Se firmó un convenio entre el Hospital Municipal
y el Incucai para la creación de un centro de donantes únicos de médula ósea
con referencia a nivel mundial.

Se estima que en Bahía
Blanca por año se producen entre cinco y seis casos de chicos con leucemia. De
ese número, la mitad va a necesitar un transplante y de esa mitad el 80 por
ciento va a precisar de un donante.
Pero encontrar un donante compatible no es fácil, por eso convertir a la ciudad
en una referencia a nivel internacional para captar dadores de cualquier parte
del mundo y, a la vez, para brindar la posibilidad de que un donante de aquí,
ayude a un paciente de otro sector, es sumamente importante.
El Hospital Municipal “Leónidas Lucero” y el Instituto Nacional Central Único
Coordinador de Ablación e Implante (Incucai), firmaron un convenio para la
constitución en Bahía Blanca de un centro de recepción de donantes permanentes
de células progenitoras hematopoyéticas.
En palabras sencillas, se trata de un registro único de posibles donantes de
médula ósea que funcionará en el nosocomio municipal.
La doctora Alejandra Larregina, jefa de la Unidad de Hemoterapia y Hematología
del hospital, habló con EcoDias y explicó los orígenes del proyecto: “La gente
de la ONG (Una Oportunidad Para Todos)
vino a invitarnos a participar de lo que ellos están haciendo que es un trabajo
de colecta de donación de médula. Si nosotros estábamos de acuerdo y
aceptábamos, era convertirnos en centro de registro de donantes de médula. Esta
gente son papás de chicos con enfermedades terminales en tratamiento, que se
están movilizando, han hecho un trabajo muy bueno de campo y tienen más o menos
200 dadores de médula para banco mundial, colectados”.
El trabajo que va a realizar este centro recientemente creado, es recibir a los
dadores voluntarios, tomarles la muestra, hacerles las explicaciones
correspondientes e ingresarlos al registro del Incucai: “Vinieron, nos pareció
que era una propuesta interesante, una propuesta terriblemente altruista por
parte de esta gente y que darle la espalda era un desatino, es gente a la que
hay que ayudar. A partir de la firma del convenio vendrán los presuntos
donantes de médula al banco de sangre de acá, se les va a hacer un cuestionario
mínimo, van a donar sangre como cualquier donante y se les va a tomar una
muestra que se remite a Incucai. Así entran en lo que se llama registro de
donantes de médula mundial”.
El doctor Roberto Santiago, director del Hospital Municipal, también recibió a
EcoDias y destacó dos aspectos positivos de todo esto. Uno de ellos el hecho de
que la gente va a donar sangre: “La sangre no se fabrica y el hecho de que la
gente tenga esa actitud es muy positiva porque los bancos de sangre necesitan
muchas veces sangre. Y segundo, que el Hospital Municipal en la región va a
participar del aporte de datos a un registro mundial. Eso para nosotros es algo
espectacular desde lo que significa liderar esto en la región y en Bahía Blanca
de la mano de la jefatura del servicio. Cuando la doctora Larregina vino a
plantearme esto dije que vamos a hacer mucho más que estar de acuerdo porque
que el Hospital Municipal participe en esto significa que esta base de datos va
a recorrer el mundo”.
Esto quiere decir que en caso de compatibilidad cualquier donante del mundo
podrá ayudar a un paciente bahiense o de la región. Asimismo, cualquier donante
de Bahía o la región, podrá dar una mano a algún paciente de cualquier país que
la precise: “Este convenio entre el Incucai y el hospital Municipal requiere
además del acta de compromiso, que nosotros aportemos nuestro recurso humano,
la capacitación la da el Incucai, nosotros haremos todo lo que ellos nos pidan
en cuanto a favorecer. Tenemos que ser facilitadores de esto y que en un solo
acto se hacen dos actos espectaculares”.

Comunidad mundial
Según Larregina, la ONG se vio movilizada por la situación de que Bahía es
una ciudad grande con un hospital regional que recibe a pacientes de la zona
pero cuyo único centro de donantes cercanos se encuentra en la localidad de Pigüé:
“Entonces, Incucai recibía llamados de Bahía Blanca de gente que quería donar
médula, y los tenía que remitir a Pigüe. Esta ONG, trabajando en conjunto con Incucai
fueron peregrinando buscando un lugar donde pudiesen tener su centro de
registro en Bahía. No nos olvidemos que Bahía además del hospital Municipal tiene
un hospital Regional que tiene un servicio de Pediatría importante, con
Terapia, y que recibe de muchos lugares, mucho del sur, que excede nuestra
provincia y no hay registro”.
Por otro lado, Santiago hizo referencia a las estadísticas mencionadas al
inicio y resaltó: “Ese dato de que por año hay seis casos nuevos de chicos con
leucemia de los cuales tres necesitan transplante y para necesitar transplante
necesitas alguien compatible, si tu comunidad es chiquita, las probabilidades
son muy pocas, ahora si tu comunidad es mundial, las probabilidades son
mayores”.
Más del cincuenta por ciento de los transplantes son exitosos, señaló Larregina
y agregó: “Al paciente lo cura. Le convierte otra enfermedad porque después
tiene las complicaciones del transplante como cualquiera, pero estás vivo. Más
del cincuenta por ciento es exitoso. Y estamos hablando de chicos que tienen
por delante un horizonte muy largo entonces no sabés lo que va a aparecer. Yo
hice transplantes en el 93 y del 93 a la fecha cambió todo. Desde la medicación
que se hace para el transplante hasta la que se hace pos transplante”.
Explicó Larregina que Incucai va a llevar a cabo una tarea de formación
gratuita de dos de las técnicas de hemoterapia que van a ser las referentes
para desarrollar: “Incucai nos da una capacitación que ya está fijada para el
18 de este mes, van a viajar dos de las técnicas de hemoterapia, y a partir de
que se firme el convenio y hecha la capacitación, vamos a ir recibiendo gente
de la comunidad que quiera donar”.
La ONG, dijo, tiene un listado de 200 personas que quieren donar sangre al
tiempo que se esperan más campañas al respecto: “Ellos tienen como un objetivo
a largo plazo de seguir sensibilizando a la gente, o sea que contamos con el
trabajo de ellos que sensibiliza a la población, los medios y la disponibilidad
del personal”.
Finalmente, el doctor Santiago afirmó. “Somos un facilitador para aumentar la
posibilidad para que los chicos tengan cura”.