Se firmó un acuerdo entre la municipalidad y las cadenas de supermercados para
dejar de entregar a los clientes las bolsas tipo camiseta a fin de proteger el
medio ambiente. La idea es fomentar la utilización de bolsas reutilizables.

En décadas pasadas “hacer las compras” era “hacer los mandados”, en todas las
casas había una “bolsa para hacer los mandados” mientras que las bolsas de
polietileno tipo camiseta que hoy se regalan, eran más gruesas y los
supermercados las cobraban por eso había que pedirlas solo en caso de
emergencia.
Con el correr del tiempo las bolsas tipo camiseta se impusieron pero se
multiplicaron demasiado en cantidad y eso no genera un buen impacto en el medio
ambiente sino todo lo contrario.
A razón de ello la municipalidad firmó un convenio con las cadenas de
supermercados para que a partir del 2 de marzo se dejen de entregar a los
clientes las bolsas camiseta y se fomente el uso de las bolsas reutilizables
también llamadas ecológicas. Hay supermercados que desde hace un tiempo venden al
público este tipo de bolsas y la propia municipalidad hará una inversión para
entregarlas a los vecinos y vecinas.
Quizás las bolsas reutilizables tengan una calidad superior y hasta sean más
cómodas que la vieja bolsa de los mandados pero está claro que el habito que se
busca es ese. Es decir, volver a contar con una, dos o tres bolsas para hacer
las compras tanto en el supermercado como en la panadería, la carnicería y demás
comercios y de esa manera proteger el medio ambiente.
Por otro lado, este cambio puede que lleve a que muchas personas retomen el
changuito que no es el que encontramos en el supermercado sino que es uno que
usaban más bien las amas de casa y tenía un lugar para botellas y otro para el
resto de los productos. Esos prácticos changuitos se siguen vendiendo en
ferreterías y bazares pero su utilización es mucho menor comparado a otras
épocas.
Del acta acuerdo voluntario firmada el 9 de febrero participaron el gobierno municipal,
Bahía Ambiental Sapem, la Fundación para la Recepción y Asistencia de Animales
Marinos (FRAAM), Tellus y las firmas que representan a los supermercados:
Cooperativa Obrera, Walmart, Carrefour, Vea y Burgos.
EcoDias dialogó con Sebastián Serra, titular de la Agencia Ambiental y
presidente de Bahía Ambiental Sapem quien señaló: “Cuando nosotros presentamos
el año pasado el proyecto de ordenanza ante la sociedad y al Concejo
Deliberante, nosotros teníamos y tenemos muy en claro cuál es la visión en lo
que hace a la política ambiental respecto a este tema.
Y nosotros tenemos estadísticas hechas en base a por ejemplo todo lo que ha
sido el programa de erradicación de basurales que lleva adelante Bahía
Ambiental Sapem a pedido de la municipalidad por el cual por ejemplo durante el
año 2014 se levantaron más de 14 mil toneladas de residuos del espacio público,
de baldíos, basurales y plazas. A partir de ahí, de lo que nosotros vemos,
podemos hacer una analogía y hacemos una regresión matemática y podemos tener
en claro aproximadamente cuántas bolsas tipo camiseta en toneladas están dando
vuelta por la ciudad mal dispuestas o con una disposición incorrecta. Estimamos
que estamos hablando de un orden de un 40, 45 toneladas al año de residuos que
se componen fundamentalmente por bolsas tipo camiseta”.
Serra destacó el aporte de las ONGs Tellus y FRAAM en cuanto al significado del
impacto de las bolsas para el área de la costa de la ciudad: “El impacto que
tiene sobre la fauna marina – terrestre y marítima, cómo termina impactando
sobre los peces, las aves que están en ese sector. Entonces a la idea que
nosotros teníamos y que habíamos plasmado en ese proyecto de ordenanza que
presentamos en septiembre en el Concejo Deliberante que nosotros decíamos no a
las bolsas camiseta por un montón de cuestiones ambientales que tienen que ver
con el aspecto visual, el uso racional de los productos, el consumo
responsable, le adicionamos el aporte de las ONGs que nos aportaron, valga la
redundancia una mirada que nosotros teníamos pero que ellos nos dieron el
cierre técnico de qué es lo que estaban viendo ellos que estaba pasando con
este tipo de elementos”.

