El subsecretario de la Jefatura de Gabinete
municipal, explicó a EcoDias los principales detalles del Programa de Movilidad
Sustentable que permitirá contar con menos autos en la zona del microcentro y
favorecerá la circulación de otros medios de transporte, el cuidado del medio
ambiente y una mayor comodidad y afluencia de peatones.

Es sabido que el
tránsito en Bahía Blanca es todo un problema y no solo por cómo manejan los
conductores, por las faltas en las que recaen sino también porque el parque
automotor ha crecido y hay cada vez más automóviles en la ciudad. Todo esto
repercute de manera negativa en el medio ambiente, en los peatones y derivan en
un centro sumamente complicado para transitar.
Por esas razones es que pronto se intentará implementar el llamado Programa de
Movilidad Sustentable el cual viene siendo debatido en el Concejo Deliberante y
que fue explicado a EcoDias por Maximiliano Celendano, subsecretario de la
Jefatura de Gabinete de la municipalidad.
En su primera etapa, el programa está ligado al microcentro y tiene dos piedras
basales. Estas son el estudio del Instituto de Seguridad Vial y Educación
(Isev) y el mapa accidentológico realizado entre la municipalidad y la
universidad. De allí surge que el centro de Bahía Blanca es la zona crítica por
antonomasia, más allá de que en muchos barrios hay microcentros como es el caso
de Villa Mitre, Villa Rosas y ciertos sectores de Gral. Daniel Cerri e
Ingeniero White.
El incremento del parque automotor bahiense es el doble del promedio en todo el
país lo cual generó, señala Celendano un efecto tan complejo que ha
desbalanceado la balanza con cualquier otro tipo de movilidad, ya sea peatones,
ciclistas, motociclistas o personas que viajan en colectivo: “Entonces lo que
proponemos es una prohibición en el microcentro absoluta de estacionar, excepto
en la Plaza Rivadavia, a los efectos de que no haya autos estacionados, haya
fluidez y por lo tanto no haya congestionamientos. A la par de eso ampliar la
zona de estacionamiento medido y pago por fuera de la discusión de si es ALTEC,
si va a ser otro, si va a ser la municipalidad o de si no va a haber durante un
tiempo. Es decir que la gente se acostumbre, como en todas las ciudades grandes
de Argentina y de Latinoamérica está pasando y en las ciudades más grandes y no
tan grandes de Europa ya ha pasado, que en los microcentros ya no se ingresa
con vehículos particulares”.
Y de esta manera, agregó, se favorecería a la circulación de otros medios de
transporte en términos de seguridad, economía y menor contaminación: “El
transporte público, la bicicleta, el peatón contaminan menos. El transporte
público según los estudios de la Secretaría de Medio Ambiente de la Nación
contamina en términos de lo que hace al efecto de la capa de ozono, menos de un
20 por ciento. En cambio el automóvil está cerca del 80 por ciento lo cual es
una diferencia abismal. Esa es la primera etapa que está destinada al
estacionamiento”.

Segunda etapa
La segunda etapa del programa ya es un poco más compleja y contiene dos
elementos fuertes siendo el primero de ellos que el microcentro, ya con
prohibición de estacionamiento, tendría un tránsito relantizado, es decir con
circulación a baja velocidad: “Para esto se colocan elementos de
infraestructura vial, se cambia la semaforización, se hace más lenta, se
colocan sendas peatonales elevadas para que el peatón pueda cruzar con total
seguridad y el vehículo a su vez, como tienen dos metros de ancho y quince
centímetros de alto, queda a una distancia tal de que no puede cruzar la calle
especulando con el semáforo de la otra sino que tiene que esperar el verde de
su semáforo. Es un muy mal hábito de nuestra viveza criolla que en términos de
seguridad vial, con 8 mil muertos anuales no es ninguna viveza”.
Por otra parte, alrededor de este anillo habrá circuitos ágiles que van a
circunvalar el centro con prohibición absoluta de estacionar en las calles
España – Lavalle, Saavedra – Güemes, Roca – 11 de Abril y Zapiola – Dorrego “a
los efectos de que la gente que no tiene necesidad de entrar al microcentro,
circunvale ágilmente y pueda ir a otro punto de la ciudad De esa manera
cumplimos el objetivo fundamental que es desalentar el uso del vehículo
particular en el micro centro y favorecer el transporte público, el ciclismo,
está previsto en posteriores etapas la creaciones de bici sendas, carriles
exclusivos”.
Hoy caminar por el centro significa soportar múltiples ruidos de los motores
los cuales, con el programa, se aminorarían “porque va a haber muchos menos vehículos
que van a optar por circular por el microcentro. O al no poder estacionar va a
haber más carriles para poder pasar”.

Tiempos
Por lo que puede apreciarse el cambio es muy importante y es imposible que
se produzca de un día para el otro pero así y todo se espera empezar a trabajar
a partir de los próximos meses: “Por eso queremos que las dos ordenanzas que ya
están en el Concejo sean votadas lo antes posible para que en el verano se
instale, ya esté lista la obra de infraestructura civil que hay que hacer y la
gente, como implica un cambio cultural muy fuerte, pueda adaptarse
paulatinamente a estos cambios”.
Señalábamos al comienzo que el programa se estuvo debatiendo en el Concejo
Deliberante donde fue visto con buenos ojos: “La iniciativa se tomó muy bien,
incluso algunos concejales de diferentes bloques tenían algunas ideas más que
agregar o veían la misma idea con diferente perspectiva entonces cuando se les
presentó, en las cuatro oportunidades que fuimos, el plan completo que tiene
cinco etapas, ahí dimensionaron la complejidad que tiene que hasta incluso
excede las posibilidades que tiene esta administración”.
Esto viene a razón que si el trabajo se desgrana en su totalidad estaríamos
hablando de seis o siete años de labor ya que cada etapa necesita como mínimo
dos o tres meses de evaluación y corrección: “Entonces los concejales
incorporaron esas ideas en el marco del plan completo para que siga un
lineamiento y que realmente Bahía de una vez por todas tenga un plan urbano que
se pueda ir lentamente incrementando y llegando a los barrios y luego a las
conexiones con las rutas nacionales y provinciales y los partidos vecinos”.
Celendano informó que para diseñar el programa se tuvieron en cuenta ideas y
cuestiones que ya se están llevando a cabo en otros lugares del país y
Sudamérica: “La segunda etapa implica la incorporación de un elemento que nunca
existió en la ciudad que son las reservas para el sistema de abastecimiento que
son los camiones. El matrizado de esa idea, además de que el ISEV lo pone como
condición sine quanon, no como una idea sino como algo a formular
inmediatamente porque en Bahía nunca existió, el matrizado lo tomamos de Mar
del Plata donde funciona muy bien.
Hemos tomado experiencias de muchos lugares, bici sendas estamos estudiando
Mendoza, Buenos Aires, Europa…Hay soluciones por ejemplo en Brasil y en Chile
que son ejemplares y hay que tomarlas obviamente que adaptadas a la realidad de
cada lugar”.