«Ni bien paró la lluvia, llegó el Ejército con el municipio», reconoció el presidente de la Cooperativa de Trabajo Il Lavoro, Fernando Polis, en diálogo con Radio Argentina, de Resistencia.

Transcurridas algunas semanas de la tragedia, los hechos son incontrastables: sin la presencia activa del estado y la sinergia de las organizaciones sociales, Bahía Blanca no habría podido superar el caos inicial, ni tampoco tener perspectivas de recuperar cierta normalidad, como se va logrando paulatinamente.

La Cooperativa Il Lavoro -una de las tantas que prestan servicios en la vía pública a la comunidad bahiense-, desplegó a sus trabajadores en cuestión de horas para ejecutar el plan de contingencia diseñado por el intendente Federico Susbielles y su equipo.

Polis describió con crudeza lo vivido: «Quedó todo devastado, fueron baldazos de agua sin parar durante horas interminables. Hubo gente que quedó encerrada en autos, la corriente los arrastraba con fuerza… Los servicios básicos colapsaron”.

El dirigente advirtió sobre la recurrencia de estos fenómenos: «Estos eventos se repiten con frecuencia creciente. Y enfatizó: «Se requiere inversión en infraestructura hidráulica y protocolos más ágiles».

Su balance fue contundente: «Esto recién comienza. La reconstrucción será prolongada y exigirá coordinación constante». Su testimonio refleja no solo la magnitud de la tragedia, sino también la capacidad de resiliencia de una comunidad que deberá reconstruirse colectivamente.

Autor: Redacción Ecodías