Sumando voluntades
Por lo expuesto anteriormente, Serra explicó que se decidió junto a las
ONGs avanzar en esta política: “Abrir la discusión en que vengan todos los que
quieran venir, todas las grandes cadenas de supermercados, medianos, pequeños,
todos porque estas bolsas, quizás para el que va caminando por la plaza
Rivadavia no significan un gran impacto para el medio ambiente más allá de
verla tirada en el piso y que usualmente no sea agradable. En la periferia
tiene un impacto concreto y real sobre la fauna y la flora, bueno estamos dando
un paso concreto en ese sentido”.
Consultado por EcoDias acerca de poder implementar el proyecto más allá de que
el Concejo Deliberante no lo haya convertido en ordenanza, señaló: “No hay digo
yo ninguna ordenanza que te obliga a entregar bolsas entonces acá en realidad
estamos sumando voluntades, tenemos como objetivo la mejora de la calidad de
vida, la mejora de la calidad ambiental de la ciudad y de la región. Nos
ponemos de acuerdo para tener una política común en lo que tiene que ver por
ejemplo con el otorgamiento de las bolsas, ir migrando todos hacia las bolsas
reutilizables, hacia las bolsas reciclables para que dejemos de tener estas
bolsas volando por la ciudad. Un hecho concreto se da en que Bahía Blanca es
una ciudad importante de la sexta sección que marca agenda en muchos temas que
tienen que ver con las políticas de desarrollo y que venía relegada en lo que
es la implementación de este tipo de normas en función de la periferia, de los
distritos que están cercanos a Bahía Blanca. Y que además luego de hacer las
entrevistas del caso, las charlas que corresponden con lo que están encargados
de medio ambiente en otros distritos, nos contaban lo beneficioso que eso para
el medio ambiente”.
Esos beneficios se ven por ejemplo en que en Monte Hermoso no vuelen más bolsas
por la playa o que en Sierra de la Ventana no se encuentren bolsas en los
bosques. “Un montón de cuestiones que quizás al ser distritos un poco más
pequeños y que tienen un contacto más directo con la naturaleza, se puede
visualizar más rápidamente el impacto positivo que tiene no tirar la bolsa al
aire libre.

Acá en Bahía Blanca que es una ciudad más urbana y que quizás no tiene
rápidamente la visión de lo que está pasando en lo que son los sectores más
vírgenes que tiene el distrito, nosotros lo que tenemos planteado es mostrarle
al vecino a través de campañas de difusión, afiches, spots de televisión y de
radio, lo beneficioso que es para el medio ambiente que dejemos de usar este
tipo de bolsas”.
En cuanto a fechas, Serra informó que a partir del 16 de febrero los
supermercados tienen que empezar a restringir la entrega de bolsas mientras que
el 2 de marzo ya ninguno de los que firmaron el acta puede entregarlas.
Acerca de las bolsas ecológicas “cada supermercado tiene su línea de bolsas,
por ejemplo en la Cooperativa Obrera nos comentaban que van a hacer una entrega
que está vinculada a los asociados a la Cooperativa Obrera. Además Bahía
Ambiental Sapem va a hacer una entrega de bolsas reutilizables en campañas que
tienen que ver con el Ecocanje, con la recuperación de algunas fracciones de
residuos, es decir se le van a aportar a los vecinos a través de diferentes
campañas un volumen importante de bolsas reutilizables para que los vecinos
puedan ir migrando de la bolsa tipo camiseta a la reutilizable”.
