Los prefectos de la “Media Luna”, región que abarca Santa Cruz, Beni, Pando y Tarija, cambiaron nuevamente de opinión. Inicialmente impulsaron junto con la oposición política a Evo Morales el referéndum revocatorio. Cuando el presidente firmó la convocatoria afirmando “no temo a la voluntad del pueblo”, giraron 180 grados y consumados ya sus particulares “referéndums” por la autonomía, afirmaron que no consideraban a sus regiones involucradas en la convocatoria. Desde el gobierno se dobló la apuesta y el ministro de gobierno afirmó que “parecía que los prefectos no se animaban a pasar la prueba del revocatorio”. Tras una serie de reuniones, el prefecto de Santa Cruz que lidera el plan de cerco y derribo del gobierno constitucional, afirmó “definitivamente iremos a ese referéndum revocatorio” al que curiosamente calificó de “capricho del Presidente de la República”, cuando fue precisamente la oposición la que propuso en marzo pasado la realización del referéndum revocatorio, por el cual, el presidente Evo Morales, el vicepresidente Álvaro García Linera y todos los prefectos de las nueve regiones bolivianas se someterán al voto popular y podrán ser revocados automáticamente si los votos en contra superan los que en su día obtuvieron a favor para ser elegidos. Evo Morales afirmó que en el caso de perder esta consulta, volverá a su parcela campesina en El Chapare, y retomará su labor como “cocalero”, produciendo la hoja que ancestralmente consumen los indígenas bolivianos. Para que el revocatorio signifique una derrota de Morales, sus opositores tendrían que obtener más del 53.7 de los votos, que fue el porcentaje por el cual fue elegido el 18 de diciembre del 2005. En el caso de los prefectos de la región de la “media luna”, ninguno de ellos superó el 50 % cuando fueron electos, pero se considera que los procesos autonómicos y la demagogia utilizada durante este proceso, les puede permitir superar el revocatorio. Si eso es así, la situación institucional quedaría en un “empate” de difícil salida si no es a través del diálogo. Si Evo Morales es revocado, es imprevisible la deriva posterior del proceso, ya que ante eventuales elecciones, no hay una fuerza política opositora hegemónica y el abanico de partidos tradicionales está muy desprestigiado. Por el contrario, si algunos de los prefectos de las regiones que declararon su “autonomía” en referéndums ilegales no consigue revalidar su mandato, este proyecto opositor gestado fundamentalmente desde Santa Cruz de la Sierra, la región de mayor desarrollo y riqueza del país, quedaría seriamente debilitado. Mientras llega la fecha del referéndum, el próximo 10 de agosto, uno de los temas centrales a debate es la utilización del Impuesto Directo a los Hidrocarburos, que el gobierno está utilizando para planes de asistencia social, como la “Renta Dignidad” para las personas mayores. Los prefectos, las reclaman para sus propias regiones, poseedoras de las principales reservas de hidrocarburos.

Por Carlos Iaquinandi, Agencia SERPAL, Servicio de Prensa Alternativa. www.serpal.info