El Voluntariado del Hospital Penna (HIGA) está conformado actualmente por 35 personas, que desempeñan acompañando y supliendo las necesidades de las personas de Bahía Blanca y la zona que se encuentran internadas o realizando tratamientos médicos.

Uno de sus proyectos más importantes para el año, era la conformación de una Red de voluntariados para entrar en contacto con las agrupaciones que trabajan en el hospital. De esa manera, convocaron a referentes de Ayuda Le, Las Lilas, La Casa Ronald, El Club de los Peladitos, Programa Lilian, y Amamar.

Luego de la primera reunión, la actual presidenta de HIGA Penna, Mirta Christy, contó: “La respuesta fue positiva. Con Las Lilas y Amamar ya teníamos fechas en las que coincidíamos, y trabajábamos juntas para hacer obsequios, para hacer entregas. Para esas fechas estamos siempre los tres colores, los tres grupos presentes”.

“Ahora fue como darle una vuelta de tuerca a eso. Si más instituciones están trabajando también para los pacientes del hospital, queremos extender esto, sentarnos alrededor de una mesa y ver qué inquietudes tenemos, en qué coincidimos, en qué podemos apoyarnos o saber cómo complementar nuestras tareas”, afirmó, en diálogo con la Cooperativa de Trabajo Ecomedios.

De esta manera, y con el aval de la Dirección del Hospital, comenzaron a generar propuestas que los una a diferentes áreas de institución como Terapia Ocupacional, y Servicio Social. Uno de los primeros pasos será una instancia de capacitación con el área de docencia del hospital.

En relación a qué personas son las que se acercan a colaborar con estos espacios, expresó que “en general, la mayoría de las agrupaciones que tienen que ver con el cuidado, desde los merenderos o sociedades de fomento, que por ahí son más mixtas, tienen que ver con más presencia de mujeres que de hombres. En el pasado había más voluntarios hombres, ahora solamente hay uno”.
En esa línea, indicó que, en general, los hombres se desempeñan con mayor facilidad en las zonas de clínica médica o quirúrgica, y que las mujeres se dedican a las áreas de maternidad o neonatología, para mayor comodidad de las madres que se encuentran en la residencia.
“Creo que pasa por ahí. Siempre ha habido predominancia de mujeres, eso es real y concreto. Puede pasar por eso de que se extiende de las tareas de cuidado, de la que históricamente la mujer hace hacia su familia, sus vecinos, y se vuelve a replicar en lugares como estos”, concluyó.

Autor: Redacción Ecodías