Se estima que en las próximas décadas el cáncer va
a ir en aumento. Por esa razón se necesitan además de la implementación de
hábitos de vida más saludables, fortaleza en lo que refiere a las políticas de
salud.

El 4 de febrero
fue el Día Mundial de Lucha contra el Cáncer, una enfermedad que va
incrementándose y que ya desde su nombre causa temor en las personas.
Todos o casi todos hemos tenido algún familiar o conocido que ha padecido uno
de los tantos cánceres existentes y eso nos lleva al miedo a tener que sufrir
algo parecido en un futuro. Hay maneras de prevenir el cáncer y es a través de
hábitos más saludables de vida pero igualmente se necesitan políticas fuertes
de Estado tendientes a combatirlo. Es que, como decíamos, el cáncer se está
incrementando y se espera que eso siga sucediendo dentro de unos años.
Las causas las explicó a EcoDias el doctor Eduardo Laura, director del Registro
de Tumores del Sur: “Lo general es que en el mundo lo esperable en las próximas
décadas es el aumento del cáncer y es una cosa que se entiende fácil si uno
entiende que la salud pública ha mejorado en todos los países de ingresos
medios e ingresos bajos, habitualmente llamados también en vías de desarrollo.
La salud pública ha ido haciendo progresos y eso es positivo y esos progresos
llevan a un aumento del promedio de vida de los habitantes. Y en los países
desarrollados también porque la mejora es continua, es un fenómeno demográfico,
si hay más gente en las edades mayores, como el cáncer es una enfermedad que
afecta más después de la quinta, sexta década de la vida, por ese motivo es
esperable a nivel general y a nivel mundial, un aumento del cáncer”.

Desarrollados Vs no desarrollados
Acerca de las diferencias entre países desarrollados y en vías de
desarrollo, la cuestión pasa a ser importante ya que estos últimos cuentan con
menos recursos para atender casos, hacer el control y la prevención “y entonces
por el fenómeno anterior de la mejora de la salud pública y el aumento del
promedio de vida, que las enfermedades infecto contagiosas se van dominando, la
proporción que ya se nota desde hace quince años va cambiando porque antes el
cáncer era un problema que predominaba en los países industrializados o
desarrollados y era menor la proporción. Pero ya ahora la proporción a nivel
mundial es mayor en los países en vías de desarrollo y en los próximos treinta
años esa tendencia se va a aumentar así que nuestros países tienen que
prepararse con la formación de profesionales y de salubristas para enfocar las
medidas de prevención de forma de que se controle más el cáncer y haya menos”.
Se considera, hoy día, que aproximadamente el 50 por ciento de todos los
cánceres se pueden prevenir con medidas adecuadas de salud pública. Uno de los
puntos más conocidos es la fuerte vinculación entre el hábito de fumar y la
posibilidad de cáncer: “Se reconoce que del 23 al 30 por ciento de todos los
cánceres derivan del hábito de fumar por eso los países desarrollados, desde
los años 70 iniciaron programas muy sustantivos para que la gente entienda esto
y fume menos o deje de fumar. Esos programas que han sido liderados por países
como Canadá, Finlandia y Estados Unidos han dado sus frutos y 20, 25 años
después han visto disminuir las tazas de cáncer en esos lugares”.
Países como Argentina empezaron un trabajo similar mucho tiempo después:
“Tenemos como 30 años de desfasaje que lógicamente los beneficios los vamos
viendo mucho después. Hay ya beneficios, en los estudios de prevalencia de
tabaquismo en Argentina hechos por el Ministerio de la Nación han demostrado en
los últimos 15 años una disminución. Estábamos por encima del 30 por ciento de
frecuencia de fumadores en los adultos y hoy estamos por debajo de esa cifra
con 27 por ciento aproximadamente. Pero estamos muy lejos de lo que logra
California o lo que a logrado Brasil que empezaron mucho antes y que hablan sus
estadísticas del 15 por ciento”.

Bahía Blanca
Otra de las consideraciones que hizo el doctor Laura refirió a la situación
en Bahía Blanca. En ese sentido habló de estudios específicos de la
municipalidad, la Universidad Nacional
del Sur y la ONG APEC:
“Formalizaron en el 2011 un convenio para hacer estudios específicos en
respuesta a las inquietudes de las poblaciones de Ingeniero White y Villa Rosas
que son las más cercanas al polo industrial. Hicimos llegar un informe en
diciembre donde en el período estudiado 2003/2007 que son los últimos datos
accesibles se puede dar tranquilidad a la población. De las 15 topografías con
mayor incidencia de cáncer estudiados, no se encontraron diferencias
significativas en doce de ellas lo cual corresponde al 80 por ciento, y se
encontraron diferencias significativas en 4, estomago, vejiga urinaria y
próstata, siendo las tres mayores en el resto de Bahía Blanca que en los
barrios más cercanos al polo industrial”.
En mujeres, sobre 16 localizaciones estudiadas, en 15 no se registraron
diferencias lo cual corresponde al 94 por ciento. Por su parte, se encontraron
diferencias significativas en cáncer de mama siendo más alto en Bahía Blanca:
“Esta es la continuación de un estudio que ya se había hecho con datos del 89 y
del 2002, ahora se continuó con datos del 2003/2007 y se confirma que realmente
por lo menos no se ve una diferencia que justifique la angustia o las
inquietudes de los vecinos. Solamente en cáncer de pulmón en dos períodos
aparece en la comparación indirecta más alto en White pero hay mucha
información de nuestro grupo de trabajo y de otros trabajos científicos de que
la población de Ingeniero White tiene un hábito de una prevalencia de fumar muy
superior al resto vinculada a veces a cuestiones socio culturales”.