En el año 2000, la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de Bahía Blanca redactó un borrador para un proyecto de sesión de las tierras donde funcionó “La Escuelita”. Esta idea fue llevada por Ernesto A. Malisia y Eduardo A. Hidalgo al seno de lo que fue el Foro Bahía Blanca por la Memoria y la Justicia, de la Comisión Provincial por la Memoria. El dr. Hugo Omar Cañon, como integrante de ese organismo provincial, la tomó y se logró una resolución de la Legislatura Provincial que declaraba de interés el traspaso de esas tierras al municipio local para luego cederla mediante un convenio a los organismos mencionados. La resolución apuntaba a que se creara un Centro de la Memoria, a partir de la larga y ardua tarea de los organismos en tal sentido. Luego de eso se realizó una entrevista con el entonces Ministro de Defensa Ricardo López Murphy. Su respuesta, palabras más palabras menos, fue que mientras el fuera ministro ese traspaso de tierras nunca se concretaría. Alli quedó entonces detenido el proyecto.
En julio del 2006, a través de una comunicación de la diputada Burstein, supimos que había iniciado un trámite de sesión de esas tierras en el mismo sentido. Le comunicamos de los antecedentes del proyecto y de la resolución legislativa provincial del 2000, que dijo desconocer. El 4 de julio de 2006, el Premio Nobel de la Paz Adolfo Pérez Esquivel, Laura Conte, y el dr. Hugo Omar Cañon -en representación de la Comisión Provincial de la Memoria-, junto a Eduardo A. Hidalgo, secretario general de la APDHBB, y la diputada Burstein, mantuvieron una entrevista con la ministra de Defensa Nilda Garré. Se le informó de la solicitud y de los pormenores con relación al recorrido de aquel proyecto, adjuntándole incluso una fotografía aérea y antecedentes del predio.
La ministra pidió tiempo a fin de ver la situación de las tierras y para estudiar el traspaso, que como nos manifestó podía ser por decreto presidencial o ley nacional como había sucedido con las tierras de la ESMA. La respuesta fue la que suponíamos por su compromiso histórico y nos llenó de expectativas.
Hace unos días el señor intendente junto al concejal René Bustos aparecen solicitando tierras para la UTN.
El concejal Bustos se comunicó previo a esa solicitud con Eduardo A. Hidalgo, informándole de la intención -suya y del intendente- del pedido de las tierras para la UTN, incluyendo en las mismas a las tierras de “La Escuelita”. Eduardo A. Hidalgo lo puso en conocimiento de todos los antecedentes, entrevistas, pedidos y objetivos a concretar, realizados por esa zona a la ministra de Defensa en julio de 2006. El concejal se sorprendió por esto y por el acompañamiento de la diputada Burstein.
Luego apareció el rector de la UTN, según declaraciones del concejal, reuniéndose con asesores de la ministra para oficializar el requerimiento. Sorprendió que las tierras elegidas hayan sido las mismas que solicitaran los organismos mencionados arriba. Además, el concejal expresó que la UTN construiría en ese predio donde funcionó “La Escuelita” un Museo de la Memoria, que quedaría a cargo de la Comisión Provincial por la Memoria, la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de Bahía Blanca y la Secretaría de Derechos Humanos, sin especificar si nacional o provincial. Estas declaraciones profundizaron la sorpresa y confundieron mucho más a los vecinos bahienses que conocen el origen de esto. No entendemos cómo y por qué la UTN es designada para construir algo en relación a lo referido al Terrorismo de Estado, siendo que en ningún momento ha habido actos que recordaran a los estudiantes caídos de esa universidad, como a profesores perseguidos. Incluso en su libro que recuerda los 50 años de la institución, no hay una palabra en cuanto al accionar de las patotas de la Triple A local y el acompañamiento o conductas de silencio cómplice de la conducción universitaria de entonces. Todo esto dejaría evidenciado que vaya a saber por quién y cómo se organizó toda esta situación, desconociendo absolutamente a los dirigentes de las organizaciones mencionadas e involucrados desde el inicio del proyecto.
La Asamblea Permanente por los Derechos Humanos de Bahía Blanca no participa de lugares muertos como “Museos de la Memoria”. Cree y aporta a espacios vivos en tal sentido como centros de estudio, información y debate, cuestión que entiende también comparten la Comisión Provincial por la Memoria y los Familiares y Amigos de Víctimas del Terrorismo de Estado.
Como sabemos que la ministra desconoce determinadas realidades locales, esperamos por todo esto las explicaciones y aclaraciones correspondientes por parte del intendente y el concejal Bustos al respecto, ya que nada de lo conocido informalmente en su inicio siquiera se parece a lo explicitado públicamente.