La Subsecretaria de Niñez y Adolescencia comunal, Sandra Polar, presentó la semana pasada un programa destinado a la Promoción y Protección de Derechos de jóvenes de entre 14 y 18 años que involucra variadas actividades barriales. El plan fue elaborado de manera conjunta con el Instituto Cultural e interactuará con otras oficinas comunales.

Sandra Polak destacó que para los jóvenes de entre 14 y 18 años hay muy pocas políticas activas por parte del Estado, sobre todo teniendo en cuenta que este grupo de edad tiene un alto índice de deserción escolar y demasiado tiempo libre.
“Al no estar escolarizados tampoco están proyectando su futuro. Viendo estas cuestiones decidimos conformar un grupo de trabajadores comunitarios que están recorriendo los distintos barrios de la ciudad y a partir de las necesidades, de los deseos, de aquellas oportunidades que los chicos hubieran querido tener y no han podido hasta este momento por varias razones”, comentó la funcionaria.
El objetivo de los organizadores es brindar espacios comunitarios a través de los cuales se capacite a los chicos mediante talleres socioculturales, espacios de prevención en torno a temas de salud y alternativas en deporte para que “puedan ocupar ese tiempo ocioso en otras cuestiones que lo preparen mejor para el futuro próximo”.
La primera etapa del Bahía Pibe se remonta a los últimos tres meses en distintos puntos de la ciudad, donde se reconoció la institucionalidad de la escuela, las entidades que trabajan con chicos, el centro de salud más cercano y las mismas trabajadoras sociales del municipio, intentando formalizar una red en un esquema de corresponsabilidad respecto a la mirada del adolescente. En base a eso, se detectaron los espacios físicos indispensables y una vez garantizados estos dos puntos se comenzó el contacto directo con los jóvenes en sus lugares de encuentro.

Cinco ejes
Con la red armada las tareas prácticas se bajaran mediante cinco rubros generales: cultura, salud, educación, deportes y producción.
En el primer caso, se coordinaron espacios abiertos a la comunidad en diferentes barrios, para avanzar en la conformación de los talleres culturales. Los talleristas y docentes son recursos humanos del Instituto Cultural y de la Subsecretaría de Niñez al igual que los materiales e insumos necesarios.
Lo vinculado a salud involucra numerosas actividades relacionadas con la prevención de adicciones, embarazo adolescente y VIH-ETS. Estos espacios estarán coordinados por profesionales y se brindarán a través de un taller vivencial para intercambiar historias de vida, saberes y experiencias.
Se profundizará el contacto con las escuelas en materia educativa con el objeto de articular acciones para evitar la deserción y proponer alternativas de terminalidad. Entran en juego también los espacios de capacitación en oficios, la educación no formal, poniendo a disposición de las futuras demandas, alternativas educativas articuladas con organizaciones comunitarias y con Centros de Formación Profesional.
En deportes, se articulará con la LI.BA.FI. mejorando los controles médicos -interactuando con la Dirección municipal deportiva-y se propondrá un esquema de becas deportivas, con la participación de clubes, para poder dar respuesta a inquietudes vinculadas a las diferentes disciplinas que van más allá de lo abarcable por la Liga infantil de fútbol.
Finalmente, se establecieron acuerdos con la Agencia de Desarrollo y el área de Producción comunal para articular alternativas de exposición y eventualmente venta, de los productos que se realicen en los talleres y espacios de capacitación. El ejemplo a seguir es la Cooperativa Tutelar cerrense “Tierra Joven” que produce elementos de cerámica habitualmente a la venta en un local del Mercado Municipal.

Variedad de oportunidades
Los jóvenes de Miramar pueden acercarse a la Casita Municipal, la unidad sanitaria o la escuela para informarse acerca de los talleres de alfarería y metales. Además, se están fortaleciendo proyectos que ya se estaban desarrollando, por ejemplo, un grupo de adolescentes que pintan las casas del barrio, construyen nomencladores para las calles y mejoran así el espacio en el que viven con la intención de apropiarse de la identidad del sector.
En Cerri, presentándose en la Cooperativa “Tierra Joven”, el Jardín Rayito de Sol o la Delegación Municipal podrán obtener información sobre los talleres de cerámica, telas, creación de historietas y el fortalecimiento de peñas folclóricas.
Se podrán realizar alfarería en la Sociedad de Fomento de Milla Mapu y a través de la Delegación Municipal de Villa Harding Green se puede acceder a las inscripciones para cerámica y textil. En este último lugar se está organizando un proyecto productivo en colaboración con el delegado.
Finalmente, temáticas vinculadas a la salud se desarrollarán fuertemente en el Centro de la ciudad, comenzando con un taller de prevención de la violencia en el noviazgo en forma conjunta con la Secretaría de Salud en el Teatro El Tablado y danza inclusiva para chicos con necesidades especiales en el Salón Fundadores de la UNS. Asimismo, en conjunto con el CPA habrá iniciativas en materia de adicciones, transmisión de enfermedades sexuales, prevención del embarazo adolescente. .
Próximamente se anunciarán nuevos talleres en distintos sectores de la ciudad. Para ello, se invita a las organizaciones de la ciudad que quieran articular con el programa Bahía Pibe a conectarse con el Centro de Promoción y Protección de Derechos del Niño en Chiclana 332 o al teléfono 453-9831.