El gran desafío, continuó, es cultural y responde a acostumbrarse a hacer una
compra llevando las bolsas reciclables: “Son de friselina que es un plástico de
larga duración que resiste un mayor volumen de carga y que pueden reutilizarse
entre quince o veinte veces y si uno las cuida, mucho más. Entonces imaginémonos
que uno va a al supermercado y quizás con cuatro o cinco bolsas de friselina o
de algún material reutilizable o reciclable, uno puede cargar la cantidad que
se está llevando en veinte bolsas tipo camiseta que después utiliza para
residuos que no es el uso que corresponde y que en muchas ocasiones tenemos
estimado que el quince por ciento de los residuos de la ciudad se disponen de
manera no controlada en los basurales. Eso se aplica también para las bolsas
que terminan en el espacio público”.
Acerca de la inversión a realizar por la municipalidad, comentó que se van a
adquirir entre 100 y 150 mil bolsas reutilizables a distribuirse en campañas
ambientales: “Entendemos que va a implicar en algunos casos que algunos estén a
favor y que otros no estén a favor pero creo que por la relevancia que tiene
Bahía Blanca, por la implicancia ambiental que tiene esta temática y porque lo
que más nos cuesta a los vecinos es cambiar actitud y modificar nuestros
hábitos de consumo, es el momento para dar este paso. Es el momento para
avanzar en esta temática antes que tengamos mayores problemas en lugares que
son muy sensibles para lo que es el desarrollo ambiental de la ciudad como la
reserva costera donde vemos que hay un impacto directo de la bolsa que vuela y
donde todavía estamos a tiempo de cambiar una realidad que podemos manejar con
este tipo de medidas”.
Si bien el resto de los comercios no están obligados a ser parte de esta
iniciativa, con los supermercados involucrados se cubre casi el 90 por ciento
de las bolsas que circulan por Bahía “que son aproximadamente tres millones y
medio de bolsas por mes y que esperamos que la gente misma nos acompañe al no
recibir bolsas y cambie su hábito de consumo y tenga sus propias bolsas cuando
va a hacer las compras”.

La bolsa para la basura
Cuando las bolsas camiseta comenzaron a ser gratuitas y a crecer en
cantidad, muchísimas familias también las empezaron a usar para meter la basura
y después dejarlas en el canasto de la vereda. Sea cual sea el uso, esas bolsas
no son buenas para el medio ambiente y respecto a qué utilizar para sacar los
residuos, Serra explicó: “El mejor envoltorio para sacar los residuos en la vía
pública lo mejor es utilizar bolsas tipo consorcio que tienen otro micronaje,
que tienen otra resistencia, otro volumen, otra capacidad de carga y además el
hecho de retirar las bolsas de tipo camiseta sí implica evidentemente que va a
haber un mayor consumo de bolsas de consorcio pero ese aumento en el consumo de
bolsas de consorcio nunca se va a equiparar con la cantidad de bolsas que hoy
están circulando por la ciudad tipo camiseta”.
Más allá de esto, Serra hizo hincapié en la política de separación de residuos
en origen: “Esto implica que podamos arrancar en julio cuando empecemos con
esta campaña de separación, tener bolsas de residuos tipo consorcio con dos
colores definidos y no tener la bolsa del supermercado A con un color, la bolsa
del supermercado B con otro color porque va a ser muy difícil después trabajar
de manera ordenada en lo que es la identificación y la clasificación de los
residuos”.
Además, Serra subrayó la posibilidad de recuperar las bolsas de consorcio: “Cuando
uno habla de mayor micronaje, porque todo tiende a tergiversarse implica que
ese mayor micronaje tiene mayor resistencia la bolsa, mayor capacidad de carga
pero también tenemos una posibilidad a través de las máquinas específicas que
se han comprado en la Ecoplanta a través de la municipalidad de Bahía Blanca de
poder recuperar estas bolsas. Entonces hay máquinas rasgadoras que están
diseñadas para poder recuperar estas bolsas de residuos y generar otro tipo de
productos”.