La Cooperativa de Trabajo Contex Ltda. nació de un primer taller fundado en 1998, donde cuatro trabajadores de los 800 que tenía la empresa Cattorini Hnos. -que se dedicaba a la fabricación de indumentaria masculina tales como jeans, chombas, remeras y pijamas- comenzaron a trabajar por su cuenta dado el abuso ejercido desde la patronal. En ese entonces la empresa había comenzado a despedir trabajadores, que desembocaría en el cierre definitivo de la empresa en el año 2000. Mientras tanto el mini-taller ubicado en Alem 467, de la localidad de Las Flores (provincia de Buenos Aires), iba aumentando su producción de camisas.

“Entre los primeros problemas que tuvimos, estuvo la falta de financiamiento, así que dejamos de lado lo financiero. Íbamos avanzando en lo que era la pata productiva cada vez más, pero nos encontrábamos con que había clientes que no podían pagar”, recuerda de esos inicios Claudio Decundo, actual síndico titular del Consejo de Administración de la Cooperativa Contex.

De aquella época desgraciada para muchos trabajadores argentinos, en la que el vaciamiento de empresas era corriente, 16 años después de su creación, la Cooperativa Contex se encuentra hoy conformada por 40 asociados y trabaja en la producción de camisería: camisas sport, de manga larga, manga corta y toda una línea de vestir apuntando a un público clásico de 30 años en adelante. “También estamos diseñando una marca joven, con una tela un poco más fina. Y trabajando con la Cooperativa Obrera, que el año pasado hizo una apertura hacia todas las cooperativas de trabajo”.

Destacando la importancia que representa la participación del estado frente a las contingencias que azotan a los proyectos obreros, Contex trabaja desde hace cuatro años con el Ministerio de Trabajo en lo referido a aportes para máquinas, telas y capacitaciones para que los trabajadores sean cada vez más calificados.

“Actualmente estamos con un proyecto con el Ministerio de Desarrollo Social que tiene que ver con trabajar en conjunto con empresas capitalistas. Es un proyecto común que estamos tratando de terminar.

Hace tres meses iniciamos la producción de camisas de marca y para eso el Ministerio nos ayudó a armar un entrepiso que nos permite duplicar la fase productiva”.

En esta línea de cooperación solidaria, Decundo, quien también se destaca como gerente administrativo en la textil, agregó: “Nosotros tenemos una participación muy activa en la Federación de Cooperativas de la República Argentina (Fecootra) que también está ayudando mucho con las capacitaciones”.

Con respecto al ánimo de crecer y mejorar, destacó que los trabajadores se encuentran en el punto nueve de la calificación y aseguró que frente a la perspectiva de desarrollo “nosotros sabemos que no podríamos volver al sistema capitalista de trabajo. No se vuelve más de esto, es una filosofía de vida”.