En ocasión del Día Internacional de la Toma de Conciencia del Abuso y Maltrato en la Vejez se realizó una jornada promovida por la Red Internacional para la Prevención Internacional del Abuso y Maltrato de la Tercera Edad.
En una jornada de debate en la que participaron distintos actores que trabajan con adultos mayores, se plantearon problemáticas y propusieron soluciones frente los problemas de abuso y maltrato con los que conviven muchas personas mayores.

El evento organizado por la Federación Regional del Sur de Jubilados y Pensionados y la Unidad de Gestión Local V del Pami, se llevó a cabo en las instalaciones del rectorado de la Universidad Nacional del Sur.
La apertura formal estuvo a cargo de Rosa Pan, quien se refirió a los alcances e implicancias del concepto de abuso y maltrato. La primera actividad fue la proyección de un video bajo el lema “ser viejo”, en alusión al tema de Joan Manuel Serrat.
Contó con la participación de distintos referentes abocados a la tarea de garantizar los derechos de los adultos mayores. Entre ellos, Rosa Pan, presidenta de la Federación Regional del Sur, Paulina Marturano, presidenta del Consejo Municipal de Adultos Mayores de la Municipalidad de Bahía Blanca, Nelly Elena Maluchelli, jefa de Anses Bahía Blanca, la licenciada Patricia Fernández, titular del INADI local, la licenciada Leticia Claverie, integrante del Ministerio de Desarrollo Social, y Diego Palomo, director ejecutivo de la Unidad de Gestión Local V.
Cabe destacar que se define como abuso o maltrato en la vejez a cualquier daño realizado a una persona mayor que debilite o afecte su estado físico, psíquico, espiritual o su bienestar social. Los tipos de abuso pueden incluir el abuso físico, sexual, emocional, explotación financiera, abandono, intimidación, discriminación y autoabandono.
 
El trabajo de la comisión
Paulina Marturano, presidenta del Consejo Municipal de Adultos Mayores, tomó la palabra para describir el trabajo del organismo con relación a mejorar la calidad de vida de los adultos mayores con derechos vulnerados.
Marturano se refirió al espacio con el que cuenta la comuna para que las personas mayores que se encuentren solas o en malas condiciones puedan pasar el día. “En el Centro de Día, desayunan, almuerzan, meriendan y se llevan la vianda para la noche. Y a veces tenemos que buscarles hogares sustitutos para que ellos pasen la noche. Tenemos el centro en Saavedra 984, allí asisten unas 20 personas todos los días”.
Paulina hizo hincapié en la mayor supervivencia de las personas adultas mayores y su relación con el maltrato: “La supervivencia es más larga, entonces hay familias que tienen al abuelo o abuela en una edad que no la quieren tener en la casa. El maltrato es algo que vemos a diario, que cada vez vemos más. Cada día hay más adultos mayores porque la vida se está alargando muchísimo, porque tenemos la medicina más avanzada y el adulto mayor tiene una vida más plena. El maltrato se ve en la discriminación, el querer sacárselos de encima, hasta violencia física de parte de los hijos”.
Según datos estadísticos mundiales, la esperanza de vida para las mujeres es de 79 años, y para los varones disminuye a 73 años.
“Acá en el municipio vemos muchos casos de familias que llegan al municipio diciendo que no los pueden tener en la casa y muchas veces hay casos donde no tienen para dormir”.
Por último, aclaró que desde la oficina del Consejo Municipal de Adultos Mayores se está trabajando con esta problemática en actividades variadas como natación, cursos de computación, tango, y formación laboral.

