Nuevo director de PNUMA
Política económica y política ambiental

En el acto de asunción el nuevo director ejecutivo del Programa de las
Naciones Unidas para el Medio Ambiente (PNUMA) hizo un llamado a todas las
naciones a colocar al medio ambiente en el centro de sus políticas
económicas.

Achim Steiner, antiguo director general de la UICN (Unión Mundial para
la Naturaleza), de 45 años de edad, ciudadano alemán nacido en Brasil, cuyo
currículo incluye el cargo de secretario general de la Comisión Mundial
sobre Presas, es el quinto director ejecutivo de PNUMA, desde su fundación
a principios de la década de 1970.
En su discurso inaugural en Nairobi señaló que “durante demasiado
tiempo ha parecido que la economía y el medio ambiente son jugadores de
equipos rivales. Se han desafiado cruelmente y han alcanzado demasiadas
metas individualistas. Necesitamos hacer de ambos lados de la moneda del
desarrollo, economía y medio ambiente, jugadores del mismo equipo,
llevarlos a la cancha como compañeros”, dijo.
“Así tendremos la oportunidad de realizar un viraje fundamental de
valores y lograr un nuevo entendimiento sobre lo que realmente hace girar
al mundo. Hasta hace poco, los bienes y servicios brindados por la
naturaleza sólo fueron retribuidos con adulaciones por parte de la
contabilidad económica tradicional. Por ende, la tierra, el aire, la
biodiversidad y las aguas del mundo han sido tratadas como bienes gratuitos
e ilimitados”.
Achim Steiner añadió que hay un torrente de informes elaborados el año
pasado, incluida la Evaluación de Ecosistemas del Milenio, realizada con
apoyo del PNUMA, en los que se subraya la “enorme riqueza de los servicios
que brinda la naturaleza”.
 “Del mismo modo destacan que un importante número de ellos están
cayendo en la categoría de recursos limitados debido al abuso, la mala
gestión y la sobreexplotación”, comentó.

Desafíos
Steiner dijo que uno de los principales desafíos que enfrenta en su
primer período en funciones como director ejecutivo del PNUMA, es poner fin
a este “antagonismo entre la política económica y la política ambiental”.
Informó que se concentrará en la manera en que pueden funcionar los
mercados y los incentivos económicos y los tratados y acuerdos
internacionales de manera que se trabaje “a favor del medio ambiente, de
los pobres y, en consecuencia, del desarrollo sostenible”.
Entre los muchos objetivos que reveló, orientados a la tarea de
vincular aún más al PNUMA con los desafíos del siglo XXI, destacó la
importancia de desarrollar lazos más fuertes y eficientes con otras
organizaciones del sistema de Naciones Unidas, con la sociedad civil y con
el sector privado.

Aprovechar espacios
Señaló que el Panel de Alto Nivel de la Asamblea General de la ONU para
la congruencia del sistema de Naciones Unidas en los temas relativos al
desarrollo, la asistencia humanitaria y el medio ambiente, así como las
consultas informales de la Asamblea General de la ONU sobre el marco
institucional de las actividades ambientales del sistema de Naciones Unidas
(presididas por embajadores de México y Suiza) constituyen “verdaderas
oportunidades que todos debemos aprovechar”.
“Por vez primera en veinte años el medio ambiente y la arquitectura
internacional reciben los más altos niveles de atención. Se nos brinda una
oportunidad de oro para reformar las instituciones y estructuras a cargo de
las políticas ambientales regionales y mundiales. No podemos dejar pasar
semejante oportunidad”, comentó Steiner.
“Estoy plenamente comprometido a garantizar que las oficinas centrales
del PNUMA sean el reflejo de instalaciones de clase mundial, tal como lo
son las agencias con sede en ciudades como Nueva York o Ginebra. África y
el mundo en desarrollo merecen igualdad de condiciones”, señaló.
“También quiero asegurarme de que, al final de mi primer período de
cuatro años en funciones, el PNUMA se convierta en un modelo aún más
destacado de liderazgo intelectual, evaluación científica y catalizador
energético para las profundas y significativas reformas de políticas
públicas y revoluciones urgentes en todo el mundo”, afirmó Steiner.