Durante la semana del 10 de diciembre en todo el país se realizaron los actos de asunción de las nuevas autoridades elegidas por el voto popular el 27 de octubre pasado. Bahía Blanca oficializó su candidato a través de la firma del acta y el primer discurso de Breitenstein en el hall municipal.

Tras 20 meses de gobierno interino y luego de una elección que renovó su mandato por 4 años con el 37, 3% de los votos, el dr. Cristian Breitenstein asumió la intendencia de la ciudad en el hall central del edificio de la Municipalidad.
Con el escenario al frente y las sillas ubicadas en torno al mismo, la música de la banda juvenil municipal acompañó la espera y la organización de los invitados hasta que llegó el momento del ingreso del jefe comunal y se hizo escuchar la música del disc jockey.
Con la presencia de familiares, sus padres Luis y Dora, su esposa Mariana y sus 3 hijos, empleados municipales, concejales, autoridades militares, policiales, judiciales y eclesiales, el intendente Breitenstein ingresó al hall pasado el mediodía del miércoles 12 de diciembre. Él mismo había elegido para ese momento el tema de la banda irlandesa U2 “I still haven’t found what I’m looking for”.
Visiblemente emocionado -con un ojo morado producto de un codazo en un partido de fútbol-, luego de unos minutos de saludar desde el escenario a los presentes, estampó la firma del acta de asunción junto con José Raúl Esteban Albornoz, el empleado municipal de mayor antigüedad, que ejerce sus funciones en el Tribunal de Faltas.
“En la ciudad de Bahía Blanca a los 12 días del mes de Diciembre de 2007 en presencia de vecinos, empleados municipales, concurrentes y el testimonio del empleado municipal con más antigüedad en esta comuna se procede a efectuar el acto de asunción del intendente municipal electo del partido de Bahía Blanca, dr. Cristian Breitenstein, por el período 2007-2011 en un todo de acuerdo al acta de proclamación emitida por la junta electoral de la Provincia de Buenos Aires”.

Hay equipo
Luego de la firma del acta se procedió a la presentación de los secretarios que acompañarán al intendente en sus tareas.
Anunciados por el locutor, uno a uno se dirigieron al escenario, donde recibieron efusivos saludos y aplausos (algunos más que otros). Luego se iban ubicando en fila detrás de Breitenstein, en riguroso orden, como señalaban las etiquetas pegadas en el piso del escenario.
Los nuevos funcionarios son el dr. Gustavo Mena, en Secretaría de Gobierno; el dr. Iván Budassi, en Legal y Técnica; el cr. Hugo Borelli, en Economía; el ing. Rubén Valerio, en Obras y Servicios Públicos; Ariel Zaballa, en Desarrollo Humano y Social; el dr. Guillermo Quevedo, en Salud; y el lic. Federico Weyland, en el Instituto Cultural. En tanto, el contador general será el cr. Guillermo Aispuro.
En el mismo acto se dieron a conocer los nombres de quienes estarán a cargo de las distintas delegaciones: Eduardo Bidondo en Norte, Norberto García en Las Villas, Mónica Mansilla en Noroeste, Carlos Dumrauf en Gral. Daniel Cerri, Carlos Adassus en Cabildo, Marcelo Díaz en Villa Harding Green, Sergio Naretto en Villa Rosas, Edgardo Morán en Centro y Hernán Meter en Ing. White.

El discurso
Luego de los agradecimientos a la familia, vecinos y vecinas que “nos votaron y los que no nos votaron”, a los “amigos que empezaron el camino de aquel 1 de abril de 2006” y al partido “por la identidad”, el intendente comenzó su alocución frente a los presentes que llenaron el hall de Alsina 65.
“Tengo un contrato a plazo fijo que he firmado con ustedes a 4 años y debo ser leal a ese mandato, el de transformar la ciudad de Bahía Blanca y entregarla el 10 de diciembre del 2011 totalmente distinta a la que recibí, en obras, servicio, cultura, dinámica, capacidad de emprender y todo lo que implica que una ciudad se proyecte hacia el futuro y hacia el mundo de otra manera. El objetivo para el 2011 es tener una ciudad integrada, desde la integración local, desde la integración barrial, desde la posibilidad de que los que están afuera del sistema se incluyan, regional, nacional e internacionalmente: Bahía no puede estar separada de la Provincia, la Nación y del mundo”.
En el discurso -impreso y en mano del intendente- abordó varios puntos destacados del modelo de gestión que propone para los próximo cuatro años, además de un repaso por las situaciones más complejas que atraviesa la ciudad en estos tiempos presentes.

