En el Concejo Deliberante se presentó un proyecto de resolución a través del
cual se pide a la Cámara de Diputados provincial, que de inicio al proyecto de
ley para complementar la adhesión a la Ley Nacional de Prevención del Suicidio.
Una de las preocupaciones al respecto refiere a las coberturas de obras
sociales y prepagas para víctimas de intento de suicidio y para las familias
involucradas.

Según salió publicado en el parte de prensa del Concejo Deliberante, la
edil Gisela Ghigliani (FPV – PJ) y su colega Raúl Woscoff (Integración
Ciudadana), presentaron de manera conjunta un proyecto de resolución mediante
el cual se solicita que la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos aires,
de inicio al proyecto de ley para complementar la adhesión a la Ley Nacional de
Prevención del Suicidio.
La ley fue recientemente sancionada por el Congreso de la Nación y constituye,
para los autores del proyecto, un verdadero plan para el abordaje sistémico de
la problemática del suicidio.
La normativa no solo contribuye en aspectos fundamentales como prevención,
asistencia, capacitación y trabajo en red sino que también hace hincapié en
cuestiones muy importantes que refieren a las obras sociales y a las prepagas.
En ese sentido, los concejales mencionados también presentaron un proyecto de
resolución para hacer saber a las obras sociales con delegación en Bahía
Blanca, que deben brindar cobertura asistencial a las personas que hayan sido
víctimas de un intento de suicidio y a sus familias como también a las familias
de víctimas de suicidio.
La concejal Gisela Ghigliani es la presidenta de la Comisión de Salud Pública
del deliberativo local y como tal, dijo, acompañó a Woscoff, a pedido de éste, en
las iniciativas. Desde el Concejo se trabaja sobre el tema a través de la Mesa
de Abordaje de la Problemática del Suicidio.
EcoDias entrevistó a Ghigliani acerca de los proyectos presentados para adherir
a la ley nacional: “Me parece que es seguir en la línea que venimos trabajando
en el Concejo porque acá vos sabés que está funcionando la mesa, una vez al
mes, donde nos reunimos todos los actores y muchas de las cosas que se
sancionan en esta ley, que se ponen en valor y que se marcan como centrales,
son aspectos que todos los actores sociales y profesionales que están aquí en
Bahía trabajando alrededor de esta problemática, han venido planteando en estas
reuniones”.
Ghigliani agregó que ya se hizo un registro de intentos de autoeliminación,
proyecto aprobado en el Concejo y visado por todos los participantes de la
mesa: “O sea que tuvo el consenso y el apoyo técnico y profesional así que eso
está implementado. Por supuesto las cosas hay que empezar a utilizarlas, ir
aceitando los engranajes digamos a medida que uno va empezando a trabajar en el
tema pero es un paso. Después el tema de trabajar en educación, trabajar en la
posvención, trabajar en el tema de las familias, de las redes sociales, cómo se
transmite toda esta información en los medios. Existen protocolos pero ver si los
estamos utilizando bien, hacer observaciones pero siempre propositivas y
proactivas, a veces uno no hace un comentario con mala intención pero siempre
con el fin de mejorar”.
Dentro de la mesa de abordaje hay familias que han sufrido el suicidio, por ejemplo,
de algunos de sus hijos y por ello, destacó Ghigliani, es importante escuchar
la experiencia de quienes atravesaron situaciones tales: “Uno lo atraviesa del
lado profesional, tiene otra mirada entonces la verdad que escuchar, ver por
ahí los signos que ellos hoy consideran que hubieran sido signos de alarma,
porque sabemos que hay muchas personas que quedan con una gran sensación de
culpa, como que pudieron haber hecho algo más, nos parece que su experiencia es
muy enriquecedora”.

Coberturas de verdad
Otro punto señalado por Ghigliani y que merece atención es el referido a
las redes sociales: “Hoy las redes a veces en vez de funcionar como algo
integrador, de difusión, de tener compañeros, amigos y entretenimiento, son
espacios tóxicos, de maltrato, acoso…Tenemos leyes de ciber acoso que es por el
grooming, se está poniendo en televisión, en los medios hablando de estos temas
pero por ahí algún chico que está sufriendo esto no o comenta en su casa,
entonces son muy interesantes todas las miradas”.
