Trump, te equivocaste, los enanos crecieron.
Para dividir lanzas gestos zalameros a Putin, y te tiras contra China, te
querés meter en China y te “pararon de entrada”.
Haces lo mismo que Bush y Obama, llevar las cosas al límite, para después
sentarse a conversar.
No creo que lo puedas hacer con China, ya no sos el dueño del mundo y no temen
tus amenazas.
Rusia es el país que más territorio tiene.
No sé si toda Rusia es explotable en agricultura, sí sé que con el apoyo de
China, Rusia se podría convertir en una gran potencia.
No sos Goliat, tampoco sos Ulises, ni China es Penélope.
El mundo dejó de ser de Estados Unidos.
Hace 50 años Israel se apoderó de las Alturas del Golán que eran tierras de
Siria.
Bombardeó Damasco, ocupó tierras en Cisjordania y convirtió en un gueto a Gaza
en Palestina.
Allá por 1935 se creó en la Comunidad Judía de mi pueblo en Médanos (Provincia
de Buenos Aires) un movimiento político “Liga Pro Palestina Obrera” (aún no
existía Israel como estado) y patrocinaron un evento teatral donde se daba una
obra con participación de niños, y otra para mayores (yo participé de la
primera).
Si Obama en la última Cumbre de las Naciones Unidas te quitó el apoyo y
quedaste sola ante el mundo, los sueños judíos tanto de Israel como de los
judíos de Estados Unidos (viven más judíos en Estados Unidos que en Israel), de
ser quienes dominaron el mundo árabe musulmán, dentro de la geopolítica han
perdido vigencia.
Estados Unidos creó otros movimientos para desplazarte ante ellos, Al Queda,
ISIS y ahora el terrorismo.
Trump: “El que a hierro mata, a hierro muere”.
Fogoneaste (Estados Unidos) las guerras, en Irak, en Libia, en Afganistán, en
Siria, en Ucrania, en Yemen. Tu propio pueblo llegará un momento que tendrá que
elegir.
Entre los dólares que les paga a sus soldados mercenarios, o los de los
soldados que allí mueren.
Ni Estados Unidos es hoy el dueño del mundo, ni Israel es el Pueblo elegido por
Dios.
¿Quién dirá “Kadish” cuando mueran Netanyahu y su gobierno?