Si bien la Escuela 36 pudo volver a dar clases luego de solucionar el problema
iniciado por la presencia de ratas,vecinos de Villa Nocito dialogaron con
autoridades municipales y pidieron una solución respecto al basural a cielo
abierto que originó el conflicto.

La presencia de ratas en la Escuela 36 del barrio Villa Nocito no solo complicó
sino que directamente imposibilitó el dictado de clases para los alumnos y
alumnas de ese sector de la ciudad durante 15 días. Si bien luego se efectuaron
en la escuela trabajos de desratización y demás cuestiones que hacen a la
solución del problema, en sí la solución global no ha llegado ya que la
presencia de ratas se originó por un basural a cielo abierto que se encuentra
lindero al establecimiento educativo.
La desratización permitió que se puedan dar las clases luego del feriado del 24
de marzo pero lo cierto es que el basural sigue ahí y por esa razón vecinos y
vecinas de Villa Nocito continúan con el reclamo. Ya se habían movilizado por
el problema de que sus hijos no podían asistir al colegio pero no obstante siguieron
mostrando su preocupación por la situación que se vive con ese basural que no
solo afecta el medio ambiente sino que también tiene sus peligros para la salud
de la comunidad.
Durante el mediodía del jueves 26 de marzo, un grupo de vecinos y vecinas de
Villa Nocito se reunieron con Fabián Lliteras secretario de Gobierno municipal
en el despacho de éste y le hicieron saber sobre la problemática, le entregaron
el anexo de un petitorio en el que reclaman la limpieza en el sector, y
quedaron en volver a juntarse en los días siguientes a la reunión.
Al final del encuentro, Guillermo Higuera, uno de los vecinos de Villa Nocito y
padre de alumnos de la Escuela 36, dialogó con EcoDias y relató cómo se fue
iniciando el conflicto: “Se originó con el tema de las ratas en el
establecimiento educativo, la escuela 36 y empezamos a averiguar que se
contaminó por el hecho de un basural que hay al costado de la escuela, en un
predio vacío en desuso…en desuso hasta cierto punto porque camiones municipales
iban a tirar la basura, gente que bajaba de los autitos 0 (Km) a tirar la
basura, gente del barrio que también iba a tirar basura entonces no se
terminaba eso y así se fue contaminando todo el barrio”.
Higuera contó que el baldío es muy grande y que varias veces vieron los
camiones municipales allí además de máquinas: “Hacían trabajos en un lugar
removiendo la mugre cosa que no era bueno, por eso tuvimos este problema”.
En cuanto a la presencia de ratas en la Escuela 36, señaló: “Prácticamente
harán dos, tres semanas atrás que empezó el problema porque como empezaron las
clases se empezaron a ver cosas en una escuela que no debería”.
Un hijo de Higuera concurre al jardín de infantes que se ubica en la parte
superior del edificio mientras que sus otros dos hijos asisten a la escuela
primaria: “Hasta ahorra se hizo supuestamente desratización, limpieza de la
escuela, poniéndole burletes a las puertas para que no ingresen por debajo de
las puertas, tapar las rejillas que había que tapar, las boca de tormenta
también las taparon que estaban expuestas”.
Dichos trabajos, agregó, fueron llevados a cabo por una empresa privada enviada
por el Concejo Escolar: “Hasta ahora algo solucionó, nosotros queremos que
alguien nos de la firmeza de que esto está bien hecho y de que no vamos a tener
más problemas. En sí problemas vamos a tener porque todavía está el problema
del basural en el barrio. Los vecinos todavía están quejándose, siguen
informando de que siguen roedores”.

“Estamos olvidados”
Hacía referencia Higuera a que el problema sigue debido a la presencia
misma del basural lindero al colegio y por lo cual no hay aún una solución de
fondo: “El basural sigue ahí, nunca lo sacaron. Taparon con tierra pero nunca
lo sacaron”.
También confirmó Higuera que la escuela, al momento de la entrevista, se
encontraba dictando clases con normalidad y sin ningún tipo de problemas.
Otro tema que aqueja a los vecinos y vecinas de Villa Nocito es el referente a
los desagües: “Con desagües tenemos problemas hace años que no hay una
nivelación en calles y prácticamente se forman ríos, roturas de caño, tapadera
por ahí de alguna boquilla de tormenta que no hay en sí pero hay una sola
boquilla que la tomaron como boca de tormenta pero no da abasto”.
EcoDias consultó a Higuera sobre lo que le fue entregado a Lliteras en la
reunión mantenida: “Un anexo del petitorio para que se haga el tema de limpieza
en el barrio generalmente, que se pongan contenedores o que se manden camiones
para hacer una limpieza del basural. Y que la gente tenga dónde dejar la
basura, que se termine de arrojar basura, poda de árboles, limpieza de
terrenos, todas esas cosas. Nosotros realmente con la sociedad de fomento vamos
a tratar de concientizar a los vecinos de que el basurero pasa, pasa temprano y
coordinar para que ellos se eduquen en tirar la basura como corresponde”.
Higuera comentó que él y los vecinos y vecinas que se dirigieron a la
municipalidad, fueron muy bien recibidos por Lliteras quien brindó su apoyo y
quedó en dar una contestación en breve para empezar a trabajar.
En medio de esa reunión otro vecino de Villa Nocito dijo que el barrio está
olvidado. EcoDias le preguntó sobre esa sensación a Higuera y concluyó: “Sí,
prácticamente estamos olvidados, la mayoría de los barrios estamos olvidados.
Conozco varios barrios que he estado viviendo y muy abandonados, no sabemos por
qué. Prácticamente a lo que me acuerdo, el año pasado habían presentado que
habían traído maquinarias nuevas, camiones nuevos y no están trabajando. No los
vemos en movimiento, en algunos sectores sí. Estuve trabajando por la zona de
Los Teritos, Las Cañitas en Millamapu atrás de lo que es el barrio Prensa y
allá las maquinarias andan perfectamente… en los barrios no. Entonces es un
acto discriminatorio porque nosotros también pagamos los impuestos”.