Entre los últimos días del año y el primer mes de 2009 estaba establecida la renovación de la escala salarial de los afiliados del Sindicato de Mecánicos y Afines del Transporte Automotor. Esta industria es una de las más desfavorecidas por la crisis financiera internacional, sobre todo en las terminales y plantas autopartistas, dado que las casas matrices de mayor envergadura son estadounidenses.
 
Por esto, los siete días pasados fueron de intensa negociación entre el gremio y las cámaras empresariales que, en el caso de la autopartistas pidieron una tregua y congelamiento salarial a cambio de estabilidad laboral y con los concesionarios de Acara se avanzaba en un acuerdo del 40% de incremento en tres cuotas aunque no se logró consensuar el plazo de vigencia.
Son los últimos capítulos de una tensa negociación de mecánicos y empresarios, que en Bahía se hizo oír en la calle con diversas y ruidosas movilizaciones y manifestaciones en las puertas de las concesionarias.  
“La meta que ellos tenían en su proyección de venta era de 620 mil autos, se va a allegar a 610 mil. Quiere decir que la rentabilidad si bien cayó, fíjense que acá estamos incluyendo la crisis del campo y toda esta situación que se vino dando en los últimos dos meses. A pesar de todo, prácticamente se cumple casi con el 95% del objetivo”, dijo a EcoDias Carlos Moreno, secretario general de la seccional bahiense.
A eso se suma que en algunos casos ya se pagan incrementos cercanos al 50% requerido en primera instancia motivados por la presión que originó la discusión. Hubo quienes firmaron aumentos del 35% al 40% en forma escalonada, hubo concesionarias que por propia decisión “sin firmar nada, como el caso de la regional Acara local” que está abonando un 15% más que se agrega a un 10% anterior, llegando al 25%.
“Marca que todavía lo que planteábamos no es descabellado, no estábamos lejos. Pasa que ellos tuvieron la suerte de que surgió la crisis y la incertidumbre. Acá en seguida cuando vemos una nube de algo que puede entorpecer, ya nos metemos debajo de ella y la llamamos. No tenemos que caer en ese cinismo, si bien hay preocupación ellos tienen que hacer el esfuerzo ya que tuvieron cuatro o cinco años de bonanza”, exigió Moreno.

El año de los 50
El 2008 fue para Smata Bahía Blanca un año especial y “positivo” dado que llegaron al cincuentenario institucional el 4 de octubre y lo celebraron con una cena de alrededor de 800 afiliados, afiliadas y familias.
“Esto permitió homenajear y recordar a quienes fueron nuestros antecesores y marca un hito muy importante para la seccional. Además pudimos recuperar la militancia sindical a través de esta discusión misma y las movilizaciones que sirvieron para despertarnos un poco del letargo que teníamos”, balanceó el dirigente.
En ese sentido, agregó que “los compañeros jóvenes han visto que las luchas y las conquistas que tiene los trabajadores y el movimiento obrero han sido a través de estas peleas, una herramienta más para lograr nuestras reivindicaciones. Más allá de lo que consigamos esto no nos tiene que hacer bajar los brazos, tenemos que seguir trabajando para cuando mejore”.