La Biblioteca Villa Duprat lleva
adelante hace dos años una bebeteca, proyecto interdisciplinario para mamás y
bebés del barrio. Estimulación, juego, lecturas, canciones, charlas
informativas para crecimientos integrales y felices.
“El proyecto nació en el taller de mamás y bebés en el año 2015, fuimos la
primer bebeteca de la ciudad, en los últimos meses se han creado otras en
diferentes bibliotecas populares pero la nuestra mantiene la concepción de
herramienta transformadora con un enfoque más integral y de trabajo con las
madres”, cuenta Laura Fuentes, bibliotecaria de la institución, en charla con EcoDias.
“Una de las problemáticas que detectamos en el barrio es que había un
número de adolescentes mamás muy grande, y por una relación personal con
Virginia Escudero, psicóloga que trabajaba en Envión, empezamos a armar este
taller de mamás para reforzarlas en su rol, orientarlas con respecto al cuidado
de los bebés, empezamos a entender que eran mamás muy chiquitas, de 16 años en
adelante, que al convertirse en madres abandonaban sus espacios naturales de
grupos de pares, de estudio, y que por el otro lado, quedaban dentro del ámbito
familiar y dejaban a cuidado de terceros a sus propios hijos”. Evaluando esta
situación y teniendo conciencia de la importancia del desarrollo de un chico
hasta los 3 años, Fuentes y Escudero comenzaron un trabajo de conocimiento y
reconocimiento de las necesidades de ambos grupos, “llevamos profesionales que
dieron charlas desde diversas perspectivas, no solo para generar un vínculo más
fuerte con los bebés sino también con temáticas como la lactancia, los
controles médicos, la comunicación con el bebé a través del juego, las palabras
y las canciones. Uno de los temas que surgió en el taller es que las mamás
donde estaban viviendo no tenían espacios para jugar con sus hijos y por eso se
armó la bebeteca”.
La actividad tomó forma entre junio y agosto de 2015, la bebeteca surgió como
un espacio vinculado a la biblioteca, abierto a todo el grupo familiar y con una
propuesta exclusivamente lúdica. “Mantuvimos el espacio de reflexión con las
mamás, que entendimos que era la figura vinculada al bebé de manera directa y
después integrar a los papás, y después lo que hicimos fue dedicar dos días,
uno al taller de mamás y otro a la bebeteca como espacio lúdico”. Más de 15
mamás asistieron, “incluso venían mamás desde el centro, de pronto uno de los
aspectos era que generaba curiosidad en mucha gente, de hecho recibimos visitas
constantes de estudiantes de nivel Inicial y Psicopedagogía de los institutos
terciarios locales. Después quedaban tan fascinados que volvían a realizar
actividades de juegos o de estimulación. Nos movimos en un ambiente admirable y
grato”. La instancia de trabajo fue calificada por Fuentes como grata y
admirable, “principalmente cómo los bebés se ponían en contacto entre sí,
permitirse este espacio de juego fue fabuloso porque muchos niños llegaban de
mundos de adultos, algunos presentaban retrasos en su desarrollo y al estar en
contacto con pares los superaron, por lo tanto a la semana estaban en pleno
movimiento, y se convirtieron en deambuladores todo el tiempo”.
No es novedad
Las bebetecas en general funcionan como espacios anexos a las bibliotecas, pensadas
como lugares donde hay libros para los más pequeños, “la dimensión de esta
bebeteca iba más allá, porque no solo se pensaba como un espacio donde hubiera
recursos de libros para bebés sino también un espacio de juego, estimulación,
orientación, de aporte de información para las familias, pensada en un sentido
más integral”.
“Cuando detectábamos alguna dificultad de salud les hacíamos a las mamás el
contacto con las salitas médicas próximas, también se hizo ese trabajo en ese
sentido para que tuvieran el control adecuado”. Además, el taller estuvo muy
concurrido con profesionales en estimulación, música, psicólogos y ginecólogos,
“con ellos se plantearon diversos temas entre ellos cómo incorporar a los papás
en el vínculo y también pensar en el próximo momento de maternidad. “Fue realmente
importante para sostenerlas a ellas, que también encontraron a un grupo de
amigas. Después festejaban juntas los cumpleaños de sus bebés, salían a pasear
con sus chiquitos, por eso creo que fue una experiencia maravillosa”. Bajo el
panorama de mamás muy jóvenes, “algunas de ellas no eran primerizas, pero a lo
mejor con la llegada del último hijo se habían propuesto un cambio en sus
vidas, entonces no solo establecieron una calidad de vínculo muy especial con
este último hijo sino que también decidieron cosas personales”. Si bien el
proyecto según propone Fuentes está abierto a ser aplicado en cualquier
comunidad, “la idea es que la bebeteca sea a medida de esa comunidad”.
