En el Día Internacional contra la Trata de
Personas, EcoDias conversó con un integrante de un espacio que se constituyó
con la idea de sumar voluntades para poder prevenir y combatir este flagelo.

Cada 23 de septiembre se evoca el Día Internacional contra la Trata de
Personas cuyo nombre en realidad es algo más largo y más difícil para decir o
escribir en los medios de comunicación: Día Internacional contra la Explotación
Sexual y el Tráfico de Mujeres, Niñas y Niños.
Esa fecha fue instaurada en enero de 1999 por la Conferencia Mundial de la
Coalición contra el Tráfico de Personas junto con la Conferencia de Mujeres en
Dhaka, Bangladesh. Y esa fecha justamente se evoca porque un 23 de septiembre
de 1913 se promulgó la ley 9.143 que constituye la primera norma legal en el
mundo contra la prostitución infantil. Tal vez pocos lo sepan pero esa naciente
legislación se produjo en nuestro país, en la Argentina, lo cual podríamos
considerar como un ejemplo. Sin embargo, lejos estamos de serlo si tenemos en
cuenta las redes de trata que operan en el país y la cantidad de personas que
se encuentran desparecidas o muertas, víctimas de esas redes.
En decenas de oportunidades han pasado por estás páginas profesionales,
políticos, dirigentes o miembros de organizaciones que trabajan y mucho para
combatir la trata de personas incluso en nuestra ciudad de Bahía Blanca.
Es necesario e importante hacer oír su voz lo cual queda demostrado si cada 23
de septiembre uno mira la televisión y se encuentra con comunicadores hablando
de este flagelo pero solo durante un rato y no con el espacio que el tema y
quienes trabajan en el mismo, merecen.
EcoDias el 23 de septiembre volvió a ocuparse de la trata de personas y hoy lo
vuelca al papel. Pero esta vez no con especialistas ni abogados ni psicólogos u
ONGs sino con personas comunes llamémosle, ciudadanos de a pie que están
preocupados por la problemática, que hacen saber su opinión y van por más.
Las redes sociales tienen un efecto rebote impresionante y funcionan como un
órgano de difusión importantísimo a nivel comunidad. Si se tiene una cuenta de
Facebook y se escribe en el buscador “Trata en Bahía Blanca” se va a encontrar
justamente un espacio que lleva ese nombre y que en Facebook tiene lo que se
conoce como fan page en donde uno puede unirse simplemente poniendo Me Gusta.
Hasta el 23 de septiembre “Trata en Bahía Blanca” contaba con 1040 Me Gusta y
un montón de fotos de bahienses anónimos que mostraban su cartel de No a la
Trata.
Según dice en su presentación, “Trata en Bahía Blanca” es un espacio donde
ciudadanos interesados en la problemática de trata de personas “nos podamos
encontrar”. Su misión es constituir una asociación civil que contribuya en la
prevención de este flagelo, aportando ideas, presencia y control ciudadano.

Necesidad de juntarse
Cuando EcoDias se contactó al Facebook de “Trata en Bahía Blanca” quien
contestó fue uno de los administradores de la fan page, Franco Di Santi quien
luego ya en entrevista explicó: “Vimos la necesidad de juntarnos personas que
individualmente teníamos un interés sobre el tema, convencidos que desde lo
colectivo es como se pueden hacer cosas. Y concretamente sobre este tema
creemos que es valioso tanto la comunicación de valores como también el control
ciudadano. Y para poder llevarlo adelante era muy importante juntarnos, ir
creciendo y multiplicando un espacio para que esto puede ser cada vez más
grande”.
La iniciativa nació entre amigos estudiantes de la universidad pero enseguida,
al abrirse la difusión, se amplió con una gran cantidad de personas: “Se
sumaron jubilados, personas de la sociedad civil de distintas profesiones y por
suerte es bastante variado el espacio y va creciendo mucho. Creemos que es muy
importante esa diversidad porque esa diversidad es la que lo hace llegar a
distintos lugares y como la trata está en todos lados y en todos lados se debe
atacar, creemos que es muy valioso que el espacio que queremos constituir y
queremos que siga creciendo, sea lo más diverso posible”.
Acerca de por qué nació el espacio, Di Santi señaló que se trata de un poco de
todo y que no necesariamente responde a algo: “Estoy convencido que el
conocimiento formal sobre el tema no es lo principal, lo más importante es cómo
nos pega a cada uno de nosotros este flagelo. Y a partir de sensibilizarse por
el tema es que nos empuja a juntarnos porque si no nos juntamos respecto a este
tema, mucho no podemos hacer solos”.
Di Santi destacó la difusión que se logra a través de una red social poniendo
un simple Me Gusta ya que haciéndolo, esa acción la puede ver otro contacto de
Facebook y hacer lo mismo: “Realmente estamos muy contentos porque mucha gente
se ha prendido y vemos que es una herramienta muy útil y lo queremos seguir
utilizando. Un ejemplo de lo importante que es la participación de la gente a
través de las redes es que esto podría empujar políticas públicas y que la
gente se meta más en el tema porque vemos que hay cierta indiferencia, incluso
esto se puede ver con debates que se han pinchado en el Concejo Deliberante o
cierto desinterés generalizado sobre el tema”.

