Tomando
distancia del programa de Macri y de algunos de sus posibles ministros,
enaltece, jerarquiza a nuestra Universidad la ciencia y la tecnología no solo a
la Patria en la que queremos vivir, el peligro de que podamos volver al pasado
se puede convertir en realidad.
Todos pretendemos los cambios, pero los queremos hacia formas superiores de
vida.
El 22 de noviembre no estamos discutiendo entre dos nombres, sino el destino
del país.
Yo votaré a Scioli, no porque simpatice con él.
Solo sé que si gana la derecha que personifica Macri, es retroceder en la
historia 50 años.
Sé también que después de las elecciones, gane quien gane, habrá un nuevo
desplazamiento de fuerzas acorde a lo que acontece en el mundo.
Y esos cambios son a nivel mundial.
Lo harán los pueblos (aún cuando no tengan la madurez y la conciencia
política).
Los cambios a futuro dependerán de la ciencia y la tecnología.
La humanidad es un largo proceso.
La elevación del hombre hacia formas superiores de vida, no sólo pasa por el
desarrollo económico, importante y necesario y en el que la ciencia y la
tecnología, como parte indivisible de la humanidad, tendrán un lugar, quizás el
más elevado en este periodo histórico que vivimos.