Recursos
Fuentes asegura que el proyecto se llevó adelante por el compromiso con el
vecindario, ya que carecían de recursos económicos, “si una vez armado el
proyecto recibimos apoyo de un programa que coordina Javier Sáenz Coré, Carrera
De aquí a la luna, son maratonistas que corren una cierta cantidad de
kilómetros y a partir de eso recorrido se obtiene algún tipo de sponsoreo. Uno
de ellos fue EDES, ese ingreso nos permitió comprar un piso de goma, juguetes y
libros infantiles y Cooperativa Obrera nos obsequió una orden de mil pesos con
lo que compramos un gimnasio para bebés”. La solidaridad de los integrantes de
la biblioteca sumó juguetes de las propias casas, asimismo se realizaron
juguetes con objetos cotidianos.
El grupo se mantuvo hasta principios de este año, “cuando las mamás egresaron
del taller porque sus hijos están en jardín de infantes. Una de las cosas que
reforzamos es que las mamás continuarán con algún proyecto: terminar de
estudiar, hacer un curso de capacitación o encontrar trabajo para poder
independizarse económicamente y todos esos objetivos se fueron cumpliendo”. Por
eso, Fuentes considera que el trabajo está comenzando una nueva etapa, “puesto
que las madres y bebés han egresado, han cumplimentado el tiempo de trabajo
juntos al momento que los pequeños cumplen 3 años. Estamos armando un nuevo
grupo de mamás, para lo cual ya realizamos dos reuniones de planificación”. El
trabajo en dos planos fue la característica peculiar: el vínculo de la mamá con
su bebé y el refuerzo de la autoestima de las jóvenes, “trabajamos en lo que
ellas soñaban hacer, hicimos un acercamiento para reconocer si estaban
orientándose hacia eso que ellas deseaban o soñaban y cuáles eran las
dificultades, cómo soslayarlas. Hubo una gran ayuda entre ellas, si alguna
tenía que estudiar otra le cuidaba el hijo, entendiendo además el poder de las
mujeres cuando quieren hacer algo, cuando lo hacen juntas más”. La convocatoria
y propuesta fueron apropiadas por las asistentes, “no faltaban excepto si los
bebés estaban enfermos”, con una asistencia casi perfecta en la sede de
Peñaloza 172.
Uno de los aspectos que preocupaban era que los chicos comenzaran en los
jardines maternales, “en Bahía Blanca no hay muchos jardines maternales, menos
en la zona donde nosotros estamos”. Una de las mamás decidió comenzar sus
estudios en la Escuela de Enfermería del Hospital Municipal y consiguió lugar
en un jardín próximo, “se permitió que su hija tuviera su propio espacio de
estimulación en el jardín mientras ella podía continuar con sus estudios”.
Todos los niños en este momento están dentro de una institución educativa, “uno
sabe que en estos espacios, más allá del juego y del aprendizaje hay una mirada
de cuidado”.
> Directora
Valeria Villagra
> Secretario de redacción
Pablo Bussetti
> Diseño gráfico
Rodrigo Galán
> Redacción
Silvana Angelicchio, Ivana Barrios y Lucía Argemi
> Difusión en redes sociales
Santiago Bussetti y Camila Bussetti
> Colaboradores
Claudio Eberhardt
2023– Copyleft. Todos los derechos compartidos / Propietario: Cooperativa de Trabajo EcoMedios Ltda. / Domicilio Legal: Gorriti 75. Oficina 3. Bahía Blanca (provincia de Buenos Aires). Contacto. 2914486737 – ecomedios.adm@gmail.com / Directora/coordinadora: Valeria Villagra. Fecha de inicio: julio 2000. DNDA: En trámite
Desarrollado por Puro Web Design.