El pensamiento es la máxima expresión de la energía
concentrada a nivel humano.
El descalabro del mundo está tocando los límites, tanto de la preservación de
la naturaleza como de la propia especie humana.
Elucubro estos pensamientos mientras se discute en las Naciones Unidas. De
todas las intervenciones la que más me agradó fue la del presidente de la
República Popular China. En apretada síntesis creo que es la visión del mundo
-tal como lo ven y lo interpretan los chinos- es la más real y objetiva, dentro
de la realidad que vivimos, además “inspira confianza”.
Los pueblos del mundo lo están viendo, y exigen a sus gobiernos la
responsabilidad que les concierne.
En épocas normales la transición de un sistema de vida a otro -más favorable
para el conjunto de la humanidad- sería lenta, llevaría décadas.
Pero estamos en medio de una crisis total, en medio de una tercera guerra
mundial (no declarada), con problemas que tienden a profundizarse en cada país.
Y eso hace y hará que se aceleren los cambios que la humanidad reclama.
Lo que podría durar años, en la situación actual tendrá que afrontarse -en
algunos casos- en pocos meses. Es lógico que esto ocasiona y agrega más
desconcierto e incertidumbre especialmente en las esferas gubernamentales de la
mayoría de los países aferrados a esquemas económicos financieros, que se
manejan y acompañan un sistema y modelo capitalista de producción que se
derrumba y no tienen respuesta ni soluciones que ofrecer a sus pueblos.
Estados Unidos con sus 320 millones de habitantes posee un poder de ahorro que
no pasa del 15 al 20 por ciento, China con sus 1360 millones de habitantes, el
poder de ahorro (poder adquisitivo) ha trepado al 50 por ciento. Aun no pueden
comprar varias viviendas para especular, no tiene sentido comprar varios
automóviles, o comprar empresas o campos.
La empresa Boeing de aviación (quizás la más grande de Estados Unidos)
instalará en el país asiático una fábrica de aviones “707” para producir 300
aviones para 3 empresas de aviación de ese país.
La expansión del turismo de China al mundo será gigantesca.
La otra expansión a nivel mundial será la elevación del índice cultural,
especialmente en la ciencia y en la técnica.
El mundo del futuro dependerá del grado de capacitación científica y técnica
que posea cada país.
La erradicación de la pobreza, salarios remunerativos que satisfagan las
necesidades de los pueblos y trabajadores, educación, salud, vivienda, llevará
a una “vida digna”, esto es posible.