La Cooperativa de Trabajo Küdaw Ltda. se dedica a prestar asesorías en temáticas administrativas contables y societarias a grupos pre cooperativos y cooperativas que precisan acompañamiento en su gestión.

Actualmente, la consultora está funcionando con varias asesorías estables, es decir, con entidades que contratan sus servicios de forma mensual, y con algunas entidades que se acercan por algún tema societario a solucionar. Sin embargo, las complicaciones en relación al contexto, caída de ventas, paralización de la obra pública, y baja demanda de servicios en general, afectan directamente su actividad.

“Cómo principal inconveniente en esta etapa, es que nos encontramos con entidades que tienen recursos y podemos acordar honorarios, pero hay un gran sector, que no puede en ocasiones solventar gastos, ahí es donde nuestro espíritu nos lleva a ayudar ad honorem, por ello siempre decimos: el cincuenta por ciento del trabajo de Küdaw, es solidario, lo cual también nos genera mucho esfuerzo, sostener la estructura”, contó la secretaria de la empresa, Sabrina García Díaz.

En esa línea, indicó que “las cooperativas que se nos han acercado en estos primeros seis meses del año, principalmente, tienen problemáticas con el cumplimiento de las formalidades, es decir, presentación de documentación ante el Instituto Nacional de Asociativismo y Economía Social (INAES) y la Dirección Provincial de Acción Cooperativa (Dipac).

“Hace unos meses salió la resolución en la que muchas entidades, se encontraban y se las intimó a presentar toda la documentación. Algunas pudieron, otras no. Hay que decir que dicha resolución no es, ni más ni menos, que lo que el ente nacional siempre ha controlado y solicitado, más allá del anuncio con bombos y platillos como una novedad o como algo que se hacía por primera vez. El INAES siempre ejerció el rol de control y de Impulso a las entidades”, aseguró.

Asimismo, agregó: “La mayoría de las veces hay desconocimiento de quienes conforman la cooperativa en temas burocráticos, de manejo de la empresa. La conforman porque necesitan trabajar, entonces se ponen a trabajar. Y la parte administrativa, societaria, se descuida, y no se presenten las cosas, aunque estén hechas”.

“Lo otro que sucede es que, a veces, se prioriza distribuir los ingresos por una cuestión de necesidad. Entonces, no alcanza para pagar las obligaciones, por ejemplo, la presentación del ejercicio contable, que es muy caro. No tiene que ver con una desidia del sector por la documentación y la reglamentación, sino que hay muchos factores dentro de eso”, aseveró.

A esta situación, se suma el porcentaje de cooperativas que llevaban adelante obras públicas y que se encuentran paralizadas, generando proyectos para reinventarse.

Red de contención

Respecto a la importancia de sostener los espacios cooperativos, García Díaz expresó que radica en la generación de empleo en un contexto social y económico que expulsó -y continuará expulsando- a miles de trabajadores y trabajadoras, a través de despidos masivos.

“Ahí es donde toma fuerza el camino a la autogestión, del trabajo cooperativo, donde nos sentamos a ver nuestras posibilidades, qué podemos ofrecer, cómo nos podemos organizar de forma colectiva para enfrentarnos a un mercado que va a tener demandas. La importancia de esto es que somos los dueños de nuestro propio destino”, afirmó, en comunicación con la Cooperativa Ecomedios.

Así, quienes tienen la posibilidad de armar una empresa de la economía social y quienes se incorporan a una, lo hacen para convertirse en dueños y dueñas que participan activamente de la vida institucional y económica. Además, lo hacen con la seguridad de participar en un entorno en donde se prioriza lo humano por encima de lo económico.

La referente aclaró que “no me refiero en términos empobrecedores, sino de que nosotros generamos y decidimos cómo lo distribuimos. Y ahí tienen prioridad principal cada uno de los trabajadores y las trabajadoras. La Cooperativa tiene que trabajar y generar ingresos como cualquier empresa del mercado, pero la diferencia va a ser la distribución”, puntualizó.

Tirar para el mismo lado

García Díaz expresó que hay que pensar a las cooperativas, al Estado y al mercado como tres patas que se sostienen mutuamente: “Las cooperativas necesitan tanto al mercado, para ofrecer sus productos y servicios, como al Estado, como garante de esas posibilidades y como impulsor de las entidades que contienen a muchos trabajadores y trabajadoras”.

En este sentido, ejemplificó con el número creciente de empresas de la economía social que surgieron durante los últimos años; la profesionalización de las propuestas que abarca a todas las áreas del mercado; el interés de jóvenes universitarios para organizarse asociativamente; y la posibilidad de dar voz al sector a través de la representación.

“Se está formando una mirada en donde la cooperativa es una empresa de la económica social que distribuye de forma equitativa, donde trabajadores y trabajadores tienen voz y voto, y que participan, no solo de la vida social, sino de la vida económica de la cooperativa, y eso no pasa en otra empresa”, afirmó.

Por este motivo, el trabajo que se lleva adelante desde el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires es fundamental a la hora de brindar herramientas y facilidades a través de políticas públicas como Cooperativas en Marcha. De esta manera, también, se fomenta la formalidad de las entidades, y sirve para impulsar tanto al cooperativismo como a los sectores productores de alimentos y demás actores del mercado.

UN LLAMADO A UNIR VOCES
“Quienes no conocen el asociativismo, tienen que saber que el formato cooperativo, de la autogestión, de los grupos asociativos, más allá de la conformación jurídica, es una forma de hacer otra económica. Una humana, humanizada, donde la mirada y el foco es principalmente quienes integran esa empresa. Nos gusta decir que somos empresas cooperativas que tienen una mirada social sobre la económica, donde la distribución de los ingresos es solidaria, equitativa, y justa”, enfatizó la referente.
Tanto a personas que ya se encuentren trabajando, como a estudiantes que busquen una opción en donde volcar sus saberes, recomendó “una forma colectiva, de compartir y de poder generar nuestros propios recursos. Como Küdaw que ofrece conocimiento, como cooperativas que están en la construcción, quienes producen alimentos, abogados, publicistas. Cualquier formato que haya en el mercado, puede hacerse desde la cooperativa”.
Como mensaje a las y los trabajadores de la economía social, proclamó: “Debemos, como sector, unificar criterios, miradas, luchas, para no ser cooperativas sueltas. Las Cooperativas de Trabajo somos muchísimas en el país, en la Provincia y en Bahía Blanca. Es importante unirnos y pensar criterios, políticas públicas, porque nos faltan muchas para el sostenimiento, el acompañamiento, y para el crecimiento de las cooperativas”.

Autor: Redacción Ecodías