Inversión y compromiso
“El proyecto que viene es un proyecto de reconstruir una integración. Lo primero que tenemos que recuperar son los años de desinversión que ha tenido la ciudad, fundamentalmente en infraestructura, por lo que planteo como objetivos básicos la extensión de las redes de distribución de agua y cloacas, y la pavimentación de calles”.
Breitenstein convocó a “hacer”: “Ya hemos discutido mucho y sobrediagnosticado la ciudad. Tenemos que recuperar los accesos a la ciudad, los servicios a la altura de la necesidad de la gente, buscaremos inversiones, financiamiento e inversores privados, porque endeudarse no es malgastar dinero”.
También remarcó la necesidad de avanzar con reformas estructurales que ya están en marcha, como la del transporte público, la reforma administrativa y la recolección de residuos, sobre el que especificó que “habrá un nuevo sistema, sobre todo en lo que hace al depósito final de la basura”.
Con respecto al compromiso y la participación de los ciudadanos, el intendente manifestó que “a veces, los bahienses tenemos un exceso de cultura de la queja, pero no nos comprometemos a trabajar para la ciudad. Por eso es necesario que la comunidad también se comprometa con lo público”. 
Según Breitenstein, “asistimos a tiempos de fragmentación social, desde lo social y lo económico, de divisiones, de peleas, de dificultades en la concreción de una sociedad y un proyecto colectivo. Desde lo público hay que poner resistencia a ese quiebre, un oposición a la fragmentación, el objetivo es tener una ciudad integrada”. E hizo un llamado de atención a la dirigencia política a ocuparse de los temas de la ciudad: “La misma definición de oposición trae consigo una carga negativa, tenemos que cambiar ese paradigma, definirlo desde lo positivo, desde la mejor opción. Hay que achicar la distancia entre la gente y los representantes, entendiendo que trabajamos para ellos, y que hay que dejarlos por fuera de las internas”.

Actores sociales
En un cambio radical respecto de su posición pública de bajar la edad de imputabilidad de menores, se pronunció en este 12 de diciembre por tomar decididas acciones en la atención de los problemas de la niñez: “No tenemos derecho a dejar a los chicos en la calle, a dejar que los chicos sean objeto del instrumento de mayores que a veces solamente quieren aprovecharse de ellos. El niño es un sujeto de derechos que merece ser protegido y cuidado, y vamos a darle autonomía al área de Niñez, Adolescencia y Familia porque es una cuestión de Estado. Y a los menores hay que cuidarlos, porque si no lo hacemos nosotros, no lo hace nadie”.
En su análisis del actual perfil de los planes sociales el jefe comunal refirió que “tenemos que lograr que los que son destinatarios de planes sociales puedan reinsertarse en el mejor esquema para un ser humano, la dignificación que da el trabajo. Tendremos una política activa y agresiva desde la oficina de Empleo para la reconversión de esos planes. Los beneficiarios van a tener que asumir responsabilidades, deberán trabajar, y si no lo hacen, se les caerá el plan”.
Las numerosas instituciones de la ciudad ocuparon su lugar en el discurso de Breitenstein: “Quiero que las instituciones intermedias se fortalezcan, sean agentes de transformación… Los clubes, sociedades de fomento, ONGs, serán ayudados para que no sean un lugar que expulsa gente sino un espacio de formación de personas. Vamos a aprovechar la infraestructura y la capacidad instalada, tenemos que revalorizarla para que sus integrantes se involucren y comprometan”.

Para culminar, previo a los aplausos y el saludo emocionado con su gente, mientras sonaba de fondo Joan Manuel Serrat, agregó: “Espero no equivocarme mucho, tener la humildad para corregir, calma para decidir, templanza en la derrota, magnanimidad en la victoria, paciencia para comprender, prudencia para decidir, firmeza para conducir y pasión y alegría para cambiar Bahía”.