La
Sociedad de Fomento de Villa Cerrito -al igual que el barrio- se
encuentra pasando un buen momento según los dichos de quienes allí
residen. Es que pese a los problemas que existen, como en cualquier
sector de la ciudad, al recorrer las calles de Villa Cerrito uno nota
un gran avance, con lugares muy atractivos como su plaza, que según
afirman los vecinos es la más linda. Lo mismo ocurre con la Sociedad
de Fomento: sus instalaciones son admirables y según nos cuenta su
presidente María Boldrini, ha avanzado mucho desde el momento de su
inauguración. Hoy la institución tiene algunos objetivos en vista
pero lo que más se ansía es el recambio, es decir, gente nueva para
seguir trabajando.

Un
poco de historia

La
Sociedad de Fomento nació hace 43 años y obviamente la realidad de
aquel momento era diferente a la actual, así María resalta que
durante esa época se participaba más aunque argumenta que hoy esto
ocurre porque la realidad misma así lo impone: “Hace cuatro años
y medio que soy presidenta de la Sociedad de Fomento pero siempre he
participado como vocal. Yo vine acá desde recién casada cuando esto
era un terreno que recién se había comprado. En aquel momento mi
hija era chica por lo tanto lo que hacíamos era buscar firmas para
poner el gas, las cloacas, todo con mucho esfuerzo. En ese tiempo me
parece que la gente participaba más, o a lo mejor tenía más tiempo
ya que la mujer no trabajaba afuera como ahora”.

La
institución pasó por un mal trago a comienzos de la década del 90.
La lucha y el trabajo fueron los pilares para que la Sociedad de
Fomento pudiera salir adelante. Uno de los que puso el hombro en
aquel momento fue el marido de María quien construyó un hermoso
quincho que hoy está al servicio de los asociados: “Mi marido fue
tesorero en un momento en que la sociedad de Fomento quedó acéfala.
La agarraron tres socios, renunciaron todos y nos dejaron toda la
deuda en impuestos impagos. Todo se tuvo que iniciar de cero. Esto
fue en el ‘91 por eso es que resalto cómo se ha luchado. Hoy
estamos sin ninguna deuda, estamos eximidos del impuesto municipal,
tenemos la personería jurídica con la cual podríamos lograr que
nos exceptúen de pagar el impuesto inmobiliario, que nos den
subsidios para poder terminar muchas cosas que faltan”.

Qué
se puede hacer

La
institución propone varias actividades destinadas a personas de
cualquier edad. Por ejemplo, desde hace cuatro años está trabajando
la Escuela Profesional 401 a través de cursos de conservación de
alimentos. Todo es gratuito y funciona en la sede que está muy bien
equipada para dicho curso.

Por
otra parte se ofrece gimnasia controlada para gente de la tercera
edad. Dicha actividad ha tenido mucho éxito y concurren personas de
hasta 80 años a practicarla.

El
ajedrez también tiene su lugar en Villa Cerrito, y de manera
gratuita se puede asistir a las clases dictadas en uno de los salones
de la sede.

Las
instalaciones merecen un párrafo aparte. Cuentan con dos salones,
una cocina, dos baños, y en la parte trasera del inmueble un quincho
con otros dos baños. Todo está perfectamente cuidado y señalizado
al igual que la salida de emergencia.

Entre
los objetivos a futuro figura el de contar con una biblioteca. Al
respecto María sostiene que el “objetivo es que podamos terminar
nuestra biblioteca, tendremos 300 ejemplares pero se requiere también
de una bibliotecaria aunque no la dejan habilitar porque tendría que
tener una salida directa al exterior. El otro salón está preparado
para que se le haga un primer piso y ese es el objetivo, que los que
continúen puedan hacer ese piso y poner la biblioteca allí”.

El
recambio necesario

Voluntad,
trabajo y lucha son tres palabras que María repitió con frecuencia
a lo largo de la nota. Las mismas que espera tengan quienes continúen
en la Sociedad de Fomento ya que su idea es irse este año: “Ya
estamos en tiempo de recambio, nosotros si Dios quiere llamaremos a
elección para el mes de mayo, posibilidades de que venga gente nueva
hay. El tema son las ganas, hay que tener ganas para este trabajo. Mi
idea es dejar, hace falta tal vez un cambio, gente nueva. Es muy
difícil pero cuando yo me inicié acá no sabía de muchas cosas y
sin embargo vas aprendiendo”.