A nivel nacional
En representación de organismos nacionales, Nely Elena Maluchelli, de Anses, habló sobre la importancia en el trato del personal de instituciones hacia sus afiliados e hizo hincapié en la especial atención y cuidado que debería existir detrás de cada trámite.
El planteo realizado desde el Ministerio de Desarrollo Social de la Nación tuvo que ver con el cambio de paradigma -de un adulto mayor pasivo a un adulto mayor activo- y con la necesidad de que las instituciones trabajen de manera coordinada, optimizando recursos humanos y económicos.
“Mostramos cuál es la figura del Ministerio de Desarrollo Social de la Nación en el territorio y cuál sería nuestra función dentro de la ciudad y las ciudades aledañas. Fuimos a contar cuáles son las políticas sociales del Ministerio en el tema de adultos mayores”, detalló la lic. Leticia Claverie a EcoDias.
Entre los programas que se presentaron, hay uno vinculado a la prevención de abuso y maltrato que está a cargo de la Dirección Nacional de Políticas de Adultos Mayores. Su objetivo es la difusión de los derechos de los adultos mayores, el asesoramiento legal y psicológico a los equipos técnicos que estén trabajando en organizaciones de tercera edad (como ser centros de jubilados o federaciones de jubilados), o cualquier otra organización que esté interesada en asesoramiento y también trabaja con jornadas de sensibilización a la comunidad. La modalidad de trabajo propuesta es mediante la descentralización a través de programas, que se ejecutan en organizaciones civiles o gubernamentales.
La política de estado para las personas adultas mayores tiene como referente al Plan Nacional para las Personas Adultas Mayores 2002-2006, que recoge el mandato de las Naciones Unidas de proporcionar “un marco de referencia para la protección y promoción de los derechos de las personas de edad”.
“Explicamos los programas y nos focalizamos en los derechos de los adultos mayores, en los cuales el Ministerio se basa para trabajar. Estos son: participación, independencia, cuidados, autorrealización y dignidad”.
La organización de los programas se divide según sus derechos. En el de participación se ofrece el “Voluntariado de Tercera Edad”, cuyos objetivos son la generación de espacios de encuentro y de actividades entre distintas generaciones. El fortalecimiento de la capacidad asociativa de las organizaciones de mayores y la posibilidad de dar respuesta a cuestiones sociales y comunitarias de fácil resolución a través de actividades concretas realizadas por los adultos mayores.
“La experiencia cuenta” es un programa de transmisión de saberes y oficios tradicionales, que se propone recuperar los saberes y habilidades de las personas mayores, para ponerlos a disposición de su comunidad, manteniendo la memoria y la cultura.
En cuanto a asegurar la independencia del adulto mayor, existe el “Programa Nacional de Cuidados Domiciliarios”, un servicio de baja complejidad, de apoyo de la vida diaria del adulto mayor, con el propósito que los mayores envejezcan en casa.

Discriminación y maltrato
Si hablamos de discriminación, una de las formas de ejercerla sobre el adulto mayor es el maltrato. Pero hay otras formas de discriminarlo.
La titular local del Instituto Nacional contra la Discriminación, la Xenofobia y el Racismo (Inadi), lic. Patricia Fernández, presentó las líneas de acción que tiene el organismo en nuestra ciudad en relación a la temática.
“Con la tercera edad el Inadi tiene políticas sociales para adultos mayores, en coparticipación con aquellas instituciones gubernamentales y no gubernamentales, los centros de jubilados, el Pami, la Comisión Municipalidad de Adultos Mayores, que para el INADI son puntos clave, como un sistema jubilatorio solidario con cobertura universal, teniendo una justa retribución por lo que trabajaron”.
El acceso garantizado a la salud como política inclusiva fue uno de los puntos donde se centró Fernández: “La jubilación te lleva a una vida digna, por ende podés comprarte tus remedios, podés hacer turismo, aprovechar del ocio creativo y de disfrute, por eso se vuelve discriminatorio el tema de la vejez. En el caso de la salud, es el Estado quien debe garantizar el acceso a la salud a los adultos mayores”.

