INADI
Sin derecho a divertirse

Dos personas denunciaron ante la delegación regional del Inadi ser
discriminadas en los boliches, pubs y espacios públicos por ser travestis.
El Club Universitario, La Barraca, Nativo, Chocolate, Don Perignon,
Impacto, Bailotage, Maxwell e Imperio son algunos de los comercios
mencionados aunque el rechazo y persecución se repite hasta en el Parque de
Mayo.

Fernanda, una de las denunciantes, dijo a EcoDias que “soy una chica trav y
me gustan las discos, no me creo ni más ni menos que nadie, hay opciones
para todas y cada quien elige donde quiere ir. Pero acá en todos lados nos
cierran las puertas”.
Las excusan suelen ser: “sólo para clientes”, “es una fiesta privada”,
“está prohibido el ingreso porque hay una comisión que lo decidió así”,
según su compañera Paula: “Nunca tienen la respuesta concreta del porqué y
nadie da la cara”.
El único lugar que permite su ingreso es Imperio, pero una vez adentro “te
roban, te manosean los patovicas, te humillan, es un viva la pepa”. Incluso
les han pedido coimas para ingresar: “Si la entrada sale dos pesos, la
pagás cincuenta”.
“Buscamos divertirnos sanamente y salir de la rutina diaria que para
nosotras no es ejercer la prostitución las 24 horas ni ir a un boliche a
bailar para levantar un hombre y hacer una salida. Queremos despabilarnos,
escuchar música y tomar unos tragos como cualquier joven”, explicó Fernanda
reflejando no sólo la problemática de la discriminación en espacios físicos
de diversión sino también la realidad laboral que las excluye y que las
empuja a el ejercicio de la prostitución muchas veces como única manera de
subsistencia.
Paula agregó que “el trabajo que ejercemos obligadamente es estresante mil
por mil y no tenemos un momento de relax, es como que tenemos que vivir de
la calle a casa pensando en trabajar”. Esto empeora con las inseguridades y
riesgos propios de la noche.
Por último, Fernanda recordó estar tomando mate con una amiga en el Parque
de Mayo y “a los diez minutos cayó una patrulla diciendo que había un
llamado denunciando que dos travestis estaban haciendo disturbios. Es un
lugar público y no se lo puede negar a nadie”.