La Biblioteca Popular Bernardino Rivadavia cumplió años, institución cultural
que sigue vigente con el aporte de una actividad cotidiana sumergida en libros,
revistas y publicaciones, pinturas y mapas. Puertas abiertas al crecimiento y
permanencia a través de la fuerza de trabajo y compromiso con la comunidad
bahiense.

“El conocimiento de la Biblioteca Rivadavia es un contrasentido, tenemos
siempre problemas con la cantidad de socios pero tenemos muy buena respuesta de
los usuarios que vienen todos los días, que vienen a las actividades para los
chicos”, afirma Laura Faineraij, directora de la institución.
Las vacaciones de invierno llenaron las salas infantil y juvenil, “quiero
resaltar que este trabajo se logra gracias al equipo, Fermín, Lucas, Gala,
María Elisa, Carlos y Gabriela, son quienes tienen funciones en cuanto atención
al público y atención de la bibliografía. Me apoyo en ellos totalmente y
permanentemente” sumó Faineraij.
La biblioteca cuenta con un portal web, “el público puede consultar en el mismo
las características de la arquitectura, el edificio responde ciertas
particularidades como el hecho de que fue construido con la idea de que
funcione como biblioteca. Además, se pueden leer datos históricos”. El catálogo
bibliográfico está disponible para ser consultado y reúne toda la colección
bibliográfica de la biblioteca, no solamente de libros sino también de diarios,
revistas, mapas, “tenemos un archivo hemerográfico, toda la producción de
revistas y periódicos realizados en Bahía Blanca desde fines del siglo XIX está
en hemeroteca para la consulta. Una parte de ellos están digitalizados, sobre
todo los más antiguos que estaban deteriorados y ya se pueden consultar a
través del microfilme”.
El recurso de Facebook aporta todas las actualizaciones, “tenemos las novedades
de las actividades, y hace poco sumamos una cuenta en Instagram, gracias a los
colaboradores más jóvenes de la biblioteca, hay múltiples formas de comunicarse
y de enterarse de las propuestas. Nos interesa que la gente venga a la
biblioteca, tanto los chicos como los grandes”. La institución cuenta con wifi
gratuito para quienes asisten con sus netbooks, “cualquiera que desee venir con
su computadora o celular puede acceder”.
Las salas Infantil y Juvenil están dedicadas a la lectura de materiales, “son
de estantería abierta, es decir que se pueden tomar los libros y sentarse a
leer”. La sala Sarmiento es silenciosa y está acústicamente preparada para
quien viene a estudiar, “con la absoluta tranquilidad, un espacio para leer en
forma silenciosa”.

Más patrimonio
La biblioteca tiene una pinacoteca de obras, “son principalmente de artistas
bahienses, esas obras se van rotando periódicamente y se exhiben en las
galerías de acceso, siempre contamos con muy buenos artistas que solicitan
exponer sus obras en las galerías o en la sala Daniel Aguirre, estamos
mostrando actividad artística local, que va desde cuadros, fotografías,
caricaturas, dibujos”. En el mes aniversario se exhiben objetos pertenecientes al
patrimonio institucional, “vitrinas con objetos de la familia Caronti, quienes
fueron los primeros benefactores de la biblioteca, hay una muestra de algunos
objetos antiguos, tenemos libros de la autoría de Germán García, que fue el
bibliotecario que más impulsó nuestra actividad y algunas perlitas como los
primeros libros que se compraron en 1882, el primer libro que se prestó, el
primero que se inventarió, también un libro donado por Roberto J. Payró,
integrante de la comisión directiva”.
Biblioteca Rivadavia cuenta con una colección de mapas, es un proyecto que se
llevó a cabo con el Departamento de Geografía de la Universidad Nacional del
Sur, “realizaron la catalogación y digitalización de los mismos, eso también
abierto a la consulta y accesibles a fotografiarlos”.

Hábitos
Cumplir 135 años es muy significativo. “Estamos totalmente conscientes que los
hábitos no son los mismos que en 1882, que los textos son distintos y la
coyuntura es distinta. Deseamos que los tiempos sigan cambiando pero que la
necesidad de saber y conocer nunca se agote, que siempre se intente saber más y
que se venga a la biblioteca por eso”.
Faineraij describe el proceso de lectura como “maravilloso, sea de donde sea
que leas, la lectura va a seguir siéndolo. Además, es un proceso necesario para
las personas, para nuestra mente, para nuestra forma de ser, para nuestra forma
de conocer y no conocer, porque el que lee y que el no lee ambos toman una
postura frente a la vida”.
Talleres, talleres y más talleres se ofrecen todos los sábados: dibujo,
narración de cuentos, filosofía para chicos, fotografía, animación a la
lectura, “todos los sábados a las 10.30 hs., y son libres y gratuitas,
agradezco muchísimo a los talleristas que se acercan a darlos en forma
voluntaria, dedican su conocimiento y tiempo para realizarlos”.
La institución cuenta con el programa Bahía Lee, los lunes de 17 a 19 horas,
coordinado por Teresa Prost, “invita a la gente que está interesada en la
literatura en general, sobre todo la literatura en voz alta, es una actividad
gratuita”. Durante todo el año se puede disfrutar de los ciclos de cine, cada
viernes a las 16 horas en la sala Juvenil, “estamos teniendo una hermosa
respuesta del público, pasamos ciclo de cine policial americano, Stephen King,
cine extraño y tenemos planeado hacerlo con cine chileno”.
En el mes de agosto se estrenará un nuevo espacio, Filosofía para jóvenes y
adultos, “para público en general, será los días martes a las 16 horas, no hay
que inscribirse. Se propondrán actividades de reflexión, de lectura, de
pensamiento y comunicación”.
Es usual que las actividades sean para el disfrute de toda la familia, padres y
madres, abuelos y acompañantes de niñas y niños, “ya sea con la narración de
cuentos o con los talleres, tenemos la suerte que vienen juntos y lo disfrutan
por igual”.

UN LIBRO QUE VIAJA A TU CASA
Es posible realizar la consulta de libros de manera libre y gratuita. Para leer
las obras en casa solo hace falta asociarse a la Biblioteca Rivadavia, la cuota
actual es de 120 pesos mensuales para los adultos y para los más pequeños,
menores de 12 años, es de 60 pesos.