Todo indica que existirían deficiencias en el Comité Técnico Ejecutivo, más conocido como el CTE. Eso es lo que se desprende de una auditoría realizada por la UNS y la UTN respecto a su funcionamiento durante el año pasado.
La preocupación puesta de manifiesto por algunos miembros de la Comisión de Medio Ambiente del Concejo Deliberante frente a los datos obtenidos del estudio, difieren de la opinión del titular del CTE, ing. Fernando Rey Saravia, quien reconoció las falencias del organismo en 2006 pero señaló que esa situación ha mejorado en el presente año.

Cosas que hacen dudar
EcoDias dialogó con el concejal e integrante de la Comisión de Medio Ambiente, Roberto Ursino, quien regresaba de una reunión del Comité de Control y Monitoreo (CCyM) donde se analizó justamente la auditoría del Programa Integral de Monitoreo del período 2006 en el cual, dijo el edil, se ha cumplido aproximadamente un 50% de lo pautado para todo el año: “Se argumentan distintos tipos de circunstancias, algunas de carácter del personal mismo acerca de que lo que había no alcanzaba para realizar todas las tareas que estaban encomendadas por el PIM. Otra es la falta de equipamiento y otro problema es lo que se tarda en el acto administrativo para seguir adelante con cada uno de los insumos, cada una de las contrataciones que se debe hacer… Se demoran muchísimo los tiempos en todo lo que Contaduría de la Municipalidad y se retrasan las cosas”.
Respecto a los datos de la auditoría figuran cuestiones como estudios de la ría que “se hicieron el 30% de lo que se tendría que haber hecho” y estudios acerca de la calidad del aire que según el concejal tampoco se hicieron de la forma en que deberían hacerse: “Había que monitorear las emisiones en las chimeneas y no se hicieron porque no estaban las ART contratadas para los técnicos que tenían que subir. Es una barbaridad cuando la tasa ambiental es de 3.200.000 pesos, es un número interesante para controlar el medioambiente de la ciudad. Es plata que ponen las empresas del sector y van a Rentas Generales aunque está afectada pura y exclusivamente a lo que es control ambiental. Pero bueno… a uno ya le hace dudar que ese dinero sea exclusivo para eso y se deriven para otras cuestiones”.

Descentralización: “Algunos no lo quieren entender”
Respecto a soluciones, el concejal Ursino señaló la idea de hacer del CTE un ente autónomo. En la reunión del CCyM, Ursino insistió con este proyecto que, según relató, el dr. Eduardo Conghos no quiere entender: “Cuando me retiraba de la reunión les decía que la única forma de rever esto es que sea un ente autónomo porque sino es imposible. Pero algunos creo que no lo quieren entender y fundamentalmente el subsecretario de Gestión Ambiental. Me extraña mucho que tal vez no comprenda esta situación porque el es un ambientalista y tiene que defender el tema ambiental y no al gobierno”.

“La situación se recompuso”
El titular del CTE, ing. Fernando Rey Saravia, también dio su parecer respecto a la auditoría realizada por las universidades reconociendo las falencias que allí aparecen pero aclarando que se trata del año 2006. En su opinión difiere mucho de lo que acontece actualmente en el organismo: “En 2006 hubo una crisis institucional muy grande, a la que no escapó el CTE. No pudimos terminar los programas pero esta es una situación que afortunadamente se recompuso. Yo siempre digo que la venida del dr. Conghos fue positiva en ese aspecto, vino a recomponer un cuestión que se había deteriorado”.
Entre las deficiencias más importantes, Rey Saravia señaló el programa de monitoreo de la ría, prácticamente suspendido y reiniciado recién en octubre: “Cumplimos con un 30% de lo previsto, también pasó algo parecido con otros programas”.
En cuanto a hechos que argumenten mejoras en el CTE, su titular contó que se recompuso el contrato con el Instituto Argentino de Oceanografía que se encarga de realizar el muestreo y los análisis de la ría, por lo que en este año no hubo discontinuidad en cuanto a estudios. También destacó la recomposición salarial del organismo lo cual va a permitir incorporar personal que se había marchado y la llegada de nuevo equipamiento: “Los programas este año se han recompuesto y estamos lanzado nuevas líneas de acción, hemos mejorado al punto de que a fin de año vamos a llegar a duplicar la cantidad de análisis de efluentes líquidos, hay una cantidad de cosas que van a surgir y en la próxima auditoría esperamos ser mejor conceptuados”.

Empresas en infracción
Rey Saravia también informó acerca de los resultados obtenidos en los últimos monitoreos de efluentes líquidos que determinaron que se labren actas de infracción para algunas empresas del Polo Petroquímico. El titular del CTE señaló que algunas sanciones tienen que ver con actuaciones conjuntas que se realizaron con la Secretaría de Política Ambiental de la Provincia de Buenos Aires “que en los últimos tres meses fue realmente histórico, nunca habíamos hecho tantas actuaciones conjuntas”.
Según Rey Saravia también se está trabajando intensamente con las empresas mejorando de común acuerdo los monitoreos conjuntos: “Las empresas en infracción fueron Cargill, Solvay Indupa, PBB Polisur y algunas otras cerealeras. Fueron en base a que superaron en algún caso humos (PBB), en otro niveles de mercurio en efluentes líquidos (Solvay), en otro sólidos sedimentables y demanda bioquímica de oxígeno (Cargill), ruidos, en fin, ha sido variado, tal vez desusadamente importante porque no era tan frecuente”.
El titular del CTE se mostró muy satisfecho por el trabajo realizado a tal punto que declaró: “Nos felicitamos de haber incrementado nuestro monitoreo de efluentes líquidos porque eso permitió empezar a detectar cosas que tal vez no se detectaban”.

¿Qué es el CTE?
La llamada Ley Tunessi -ley 12.530- en el artículo 10 crea el Comité Técnico Ejecutivo, el cual tiene a su cargo la ejecución de aquellas tareas que permitan lograr los objetivos enunciados en la Ley, siendo financiado a través de una tasa municipal a cargo de las empresas ubicadas en el Polo Petroquímico. El organismo se dedica al control y monitoreo del medio ambiente y tiene como objetivo asegurar a la comunidad una mejor calidad de vida en armonía con el progreso industrial y tecnológico.
Su sede está ubicada en San Martín 3474 (Ingeniero White), lindera a la Delegación Municipal, y realiza monitoreos de emisiones líquidas y gaseosas, control de la calidad de los cuerpos receptores (ría, atmósfera), medición y control de las emisiones sonoras, inspecciones a empresas para verificar el cumplimiento de la legislación vigente, capacitación de sus integrantes en los procesos productivos de las plantas involucradas, así como también debe confeccionar una base de datos de monitoreo de calidad de aire y ría, emisiones líquidas y gaseosas y mediciones sonoras.