Entre quienes integran el grupo de trabajo, Ghigliani mencionó al Colegio de
Psicólogos, profesionales de los hospitales Penna y Municipal, algunos
profesionales de Psicología que ofrecen su servicio en una casa fúnebre,
docentes, inspectoras, papás y ONGs: “Me parece que es bien amplia la mesa y la
verdad que la mirada es muy completa”.
Por su parte, EcoDias consultó a la concejal sobre los aspectos fundamentales
de la ley por los cuales se precisa de la adhesión: “A nosotros nos parece que
hay que adherir como un gesto fuerte también y simbólico de hacia dónde
queremos ir. Y tiene también una pata muy importante que es el tema de las
obras sociales y el financiamiento porque por ahí el episodio agudo de alguna
persona que tiene un intento, es esa internación y tratamiento del episodio
agudo pero es muy importante poder continuar con esa contención. Y que no es
solamente ese joven o la chica o el adulto o la mujer que sea, sino que primero
que no lo podés medir, no podés decir “yo te doy diez sesiones y con esto ya
está”. No es una cosa cerrada, depende de la historia previa, de la familia que
tiene, de la red de amigos, de cuánto tiempo viene digamos con este problema,
si tiene una enfermedad de base, si consume alguna sustancia o consume drogas.
Entonces no es tan lineal digamos un tratamiento y ahí es donde se complica”.
En ese sentido, continuó, la ley viene a poner blanco sobre negro en temas como
pedir financiamiento y estrategias de prevención: “Habla de los registros,
habla de las estadísticas que nosotros localmente empezamos a caminar en ese
tema con intentos de autoeliminación, entonces me parece que adherir es un
gesto fuerte y simbólico. No porque uno va a empezar a trabajar de esa manera,
ya se viene haciendo pero a veces uno queda digamos preso de profesionales que
por voluntad propia se interesan”.
Para entender más la problemática y la necesidad que la ley se cumpla,
Ghigliani informó que epidemiológicamente entre las muertes de jóvenes
adolescentes “que son las causas externas, tenemos los accidentes y los
suicidios. Entonces, es una problemática. Ya se sabe que todos lo temas
vinculados a salud mental lo planteaban para 2020 como una epidemia, lo estamos
viendo antes. Para 2030 se considera que van a ser la depresión, los cuadros
maníacos depresivos, fobias, ataques de pánico, van a ser las causas más altas
de ausentismo inclusive, se está analizando eso. Tendrá que ver con la vida
cotidiana, con el estrés, las presiones, lo que uno quiere ser, lo que te dejan
ser, toda esa cuestión. A veces no todo el mundo lo puede poner en palabras, no
todo el mundo puede acceder a una terapia entonces me parece que es importante
adherir porque es muy importante el tema del tratamiento”.
Para Ghigliani las obras sociales se ocupan del tema de una manera muy biologista
por las razones ya explicadas anteriormente. EcoDias le preguntó si eso se hace
por desconocimiento: “No, a veces los aportes que por ahí para el sueldo de un
trabajador son importantes, cuando uno lo ve del otro lado, en la
contraprestación y cómo se lleva esos recursos la tecnología ultra moderna,
cómo se va despojando esos recursos de esto que tiene que ver mucho también con
el trabajo de contención, de asistencia a las personas que atraviesan esta
situación”. La edil puntualizó que hay escasos recursos para la prevención y la
medicina clínica y lo mismo ocurre para las coberturas con psicólogos.
En cuanto a la mesa de abordaje del Concejo, se reúnen todos los segundos
miércoles de cada mes: “No se ha suspendido ni siquiera en el verano y ahora se
están organizando actividades. Hay un grupo que trabaja en el registro como
para hacer el pulido y que la herramienta sea sencilla de cumplimentar en cada
actividad porque esto va a una guardia por ejemplo y uno sabe que las guardias
por ahí pasan cien personas y no es tan fácil a veces ponerse a hacer un papel,
aparte que los médicos somos difíciles para escribir. Después está el grupo de
educación, también hay un grupo que está en contención de familias, temas de
protocolo en comunicación así que hay cuatro, cinco líneas que se están
trabajando y, como yo digo es empezar a andar el recorrido e ir viendo qué
podemos ir cumplimentando”.