La comunidad debatió los proyectos que merecen la aplicación del Presupuesto
Participativo. Entidades locales expusieron las iniciativas en un plenario.

El Presupuesto Participativo se puso en acción en Ingeniero White, esta vez con
inversiones privadas.
El sábado 3 en instalaciones de la Escuela Secundaria Técnica Nº 1 se concretó
la presentación de proyectos, que ascendieron a 14 en número y que abarcaron la
diversidad de necesidades de las instituciones. Desde el Barrio Saladero, la
junta vecinal requirió una plaza, los chicos del Mosconi solicitaron reductores
de velocidad para la avenida y baños nuevos para la sede, mientras que la
Técnica 1 impulsó una campaña para recaudar fondos en beneficio de AYUDA-LE y
discutieron la importancia de un comedor en la escuela. En cuanto a más
instituciones educativas, el Jardín 905 solicitó apoyo para “Aprender jugando”,
la cooperadora de la escuela 21 expuso la idea de “Más deportes y espacios
verdes” para su barrio, el centro de estudiantes y la cooperadora de Técnica 1
solicitó “más seguridad más compromiso más educación segura”. Entidades
representativas como el Club Atlético Comercial exhibió su idea, que resultó
ganadora, de un predio deportivo de fútbol formativo; la organización no
gubernamental Cangrejitos de barro pidió una feria para White, mientras que la
sociedad de fomento del Bulevard quiere pintar los frentes de las casas para
hacer un bulevard de los sueños de colores. Se registró la representación de la
sociedad de fomento y cultura con el pedido de una sala multifunción, la
cooperadora del hospital Menor solicitó un mamógrafo y la junta vecinal del
barrio Saladero, una pista de salud.

Fondo privado
El Presupuesto Participativo suele crearse con aportes de dineros
municipales, sin embargo, este año se “rediseñó” la propuesta con la
intervención de una empresa multinacional dedicada a la elaboración de
productos químicos especializados.
“Estamos muy presentes en White principalmente a través de los vecinos que
componen el panel comunitario, un grupo de vecinos que representa la diversidad
de vecinos de Ingeniero White, hay amas de casa, jubilados, docentes,
estudiantes, representantes de los scouts, de distintas instituciones, mujeres
y hombres que viven en distintos barrios y llegan voluntariamente. Es un
espacio de diálogo con Dow, estamos buscando que siga creciendo y
fortaleciéndose” declararon encargadas de las relaciones institucionales. La
iniciativa tiene 12 años de existencia. “A partir de este diálogo surge de las
cuestiones de las operaciones de Dow que le preocupan a los vecinos, no solo
nos quedamos en ese tema, buscamos también seleccionar iniciativas para la
inversión social de la compañía, es decir, una parte de nuestro presupuesto que
está disponible para proyectos comunitarios se define dentro del panel”.
Según la representante, la mirada de la empresa multinacional se amplió, “uno
de los objetivos era tender puentes hacia la comunidad, entonces surgió este
año utilizar la herramienta que es muy conocida y muy común en el municipio y
se utiliza en otros lugares, que se llama presupuesto participativo, que es una
herramienta que usan los gobiernos locales pero que le estamos agregando una
innovación que es que lo proponga la empresa”.
Con metodología de reuniones y encuentros vecinales, se recogieron las
necesidades, los proyectos, “estamos reuniéndonos con los grupos que
propusieron ideas, con el objetivo que al final de este proceso haya una
votación pública de los proyectos, y a través de esa votación la elección de
proyectos y el financiamiento de los mismos con recursos de Dow”. La empresa
invertirá 1 millón de pesos para concretar la elección, siendo esta vez el
municipio solamente el auspiciante de la propuesta.

Intervención estatal
Esta forma de gestión se viene aplicando desde 2009, aunque sufrió varias
modificaciones en su letra de ordenanza, bajo el número 12.031. Esta figura y
modalidad propone el desarrollo de jornadas participativas y el debate acerca
de las prioridades presupuestarias por áreas por parte de los vecinos de la
localidad.
Persigue lograr el compromiso para con la localidad, promoviendo la democracia
participativa y convirtiéndose en un instrumento de control y planificación
municipal. Las propuestas surgen de la misma comunidad, después son expuestas y
defendidas en un plenario. De la votación del mismo surgirán las decisiones a
concretarse según las necesidades evaluadas por la vecindad. Con posterioridad,
el municipio invierte el dinero destinado, según la partida acordada por la
ordenanza: “La distribución de recursos asignados al Presupuesto Participativo
para cada delegación se realizará de la siguiente manera: el 50% (cincuenta por
ciento) en partes iguales para las siete delegaciones municipales, y el otro 50%
(cincuenta por ciento) en forma directamente proporcional al grado de
marginación urbana que establezca anualmente el cálculo del Índice de Carencia,
para el cual se utilizarán datos disponibles en el último censo, Encuesta
permanente de Hogares y estadísticas por las dependencias municipales”.
El presupuesto participativo se aplica en las nueve delegaciones municipales,
de esta forma se responde “a las necesidades y aspiraciones de las comunidades
barriales en la construcción de una ciudad más justa e igualitaria, en pos de
tender a que la municipalidad garantice la libertad, la justicia social y el
sistema representativo, republicano, democrático y participativo”. Para
participar los vecinos se inscriben y participan del proceso en la delegación
municipal en la que tengan registrado su domicilio real, además, pueden sumarse
las entidades y organizaciones sociales que acrediten domicilio legal en el
partido, y en el seno de la delegación donde comprueben el desarrollo de sus
trabajos y actividades.