La semana pasada los trabajadores de Oil Tanking Ebitem realizaron un piquete, cansados de la falta de respuesta tras 18 meses de tratativas.
Finalmente, la medida generó soluciones que refieren a una recomposición salarial y al logro de establecer un porcentaje del 1 por ciento, respecto a la antigüedad, por cada año trabajado. Este hecho es histórico e inédito en todo el país.

La semana pasada resultó agitada para el Sindicato del Petróleo, Gas, Biocombustibles de Bahía Blanca, La Pampa y Patagonia Argentina.
Los trabajadores de la empresa Oil Tanking Ebitem, llevaron a cabo una serie de medidas de fuerza que terminaron en piquetes en los portones de la planta. A esta situación se llegó después de largos 18 meses de negociaciones en los cuales no hubo respuestas favorables por parte de la empresa para los trabajadores.
“La historia es un poco larga -explicó a EcoDias Fabio Pierdominici, primer vocal de Comisión Directiva del gremio. Hace 18 meses que empezamos la negociación con Oil Tranking, se trató de llevar adelante la discusión en un convenio local, lamentablemente nunca llegamos a buen puerto, siempre íbamos parchando con actas acuerdos que iban corriendo el arco. La última había sido de noviembre de 2009 donde, además de algunas conquistas que se lograron con los compañeros, había una cláusula que fijaba compromisos de temas que tenían que quedar cerrados para fines de marzo de 2010. Entre ellos, cierre de convenios, adecuación salarial de igual remuneración para igual trabajo, el encuadre de cierto personal que hacía el mantenimiento de obras edilicias. El punto más álgido era la discusión salarial para el periodo 2010”.
El reclamo de recomposición salarial se basaba en un incremento del 15 por ciento, señaló Pierdominici, sin embargo en las reuniones no hubo acuerdos porque las ofertas resultaban irrisorias: “Más todavía cuando había compañeros nuestros que habían recibido beneficio en otros acuerdos, pero teníamos algunos que hacía 18 meses que no recibían ningún tipo de aumento de sueldo, la inflación le estaba comiendo todo el salario. Fuimos a asamblea y decidimos un paro por tiempo indeterminado. Ellos pidieron una luz de 48 horas para arrimar una propuesta seria y formal, la propuesta estuvo hablada pero no había llegado el escrito que se habían comprometido a hacer por lo cual empezamos con cortes en los portones y ahí no se dejó entrar ni salir a nadie”.
Esa presión fue fundamental para alcanzar algunos de los objetivos planteados. Finalmente, la empresa realizó una propuesta que fue considerada y luego aceptada por los trabajadores: “Eso empezó el miércoles a las 14 y para el jueves a la madrugada terminamos poniéndonos de acuerdo en los puntos más importantes. En salarios arreglamos 500 pesos de suma fija a pagar en dos veces -250 con el sueldo de abril y 250 con el de mayo-, el 10 por ciento de aumento sobre los básicos, la nivelación de salarios en la sección de mantenimiento -porque oficiales de dos empresas contratistas ganaban menos y se niveló todo a los que más ganaban. Y el encuadramiento de cuatro compañeros de otra empresa que hasta ahora no estaban encuadrados bajo convenio petrolero”.

La mayor conquista
El punto más sobresaliente que se acordó fue el referido a lo que se abona por antigüedad a cada trabajador. El convenio marco, según Pierdominici, fijaba 18 pesos y centavos por año de antigüedad. Ahora, se logra un acuerdo inédito a nivel país, que quizás motorice acuerdos en otras regiones a partir de lo obtenido en Bahía Blanca ya que sienta precedentes: “Es la primera planta de petróleo que tiene esta modificación del adicional por antigüedad. Ahora, para el personal de Oil Tranking, va a ser del 1 por ciento por año de antigüedad. Para nosotros es un avance grandísimo, calculemos que una persona de los más antiguos que tiene 17 años representa un 17 por ciento en su salario. Y deja un antecedente para discutirlo a nivel nacional. En lo económico es histórica esa modificación de la antigüedad, es algo que se había perdido en todas las empresas”.
Alrededor de 44 trabajadores fueron los que participaron de las medidas de fuerza y cuyo apoyo fue fundamental para llegar a una solución favorable: “Esto es un paréntesis, al igual que en el acta que firmamos en noviembre, dejamos una cláusula gatillo donde queda el compromiso de la empresa de cerrar los temas pendientes. Los más importantes para nosotros serían el cierre definitivo del convenio regional, la incorporación de trabajadores de otra empresa contratista con más de 14 años de presencia dentro de la empresa y la jornada completa para un grupo de trabajadores que está part time”.
Por otro lado, de aquí en más resta esperar el convenio nacional que se encuentra en una etapa difícil por lo cual no se descarta la presencia de nuevos conflictos: “La Cámara de la Industria hace ofertas insuficientes que no satisfacen a ningún sindicato de base por lo cual lo más probable es que los primeros días de mayo estemos en un conflicto a nivel nacional. Remediado ese conflicto la idea es sentarnos en la mesa de negociación con Oill Tranking y tratar de ir avanzando en base al diálogo sin necesidad de entrar en conflicto”.