Pablo
Montes de Oca participará el próximo 20 de marzo de la Maratón de las Islas
Malvinas. En esta entrevista nos cuenta sus motivaciones y nos brinda algunos
consejos para quienes desean comenzar a activar el físico.

La veterinaria ubicada en el “Principado de
Tiro Federal” -como le gusta decir a Pablo Montes de Oca- tiene una sala de
espera amplia, en cuya pared no entra un solo cuadrito más de las
capacitaciones en materia de salud que ha hecho este bahiense que corre desde
hace siete años: “Yo jugaba al fútbol. Llegué
a una edad en que me di cuenta que tenía edad para dejar de jugar al fútbol…
Y me dije ‘¿Qué deporte puedo hacer?’, y empecé a correr. El 21 de febrero de
2009 corrí una carrera en Monte Hermoso, que me recomendó mi hermano, de 10 km,
y con bastante dificultad (se ríe) ahí hice mis primeros 10 km.”.
En su historial cuenta con carreras de 10,
21 y 42 kilómetros “en Rosario, en provincia de Buenos Aires he corrido
muchísimas carreras de 10K, de 21K, en Neuquén, en La Pampa, he corrido por
varios lugares, es algo que me apasiona”. La mayoría las corrió con sus
compañeros de la Agrupación Atlética Miguel Centeno.
También hizo su experiencia
en el
exterior:
“Una de las carreras que más me impactó fue la del desierto de Sahara. Al
principio pensé que lo más importante iba a ser la carrera, pero después de
convivir en un campo de refugiados con los saharauis me di cuenta que hay cosas de la
vida que uno valora, y son sumamente importantes, tal como la forma en que vive
esa gente”.
Y vuelve a correr una maratón el 20 de marzo: “La próxima es la de las Islas
Malvinas, que está dentro del país, pero hay que viajar bastante para poder competir”.

Una perspectiva propia
¿Cómo te enteraste de la competencia? “Yo
había escuchado que existía la maratón de las Islas Malvinas, sabía que se
habían corrido algunas competencias. Después comencé a ver en las páginas de
Facebook, y me empecé a asesorar de la carrera de las Islas Malvinas. Realmente
sentí mucha curiosidad. Es mucho el desconocimiento que nosotros tenemos de la
gente que está en las Malvinas, de las mismas islas, y la idea es tener una
composición de lugar, poder ir a las islas para poder tener una perspectiva
propia, y no creada desde los medios”.
La entidad organizadora -que
destina lo recaudado a la Fundación Seeing Is Believing, que trabaja en recuperación
de la vista de personas no videntes- define a la Standard Chartered Stanley
Marathon como la que tiene los gradientes climatológicos más adversos del
planeta. Asimismo, es el maratón fiscalizado (Aims / Iaaf) más austral del
mundo. En las distintas ediciones se han observado características muy
disímiles en cuanto al contexto de participación. En 2007 se corrió con ráfagas
de viento que tocaron los 90 km/h, y un año después con un cielo absolutamente
abierto en un día de sol radiante, de 17 ºC.
“Aspiro a tener un crecimiento en ese
sentido de lo personal y me va hacer sentir y valorar lo que han hecho los
combatientes nuestros”, nos confía Pablo.
“De la carrera participan de varias nacionalidades, van bastantes ingleses, y
desde la Argentina alrededor de 11 corredores somos los que vamos. Vamos con la
idea de confraternizar. La idea mía es hablar con la gente de las islas,
intercambiar ideas, siempre haciéndolo dentro un marco de respeto.
Y cierra: “Todo está grabado en la memoria”.

¿Por qué corro?
“Un amigo, que ha sido
excombatiente, Pedro Anghileri, voy a correr por él… (se emociona). Él me va
dar un objeto para que yo lleve conmigo. ¿Sabés? Yo corro por él, y por todos
los que fueron a las Islas”.


Monumento a los Caídos en la Guerra de Malvinas
Hoy es habitual encontrar, a cualquier hora del día, personas que hacen
caminatas o corren por las veredas de Cuyo y La Falda de nuestra ciudad, donde
están instaladas las fotos de los 15 héroes bahienses que dieron su vida en el
conflicto bélico de 1982.
“Cuando corro por ahí me genera una
mezcla de una profunda tristeza y emoción: yo pude haber estado en Malvinas por
un hecho generacional (NR: Pablo Montes de Oca nació en enero de 1961). No
alcancé a ser convocado, pero mi clase, los de mi edad estuvieron en Malvinas, y
yo pude haber sido uno de ellos”.
“Sí me genera mucho dolor cuando algunos idiotas rompen con piedras o atentan
contra eso que es tan preciado a nuestros sentimientos, eso no lo puedo
entender”, dice en referencia a los actos vandálicos que cada tanto son mala noticia.

Consejos
de un corredor
Quienes comparten la actividad con Pablo destacan su dedicación y tenacidad para
superarse y en la charla se permite un tiempo para reflexionar sobre los
beneficios de la actividad física para aquellos que todavía no se deciden a
emprender alguna: “A la persona sedentaria hoy le diría que lo primero que
tiene que hacer es ponerse de acuerdo con el peso, comenzar a caminar, y
después empezar a trotar. Aunque sea 20 metros. Eso te abre una puertita para
poder trotar: trotás 20 metros, caminás 50, volvés a trotar 20 metros. Una vez
que logras trotar despacito, te tenés que integrar a un grupo, porque un grupo
te genera compromiso, y con ese compromiso vas a poder participar”.
“Correr es bueno, te mejora la salud, es realmente agradable, y cuando te vas
dando cuenta vos de las posibilidades que tenés, que cada vez estás mejor, que podés
participar, que podés llegar, eso te incentiva mucho más. Yo le quiero
transmitir a la gente que es posible. Algunos me dicen ‘Claro, vos corrés 10 kilómetros’,
y parece algo lejano, imposible. Yo le digo que se puede correr 5, se puede
correr 10, se puede correr 20, se puede correr 42. Y eso lo puede hacer
cualquiera, y cuando digo cualquiera es cualquiera. Pero se debe empezar de a
poquito y adaptándose a las circunstancias”.
¿Qué te genera salir a correr todos los días? “Salgo a correr bastante
seguido, me genera una sensación de bienestar. Desde lo físico, desde lo
psíquico, acostumbro a correr solo, y extrañamente no corro con música. Correr
me libera, me hace organizar mi cabeza, me hace pensar en cosas positivas, y
cuando llego es un cansancio bastante agradable que se siente”.