Reconocido por su constante trabajo a favor de la promoción de los derechos humanos, el fiscal Hugo Omar Cañón presentó la renuncia a su cargo para dedicarse a la actividad política.

“Son los que van a continuar la posta”, dijo el fiscal Federal Hugo
Omar Cañón refiriéndose a los integrantes de su equipo de trabajo mientras
se acomodaban para la conferencia de prensa. Y el motivo fue importante,
pues comunicaba a la sociedad a través de los medios de comunicación de su
decisión de renunciar a su puesto luego de una larga trayectoria al frente
de la Fiscalía en la cual se han logrado resultados importantes respecto a
las causas por violaciones a los derechos humanos durante la última
dictadura.
La decisión de Cañón tiene que ver con su incorporación a la política
de la mano del Encuentro para la Democracia y la Equidad, que lidera el
intendente de Morón Martín Sabbatella
La dimisión fue protocolizada el lunes 6 de abril y se efectivizará a
partir del 1 de mayo, por lo cual hasta esa fecha Cañón seguirá en
funciones. Según anunció, lo reemplazará el dr. Antonio Castaño para luego
llamar a concurso y designar un reemplazante.
En la conferencia, Cañón hizo una reseña de su vida en el ámbito
judicial: “La designación como fiscal salió el 8 abril del 86, juré el 25
de abril de ese año por lo tanto ahora voy a cumplir 23 años en el cargo.
Es toda una carrera, quizás los años no son tantos como otros integrantes
del ámbito jurisdiccional federal, dos tercios de los integrantes tienen
más edad que yo y siguen en función, pero creo que en lo personal tengo
edad suficiente como para dar por cerrado un ciclo. Encarrilado ya como
está todo el curso de acción de la Unidad Fiscal que lleva adelante los
juicios por los crímenes de lesa humanidad”:
Respecto a ese tema, dijo que se ha trabajado con una dedicación
especial estando todo el material informatizado y contándose con la base
documental suficiente para seguir desarrollando esa labor “y además desde
el espacio en el que voy a estar tanto en el Encuentro para la Democracia y
la Equidad de Martín Sabatella, como en la Comisión Provincial por la
Memoria, que seguiré trabajando más intensamente que ahora, seguiremos
aportando pruebas documentales para los distintos juicios de todo el país”.
Además, Cañón resaltó el crecimiento de la Fiscalía ya que al momento
de su asunción no contaban casi con personal ni actividad: “La presencia de
la Fiscalía en Bahía ha sido fuerte. Hemos investigado desde aquellos
ilícitos del sur en el año 88, temas de contaminación ambiental con la
Unidad de Investigaciones Ambientales, de corrupción como fue lo de Pami,
de contaminación como los del cementerio Parque de Paz que más allá de los
resultados por vericuetos judiciales, inactividad e inacción o el
calificativo que queramos ponerles, llevan a que, tal vez, se frustren las
investigaciones. También pasó con el cloroducto de Solvay Indupa, se
difirió eternamente la investigación y nunca se llegó a un resultado
concreto porque es muy difícil también juzgar a los poderosos”.

Juicio a los genocidas
Aclarando que todavía no sabe cuál va a ser su función específica en el
partido y que por ahora va a integrar solamente la mesa nacional, el fiscal
también tuvo opinión respecto a otras cuestiones. En este caso y consultado
sobre el polémico juez Álvarez Canale dijo que “nos ha puesto muchos
obstáculos en la tramitación de las causas. Ha quedado demostrada su
amistad con el comisario Scelsi pese a que la Cámara no nos aceptó la
recusación pero él mismo admitió que iba a la fiesta de cumpleaños. Yo
nunca he ido a la casa de ningún policía ni iré jamás a compartir un asado
con ellos porque no corresponde. Tampoco se aceptó el vínculo que tenía con
Lapeirade -que fue el protector de Corres- y tenían una amistad de larga
data. Lapeirade es un empresario poderosísimo y hubo simulacro de sorpresa
cuando se encontraron y evidentemente se habían visto hacía muy poquito
tiempo”.
Por último, Hugo Cañón se refirió a la requisitoria para la elevación a
juicio de siete represores acusados de delitos de lesa humanidad durante la
última dictadura. Consultado acerca de si va a llevar un largo tiempo hacer
real dicho juicio, opinó: “Esperemos que no. Ahora vendrá la etapa de
conformación del tribunal oral, habrá excusaciones o recusaciones de algún
juez que esté comprometido con aquel periodo de la dictadura o con la
defensa de algunos represores y demás, y ya la Corte tiene decidido y
redistribuidas las causas en Buenos Aires, lo que estaba concentrado en el
Tribunal Oral Federal 5 pasaron a otros tribunales. E incluso hay fondos
disponibles para que venga algún juez del interior, que tienen dos o tres
juicios por año como Catamarca Santiago del Estero y Tierra del Fuego, y
completar los tribunales que hagan falta. En el caso nuestro, en primer
término corresponde a los jueces del Tribunal Oral de La Pampa, o sino de
Mar del Plata por cercanía. ASI que en cualquier caso se reemplazarán con
los jueces que haga falta para completar el tribunal y comenzar el juicio”.