Desde Defensa Civil se elaboró un
proyecto para brindar herramientas básicas a niños y adolescentes en relación a
saber cómo actuar en caso de sufrir un incendio.
La dirección comunal de Defensa Civil elaboró un proyecto que refiere a una
campaña de concientización destinada a niños y adolescentes con el objetivo de
que éstos aprendan cómo comportarse en caso de sufrir un incendio y tener que
refugiarse.
La propuesta fue presentada ante los medios de comunicación en una conferencia
de prensa en la que estuvieron presentes diferentes autoridades municipales y
en la que se dijo que primero se trabajará con chicos que van a los jardines de
infantes y con aquellos del ciclo inicial primario para luego hacerla extensiva
a los ciclos superiores.
Federico Montero es el director de Defensa Civil y dialogó con EcoDias acerca
de la iniciativa: “Nosotros en base a los últimos acontecimientos vividos en la
ciudad lo que hicimos es lanzar una campaña masiva y de gran alcance para
concientizar en primera instancia a los niños de jardín hasta los adolescentes
de 12, 13 años. La idea es hacerla extensiva luego de esta primera etapa a todo
aquel que quiera este recurso como centros de jubilados, sociedades de
fomentos, clubes, etc. La temática central de todo esto va a ser la
concientización en incendios y en evacuación, que los chicos sepan cuando hay
un incendio declarado a quién tienen que llamar, por dónde tienen que salir,
los roles que tiene que cumplir cada persona en una evacuación, hablando de
obviamente una institución educativa”.
También se hará hincapié en que los niños aprendan dónde tienen que
resguardarse y dónde no tienen que hacerlo: “Obviamente son herramientas que
preparan a la gente para la emergencia hasta tanto lleguen los recursos que
tienen que arribar para colaborar con la tarea”.
Montero aclaró que la implementación de este tipo de campañas no es nueva y que
hace dos años que Defensa Civil la viene realizando en diferentes lugares.
Ejemplo de ello es la preparación desarrollada con el gremio del personal de
edificios “que lo que hacía era convocar a todos los porteros y nosotros íbamos
tres veces por semana a dar charlas y realizábamos evacuaciones”.
A lo que se apunta ahora y se quiere hacerlo de forma contundente, es a los
niños “porque los últimos eventos que hemos tenido lamentablemente hemos
sufrido la pérdida de cinco criaturas que se refugiaron en lugres donde no
deben refugiarse. Por eso apuntamos en una primera instancia fuertemente a lo
que son los niños. Vamos a hacer una capacitación teórica por medio de videos
apuntados a niños para que los puedan entender y sean fáciles de asimilar.
Después vamos a hacer con los técnicos de Defensa Civil una evacuación real,
con obstáculos reales para que los niños puedan salir de una casa que en teoría
está prendiéndose fuego”.
También está prevista la entrega a los chicos de unos cuadernillos con
actividades para realizar en sus casas junto a los padres “pudiendo los niños
identificar los objetos calientes que puede tener la casa. Que los niños puedan
realizar con sus padres un lugar de evacuación del lugar donde viven para que
vayan formándose en el antes, en la preparación para que puedan a nosotros dar
una mano después, cuando el evento ya está iniciado”.
Tomarlo con seriedad
Por otra parte EcoDias le preguntó a Montero sobre el hecho de trabajar con
chicos en temáticas tan importantes como las que refieren al proyecto: “El
chico lo que tiene es que incorpora como si fuese una esponja, al chico se le
explica y atentamente escucha, responde, pregunta y a lo que nosotros estamos
apuntando es a que jugando los más chiquititos empiecen a formarse en lo que es
la preparación para la emergencia”.
En ese sentido, Montero agregó. “Para nosotros es indistinto, esta temática de
capacitación la venimos haciendo con el Rcp (Reanimación cardiopulmonar) hace
tres años y hemos capacitados más de seis mil personas. La gente se engancha y
mucho porque fundamentalmente lo que hay que rescatar es que son herramientas
fáciles de incorporar y válidas para la preparación de la emergencia”.
Asimismo destacó lo que se siente cuando el niño aprende y multiplica su
experiencia: “La verdad que es una satisfacción muy grande cuando un niño va a
la casa y le cuenta al papá y le dice por dónde tiene que salir y por dónde no.
Nosotros queremos trabajar fuertemente con los chicos en primera instancia,
después apuntaremos a otros grupos etarios”.
Consultado por EcoDias sobre algunos puntos fundamentales de la capacitación en
sí, remarcó el hecho que los niños sepan que en caso de una emergencia tienen
que llamar al 911 pero identificando esa teléfono número por número. “Tienen
que llamar al nueve uno uno nunca al novecientos once porque el niño pequeño
puede identificar el nueve, el uno y el uno pero no el once. Por eso siempre es
nueve uno uno. Tenemos que explicar al niño que no debe refugiarse en un baño,
que no debe refugiarse en un lavadero, que debe salir al exterior. Hay que
indicarle al niño cómo tiene que salir al exterior, si hablamos de una
comunidad educativa le tenemos que explicar a toda la comunidad educativa que
en todo plan de evacuación hay roles bien definidos que cada cual debe respetar
obviamente para que el plan de evacuación global salga bien”.
Luego de la parte teórica y de haber hecho una práctica primaria, se va a
pautar previa anuencia de los padres y de los directivos de cada
establecimiento, asistir un día a la escuela sin que lo sepan los alumnos y los
docentes “y llevar a la práctica con toda la comunidad educativa el plan de
evacuación que debe tener la escuela y que para eso se lo vamos a enseñar”.
Al respecto, Montero se refirió a los resultados que estos ejercicios suelen
tener: “Tiene mucho éxito esto porque de los simulacros obviamente después
nosotros hacemos una evaluación y sacamos todos los puntos negativos que hemos
tenido y automáticamente hacemos la devolución para con todos los que
participan en el simulacro y les contamos los puntos en que se ha fallado”.
En los simulacros los maestros y maestras que retiran a los chicos del lugar
deben saber la cantidad de los mismos y que no se puede volver bajo ningún
punto al aula a buscar nada: “Tenemos que salir sin nada, ordenados, de la mano
y la guía tiene que ser la maestra. Nos ha pasado que alguna maestra en algún descuido
ha perdido un niño, perdido porque se lo hemos sacado nosotros para hacer más
real el simulacro, y cuando llegamos al punto de encuentro, el punto seguro,
nos encontramos con que la profesora tenía que tener 25 niños y tiene 22”.
Esas fallas forman parte, cuando ocurren, de los puntos negativos dentro de los
resultados del simulacro: “Entonces esto sirve para que el simulacro se tome
con la seriedad que se tiene que tomar”. Si no existe esa seriedad a la hora
del ensayo, más difícil se va a poner todo en caso de que haya un caso real.
Si bien desde Defensa Civil va a haber una comunicación con el Consejo Escolar
y con las escuelas para ir a desarrollar la campaña, las instituciones
interesadas pueden comunicarse al 4563660 de lunes a viernes en el horario de 8
a 15.
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