nación del Norte y la modesta Costa Rica.

Por Carlos Iaquinandi, Agencia SERPAL, Servicio de Prensa Alternativa. www.serpal.info