Invitados por la Comisión de Planificación y Promoción de Desarrollo Económico-Social del Concejo Deliberante, la coordinadora del CLES Laura Celani, el titular de Cáritas José Olmedo y tres emprendedoras del Programa de Economía Social y Solidaria para repasar lo realizado desde la firma del convenio y diseñar acciones en conjunto para profundizar la tarea y sortear los obstáculos que va presentando el nuevo camino.
Desde remeras y mochilas, pasando por artesanías y juguetes en madera, hasta diversos alimentos y productos rurales es la variada oferta de estas cerca de 130 personas que alguna vez fueron excluidas del frío mercado laboral y hoy pelean para crearse uno más justo, responsable y solidario. Estas iniciativas están avaladas por la ley provincial 13.136 de promoción de Unidades Económicas de Actividades Laborales de Autoempleo y Subsistencia (ALAS) y la ordenanza local adherente.
“Hay algunos emprendedores que han recibido financiamiento para comprar insumos, equipamientos y maquinaria a través de lo que fue el programa Manos a la Obra, otros beneficiarios están incorporados en lo que fue la presentación del plan integral que estamos esperando el primer financiamiento para aproximadamente dentro de treinta días”, aseguró Laura Celani a EcoDias y agregó que también “hay gente que viene participando de la mano de Cáritas desde hace muchos años en lo que fue la primera feria de Acutuy Pilmaiquen (“llegaron las Golondrinas”) en Noroeste y sectores de las Delegaciones que en el marco del programa reciben la posibilidad de participar en la feria, capacitaciones, estímulo para realizar viajes -de hecho en los últimos días emprendedores alimenticios viajo a Zárate a un encuentro de comercio justo-“.
Además, la coordinadora del CLES comentó respecto a los ámbitos de comercialización para estos productos que “el año pasado se trabajó muchísimo sobre el tema de feria pero sobre fin de año en el rubro textil hubo una aproximación con algunos sindicatos de la ciudad y se pudieron confeccionar remeras y mochilas. Ahora la idea es poder continuar con el resto de los rubros en ese sentido, que puedan ser proveedores del Estado, buscar alternativas de comercialización más allá de la feria”. Para esto cuentan hoy con el compromiso de los concejales de allanar las trabas burocráticas.

Un lugar propio
Los emprendedores realizan sus actividades en sus hogares lo que en rubros como el textil, trae algunas inconveniencias, por ejemplo para cortar las telas. Por ello, la necesidad de contar con un espacio de producción colectivo.
Según Celani “se está por firmar en pocos días un convenio de una cesión que el municipio le va a hacer a Cáritas y sería sentar las bases de este programa de Economía Social y Solidaria, donde después se empezaría a analizar que cuestiones trabajaríamos desde ese espacio físico”.
Malvinas y Rondeau, es el terreno con más posibilidades, parte del mismo pertenece al municipio y se le ofreció a Cáritas: restaría solo ocuparse de las cuestiones legales. “Sería muy interesante contar con un lugar, si bien después va a haber que hacer muchísimo para acondicionarlo, se iría trabajando todo lo que es parquización y lo que es la apropiación por parte de los emprendedores”.

Productores sin lock-out
“Cuando empezamos a trabajar en esta presentación del plan integral, convocamos una mesa actoral, vino gente que a través de convenios con la UNS está trabajando hace muchos años en toda la zona del cinturón fruti-hortícola y con pequeños productores que por ahí están en el programa Social Agropecuario, que tienen aproximadamente media hectárea, que se dedican tanto a lo que es hortícola como a la cría de cerdos y ahora la idea es diversificar a pollos barrilleros”, informó Celani acerca de los emprendedores de Cerri.
Estos son los que más dificultades presentan para cumplir con las reglamentaciones sanitarias vigentes aunque tienen el respaldo y la voluntad de ponerse al día: “Realmente es una población de gente muy vulnerable que va a recibir financiamiento, aproximadamente ocho mil pesos por proyecto en esta primera etapa, del desembolso del Ministerio de Desarrollo Social, pero más allá de esto se está colaborando técnicamente con ellos para trabajar en las dificultades que tienen, que son múltiples sobre todo con lo que tiene que ver con infraestructura, acondicionar los espacios físicos y justamente la parte de saneamiento, incluida la problemática de la zona con respecto al agua, que intentaremos sanear con dos ingenieros agrónomos de Cáritas“.