Desde el Pami
El director ejecutivo del Pami local hizo referencia al abuso y los reclamos de los afiliados, situación que llevó al organismo a tratar este tema.
“A partir del Día Internacional de Lucha contra el Abuso y el Maltrato del Adulto Mayor, hicimos una jornada de debate con todos los actores de la atención de los adultos mayores, un tema que no está en agenda y del que no se habla”, explicó Palomo, y señaló la referencia al tema planteada en reuniones mensuales con los centro de jubilados -constituidos en el Consejo Participativo Local-, así como en los centros de la región: “Los martes y los jueves recorremos los centros de jubilados de la ciudad para hablar con los adultos mayores de todas las problemáticas que atraviesan día a día”.
Así, frente a los reclamos, surgió la necesidad de hacer una charla para visibilizar el tema, para mostrar que el tema existe y necesita ser tratado. Que si bien hay maltrato y abuso en todas las edades, es hacia el adulto mayor donde se dirigen las acciones de Pami.
Uno de los temas más recurrentes de esas recorridas, es el tema del maltrato que reciben los adultos mayores desde los efectores del sistema de salud, como hospitales, consultorios de especialistas y médicos de cabecera.
“Este maltrato no está legitimado como tal porque se ha naturalizado este accionar, esta forma de tratar al adulto mayor que tiene que ver con la displicencia, con que ya está viejo, qué va a hacer a esa edad, tratarlos como chicos, retarlos. Todas formas de tratar al adulto mayor, que nosotros llamamos el ‘viejismo’, que no tiene que ver con pensar a esa persona como sujeto del derecho, como una persona con historia, presente y futuro más allá de su edad”.
El peor maltrato es el que está invisibilizado, el que todos naturalizan. En el ámbito del cuidado de la salud se ve claramente en el hecho de que un médico no revise adecuadamente al adulto mayor, no lo mire a los ojos, no lo llame por el nombre, o lo haga esperar en la calle -cuando debería esperar cómodo en una sala de espera-, que tenga esperas prolongadas para hacer trámites y no tenga un trato priorizado.
“El otro maltrato es el tema del cobro del plus para la atención médica. Después de toda una vida de trabajo, y siendo que de la jubilación ya le descuentan un porcentaje destinado al cuidado de la salud, se le cobra para atenderlo. Si bien el cobro del plus en Bahía Blanca es una excepción y no una regla, hay médicos que tienen esa práctica, que cobran por fuera de los contratos vigentes un dinero en negro, y además muchas veces pidiéndole al paciente que no diga nada que les cobraron, porque sino no los atienden. Porque si se hiciera una boleta, el Pami le devuelve ese importe, y nosotros después arreglamos con el profesional”.
De todas maneras, según Palomo, todos los efectores relacionados están haciendo un gran esfuerzo por que se termine, estas prácticas, junto a asociaciones médicas y distintas instituciones.
Mensualmente se reciben en promedio 50 denuncias en toda la región, la mayor parte de estos reclamos se relacionan a la mala atención, a los maltratos. “Por eso les recordamos a los afiliados de Pami que pueden cambiar el médico de cabecera que mejor le siente a la persona”.
A partir del reclamo, el Departamento de Legales de Pami hace un seguimiento y si detecta el incumplimiento ya sea por maltrato, por cobro de plus, por no dar un turno, se aplica una multa al profesional; en casos severos, se puede cancelar el contrato que el médico tiene con Pami.
“Hay una cosa que no podemos pasar por alto que es la desmemoria que hay hacia los adultos mayores, porque no nos olvidemos que nosotros estamos en una ciudad, trabajamos en instituciones que fueron hechas por estas personas, las calles, las cloacas, el tendido eléctrico, las farmacias, los hospitales, fueron construidos por quienes hoy son adultos mayores. Hay una desmemoria, una falta de agradecimiento, y ahora sí, los tratamos mal y les cobramos. Hay una falta de conciencia sobre el rol histórico y la importancia del capital social que significa tener adultos mayores”.