El premio Nobel de Economía Joseph Stiglitz y un nuevo estudio del Banco Mundial coinciden en que los llamados “países emergentes” sufrirán los efectos de la crisis capitalista que en los últimos meses ha provocado la pérdida de miles de puestos de trabajo en EE.UU y en Europa, y una caída importante del consumo.
Al ser consultado Stiglitz en Sao Paulo sobre el debilitamiento de la economía brasileña (se contrajo un 3,6% en el último trimestre del año pasado), afirmó que “la situación puede empeorar mucho más” y añadió que es erróneo suponer que Brasil no sería afectado. Stiglitz añadió que no cree que haya países que queden al margen de la debacle. Y añadió: “muchos países emergentes se han convertido en víctimas inocentes de la crisis. La ironía es que mientras el gobierno estadounidense daba lecciones sobre reglas e instituciones en los países emergentes, sus políticas eran un fracaso total”.
El Nobel de Economía cree que los países ricos deben abrir sus mercados para los más pobres del mundo que no tienen dinero para relanzar sus actividades económicas. Por su parte, el Banco Mundial estima que la crisis financiera global producirá seis millones de nuevos pobres en América Latina este año. En los últimos cinco años, América Latina ha crecido más de un 5% anual, su período más largo de prosperidad económica en más de cuatro décadas. Pero la situación internacional ha cambiado, y sea cual sea la estructura y las políticas que hayan desarrollado los países latinoamericanos es previsible una caída importante por diversos factores derivados de la crisis global. Entre ellos, la pérdida de valor de las materias primas agropecuarias y mineras en los mercados internacionales.
Más grave aún será el impacto en aquellos países que serán afectados por la caída de las remesas de sus inmigrantes en el exterior, hasta ahora uno de sus principales ingresos de divisas.

Por Carlos Iaquinandi, Agencia SERPAL, Servicio de Prensa Alternativa. www.serpal.info