El 13 de octubre culminó la Cumbre realizada en Cochabamba (Bolivia) sobre
Cambio Climático.
No me moví del televisor hasta escuchar al último orador.
Las cifras, las estadísticas, las revelaciones sobre los efectos, el
angustiante problema del agua potable, las consecuencias de sequías o intensas
precipitaciones de lluvias fuera de época, fueron el marco en que se desarrolló
esa Cumbre. Y el énfasis puesto en llevar las opiniones de los movimientos
sociales del mundo a la próxima reunión que se celebrará en Francia en el mes
de diciembre.
Sólo Maduro en un momento de su intervención dio una respuesta: La resistencia,
si no se convierte en lucha por el poder político, de nada servirá en la Cumbre
de Francia y sucesivas.
Los pueblos del mundo en todos sus niveles sociales no tienen conciencia,
seamos realistas: ¿Qué pasó con las elecciones en Grecia? ¿Qué pasó con las
elecciones en España? ¿Qué pasó en Portugal? ¿Y qué pasó en Argentina?
¿Por qué triunfan gobiernos que responden a las clásicas burguesías
capitalistas?
Las burguesías imponen sus candidatos, ¿no valen los instintos primitivos de
los pueblos a la hora de emitir con madurez y conciencia?
Jesús imploró a Dios: “Perdónalos Señor, no saben lo que hacen”.
500 años de esclavitud han destruido nuestra capacidad de razonar.
Entre el Discurso del Método de Descartes y la Crítica a la razón pura de Kant
(como conocimiento), la verdadera razón por la que el mundo debe cambiar y no
suicidarse todavía no ha pasado a ser patrimonio de los pueblos; y quienes
deberán impulsar esos cambios, no se han puesto de acuerdo entre ellos mismos.
Nunca me conformaron las explicaciones de por qué cayó la URSS, que a su vez
arrastró a todos los partidos comunistas del mundo, lo que entendimos antes
como izquierda hoy no existe.
El factor humano sin lucha por el poder, no tiene sentido.
Y no hay lucha por el poder sin ideología.
Trato de interpretar correctamente las relaciones de fuerzas que prevalecen en
nuestro mundo. La mayoría de los países de la tierra se rigen por el modelo
capitalista.
Los pueblos reclaman cambios contra el capitalismo.
La división de clases se profundiza, ¿por cuánto tiempo se mantendrán las
luchas de pueblos y países que buscan el camino del socialismo?
Si esos pueblos y países no logran doblegar a quienes responden a intereses del
capitalismo…
Lo digo como viejo soldado de la revolución (y participando en todas, sin salir
jamás de la trinchera).
Si una revolución triunfante, así sea electoralmente, no moviliza al pueblo, lo
arma ideológicamente (conciencia), no crea sus aparatos de seguridad, creando
milicias populares y un ejército fiel a la revolución, no podrá destruir el
antiguo sistema podrido y corrompido, e instalar uno nuevo.
Me lo dicen mis 90 años de lucha, la experiencia vivida y las luchas que
enfrentaran los pueblos para sobrevivir.
Sigo pensando en los grandes personajes que contribuyeron a interpretar al
mundo desde una nueva visión filosófica (Marx), pero sin perder de vista la
realidad económica, social y política de este mundo.