Una selfie que sirva de verdad
Marita Verón y su mamá, Susana Trimarco son
quizás el símbolo de las víctimas de la trata y de la lucha contra la trata en
la Argentina. La foto de Susana sosteniendo justamente una foto de su hija
compone lo que se conoce como foto de perfil del espacio de “Trata de Bahía
Blanca”. Y siguiendo con las fotos y hasta haciendo abuso de esa palabra, la
que representa la portada de la fan page es una que declara que Bahía Blanca le
dice no a la trata.
Actualmente se utiliza o está de moda otra palabra para referirse a fotos o
auto fotos y son las famosas selfies. A nivel mundial hay selfies de cualquier
cosa, nos permitimos decir de cualquier pavada. En “Trata en Bahía Blanca”
muchos bahienses han publicado sus fotos o selfies con un cartel que dice algo
alusivo a la lucha contra la trata. Son selfies que en definitiva sirven de
verdad: “El compromiso simple de ciudadanos comunes pero que a su vez
tienen amigos y que poniéndole el rostro con un compromiso personal, le dicen
no a la trata con todo lo que eso significa. Significa por un lado no alimentar
el sistema como cliente pero también ofrecerse para compartir y difundir un
valor que realmente es importante porque de los derechos humanos que hoy en día
se conculcan a través de la trata de personas creo que es el flagelo más nocivo
que hoy en día tenemos en la sociedad”.
Por otro lado, Di Santi habló de los objetivos que tienen y que rondan en
constituir una asociación civil “como par dar un marco de institucionalidad
pero más allá de lo formal creemos que lo importante es seguir creciendo como
espacio, que aumente en diversidad y en volumen porque cuántos más seamos creo
que más actividades vamos a poder desarrollar. Y las actividades que vamos a
encarar se irán delineando en función de los propios integrantes. Incluso esto
surgió a partir de reuniones, nos juntamos en una reunión, surgió la idea de
hacer esta campaña y ahora ya está en marcha así que invitamos a todos a que se
sumen”.
EcoDias le preguntó a Di Santi acerca de qué información hay respecto a
la trata en nuestra ciudad: “En Bahía Blanca está la información pública de
Gobierno Abierto que comunica que existen más de 40 lugares habilitados. Bahía
Blanca es una ciudad de destino en lo que hace a trata de personas, de todas
maneras no tenemos que asociar directamente al problema de trata al tipo de
trata que implica el traslado de una región muy lejana. También puede existir
un aprovechamiento de la vulnerabilidad social de una persona pero creemos que
en ese sentido sí es una ciudad de destino y que financia por ejemplo la
captura de redes de personas de otras regiones. En ese sentido creemos que es
importante porque se financian las redes de los lugares de destino y Bahía es
uno de ellos”.
A nivel político local, puntualizó en que desde hace un tiempo asumió un nuevo
secretario en el área de Derechos Humanos municipal, que se realizó
recientemente una jornada de difusión por lo cual espera que pueda trabajar bien
y poder acompañar: “Creo que son necesarias todas las patas porque esto es un
problema muy grande, incluso aunque si bien es indelegable la responsabilidad
en el Estado nacional por ser un delito federal, desde lo provincial atendiendo
a lo que hace a la salud y a también cuestiones sociales, desde lo local
también se pueden hacer cosas y desde la sociedad civil también estar atentos y
empujar el tema para entre todos tratar de compensar lo poderosas que son estas
redes”.
Casi concluyendo la charla, Di Santi brindó una reflexión justamente en el día
contra la trata: “Creo que la manera de luchar es comprometernos, es no ser
indiferentes y animarnos a que todos podemos hacer algo y responder a esto. Lo
principal no es lo que sepamos o el conocimiento que tengamos del tema aunque
siempre nos podemos informar, sino tomar dimensión del dolor que existe en cada
persona que es tratada, que es explotada y que no podemos mirar para otro
lado”.