Al cierre del 5°
Congreso Nacional e Internacional de Agrobiotecnología, Propiedad Intelectual y
Políticas Públicas diversas entidades vinculadas al agro de todo el país anunciaron
que formalizarán una denuncia conjunta contra Monsanto por prácticas de abuso
de posición dominante ante la Comisión Nacional de Defensa a la Competencia.

Luego de dos jornadas de intensa discusión, entidades cooperativas,
organizaciones sociales y de profesionales, así como agricultores en
particular, se pronunciaron a favor de aplicar “con rigor las normas de defensa
de la competencia, investigando los abusos monopólicos de las grandes
corporaciones conocidos por las publicaciones de imposiciones a los productores
y adquirentes de semillas, cláusulas que implican prácticas monopólicas”.
La presentación de la denuncia será canalizada ante la Comisión Nacional de Defensa
de la Competencia por la Federación Agraria Argentina, Cooperativas
Agropecuarias Federadas de Entre Ríos, la Federación de Cooperativas Federadas,
la Federación Argentina de Ingeniería Agronómica, la Cámara de Semilleros
Multiplicadores y un grupo de productores representados por el doctor Salvador
Bergel.
En el Congreso realizado los días 28 y 29 de agosto en Paraná, Entre Ríos, hubo
600 participantes de 15 provincias del país, entre productores, profesionales,
investigadores, estudiantes y funcionarios, que marca el carácter
multidisciplinario y multisectorial de la convocatoria que pretendió generar un
ida y vuelta con organismos del estado en materia de generación y gestión de
políticas públicas.
El Ministro entrerriano de Cultura y Comunicación, Pedro Ángel Báez, en nombre
del gobernador Sergio Urribarri, remarcó la importancia de esta discusión sobre
la apropiación y usos de las tecnologías productivas: “El manejo de la biotecnología
y el manejo de la genética se han constituido en elementos centrales que tienen
que ver con las soberanías nacionales, con la soberanía alimentaria, con las
posibilidades de crecimiento y de desarrollo de los estados. Porque sino la
alternativa es quedar a merced de esas compañías monopólicas multinacionales a
las que lejos está de interesarles la economía de nuestro país o las
condiciones de vida de nuestra gente. Les importa solamente aumentar de manera
irracional sus márgenes de rentabilidad”.
Raul Pagnoni, presidente de Cámara Argentina de Semilleros Multiplicadores,
señaló que “desde la cámara, permanentemente hemos planteado que en la nueva
Ley de Semillas debe figurar que la semilla es un bien estratégico nacional
porque da inicio a la producción más importante de la Argentina que es la
agronómica”. En la misma línea, Salvador Bergel, profesor de Bioética de la
Universidad de Buenos Aires, resaltó la participación heterogénea del congreso
y declaró que “si vamos a hacer una reforma debemos plantear sobre qué bases,
sobre qué intereses se va a apoyar esta nueva Ley de Semilla. La Ley de
Semillas no es algo neutro, es algo que expresa intereses sociales, políticos
y, fundamentalmente, económicos”.
A su vez, el referente de la Federación de Cooperativas Federadas, Esteban
Motta, manifestó que “la biotecnología debe ser parte de un proceso de
desarrollo nacional inclusivo y con accesibilidad a los distintos sectores de
la cadena. Los contratos que promueve Monsanto son una herramienta que avanza
en la concentración, no solamente para quedarse con el control de la tecnología
y el desarrollo tecnológico sino también con el control de la comercialización
y del desarrollo del sector agropecuario de la Argentina” y adelantó que un
conjunto de sectores presentarán un recurso ante la Comisión Nacional de
Defensa a la Competencia por condiciones que imponen contratos que constituyen
un abuso de posición dominante.
Como medida complementa a la presentación de la denuncia, se solicitará a la
Comisión que adopte medidas de carácter provisional previstas en el artículo 35
de la ley 25.126 a fin de ordenar el cese de la conducta lesiva durante la
tramitación del procedimiento.