El servicio cuenta con 22 unidades disponibles pero cada vez que se producen picos de sobrecarga asistencial, los profesionales se ven obligados a derivar pacientes. Existe un proyecto de ampliar el área pero hasta ahora: nada de nada.

“Antes está la Terminal, antes está el Polideportivo… un país que no atiende las necesidades demandadas por lo materno infantil está como está”. El dueño de la frase es Carlos Deguer, jefe de Sala de Neonatología del Hospital Penna de nuestra ciudad, y razón no le falta al ver cual es la realidad de este servicio tan importante que se brinda en el nosocomio. Y es el mismo Deguer el que dice que es difícil contestar como funciona el área debido a lo complicado que resulta que todo marche de manera correcta: “porque en este momento estamos con uno de los picos de sobrecarga asistencial que se dan cada dos meses y nuestro servicio es muy pequeño por lo tanto no alcanza a satisfacer la demanda de internaciones de recién nacidos enfermos”.
El problema no es nuevo, viene de años y en el Ministerio de Salud de la provincia de Buenos Aires, del cual depende el Penna, lo saben. Incluso existe un proyecto de realizar un nuevo servicio de neonatología: “sabemos que hay o hubo una licitación o que se está por hacer y que los dineros provienen de un crédito del banco BID”. A pesar de esto todavía no hay noticias concretas para esta rama de la salud, y en el medio, diría Deguer, la terminal y el polideportivo.

La sobrecarga
“Estamos hablando de que tenemos que derivar los chicos que no podemos atender. Esto tiene un índice sanitario de capacidad ocupacional, ese índice está sobrepasado y cada tanto existen picos en donde tenemos que derivar a otros hospitales de la zona o privados, la demanda que tenemos”.
El área de neonatología cuenta con una capacidad de 22 unidades mientras que el proyecto del nuevo servicio sería de 36.
Un dato para entender la delicada situación es el caudal anual de 2400 partos que tiene el hospital de los cuales habitualmente se interna el 19% de los casos y a lo que se debe sumar otro dato que tiene que ver con la cantidad de embarazos derivados de la zona por no poder ser atendidos y que llegan al Penna en busca de asistencia: “Esto provoca que todos corramos muchas veces tratando de brindarle asistencia a un neonato sin los elementos y teniendo que hacer derivaciones a otros hospitales de manera que puedan brindar la asistencia que se necesita”.
Aclara Deguer que no se convive constantemente con este conflicto sino cuando se producen esos picos cada dos meses. Pero sin ir más lejos, el segundo fin de semana de marzo fue testigo de esta situación de servicio saturado: “Es un servicio pequeño y como tal tiene ocho unidades de terapia intensiva, cuando eso se supera no tenemos forma de dar respuesta”.

Qué queda por hacer
“Esto viene de entre diez y quince años y el proyecto nuevo ya tiene muchos años, para este servicio se ha hecho un amparo judicial porque no alcanzaba a dar respuesta a las demandas de atención de los neonatos. Ese amparo fue denegado, más cosas no podemos hacer para pelear para que nos den respuestas al respecto”.
”Es necesario que haya una neonatología más grande, es una pelea que ha tenido siempre el jefe de servicios y que sigo teniendo yo como jefe de salas”.
Aún con este panorama los profesionales de neonatología hacen todo lo que está a su alcance para que cada paciente reciba la atención digna aunque en realidad la solución está en otras manos.

Entre finitos e infinitos
Existe otro problema en esta área aunque también es cierto que se sufren en otros ámbitos de la salud y tiene que ver con la falta de un profesional para los días domingo. Según Deguer esto se debe a la carencia de neonatólogos, ya que hay pocos, a los bajos sueldos de la provincia respecto al sector público y al tiempo en que se tarda en el nombramiento de cargos:” El fin de semana están los médicos de guardia pero no completos, hay dos pero el domingo se requieren tres. El domingo es un día en que no hay gente que venga a trabajar, somos como todo el mundo, descansamos por lo tanto ese domingo tiene que estar reforzada la guardia. Habitualmente había tres y ahora hay dos, y no logro conseguir un neonatólogo debido a las causas mencionadas”.
En neonatología trabajan alrededor de 27 enfermeras, 18 médicos más los residentes y más los servicios de apoyo a los cuales hay que sumar a los rotantes. La cantidad es mucha aunque nunca es el ideal de un gran funcionamiento: “Las demandas son infinitas y los presupuestos son finitos El ideal es una enfermera cada dos pacientes en terapia y hay una cada cuatro por ejemplo, eso forma parte del presupuesto de la Provincia y a eso tenemos que atenernos”.