La nueva conducción del Club Atlético Vista Alegre
palpita el 2011 entre ambiciosos proyectos, que incluyen una ampliación de la
infraestructura en pos de la inclusión social de los sectores que viven en el
noroeste de la ciudad. Qué proyectan, qué implica y qué necesitan.

La reasunción al frente de la Comisión Directiva del Club Atlético Vista Alegre
(C. A. V. A.), posibilitó a Mario Garberi y a Miriam Fernández retomar sus
viejos proyectos, con una potencia que los actuales miembros de la Comisión Directiva
traslucen en su hablar ante EcoDias.
Las obras de edificación que se planean en torno al terreno que el club ocupa
desde principios de esta centuria (ver EcoDias 351) suponen el eje central de
las preocupaciones de la gestión que secunda.

De nuestra consideración
Apenas asumido como presidente de la entidad, Garberi redactó unas cartas
“con el fin de informar nuestra función en la sociedad” a aquellas empresas,
entidades o particulares que quisieran colaborar en la financiación de los
proyectos que el club elaboró para 2011.
Allí se indica que la institución procura trabajar en la contención de “chicos
que concurren desde barrios muy carenciados”, entre los que enumera a Villa
Nocito, Vista Alegre I y II, Maldonado, 1 de Mayo y Las Colonias.
A su vez, se comprometen a concretar “en un lapso de dos años” -plazo
establecido para la renovación de autoridades según el estatuto- obras que
incluyen la realización de un salón cubierto de trescientos metros cuadrados,
un paredón de material que rodee el perímetro, un playón o plataforma que
oficie como escenario de partidos de básquet y vóley y una pileta de natación
que marcaría un hito en el barrio. “La intención es que la institución esté en
funcionamiento las 24 horas”, concluye la esquela.

Ladrillos para crecer
El cercado del perímetro del terreno -de casi 150 metros por 100-
implica la utilización de 42 mil ladrillones. Ese ítem es el único que se fija
en unidades de material. El resto se tasa en montos, que no incluyen mano de
obra ya que se espera encontrar voluntarios que se sumen al trabajo que viene
siendo realizado.
El salón, por caso, insumirá unos 27 mil pesos según el presupuesto previo, 20
mil costará el playón y 12 mil la pileta de natación de 200 metros cuadrados,
que la Comisión
Directiva sueña con tener lista para la temporada estival de
2011- 2012.
En el salón, se prevé situar actividades como “patín, folklore, salsa y
actividades para chicos con capacidades diferentes, apoyo escolar y copa de
leche, y de esta manera incorporar a las niñas, ya que para ellas no hay nada
en este sector de la ciudad”. El cierre del perímetro, calculan por su parte,
permitirá “ampliar las prácticas deportivas”, entre las que enumeran el
hándball, jockey y softball. El playón albergaría las restantes disciplinas:
básquet, vóley y fútbol de red.

Ayúdame que te ayudaré
Aunque reconoce que en este momento “está todo parado”, Garberi es
optimista. “Si se le pone buen esfuerzo, y ganas, y llega gente con mentalidad,
se puede hacer”.
Tres de los grandes objetivos trazados a futuro son los de incluir socialmente
a los menores que padecen el flagelo de la droga, y también a chicos
discapacitados de ese sector de la ciudad, además de inaugurar la primera
pileta de natación barrial.
La pileta posibilitaría cumplir con una las metas expresadas en la esquela,
lograr en el club una actividad diaria en continuado de varias horas. A su vez,
el trajín contribuirá al logro de otro de los objetivos centrales: la lucha
contra el flagelo de la droga, que en Vista Alegre y zonas aledañas hace foco
en buena cantidad de jóvenes del lugar. Pensando en la actividad intensiva se
imaginan desde la conducción actividades para la mañana y la tarde, tales como
fútbol, básquet, handball, folklore, o patín.
Por último, otro objetivo a futuro pasa por la integración social de las
personas con algún tipo de discapacidad, al cuidado de personal especializado
que pueda orientarlas para aprender y realizar actividades. “Vos acá salís y no
ves a nadie, en el barrio. Pero hay sesenta chicos (con discapacidad). Están
postrados en la casa”, resume Garberi.

Cómo colaborar
Los dirigentes del club Vista Alegre se encuentran en busca de donaciones
que les permitan solventar la construcción y remodelación de sus instalaciones
en calle Coulin. Entre los materiales de construcción requeridos se encuentran
ladrillones (“no somos exquisitos, aunque sea usados”, agrega la secretaria
Miriam Fernández), chapas, tirantes o pintura. Aunque más aún que esa ayuda
material se valora el aporte de mano de obra.
Pero, por otro lado, ya están comenzando con otras actividades que le permitan
encontrar financiamiento. Por ejemplo, una campaña de socios, con una cuota
está fijada en diez pesos. Piensan brindar beneficios en comercios barriales y
kinesiología. En paralelo, se venderá una rifa por una moto 0 Km. los sueños
están trazados. Ahora hay que poner ladrillo sobre ladrillo.