El jueves 5 de julio comenzó en la Capital Federal un paro de los trabajadores distribuidores de productos de Cervecería Quilmes, en reclamo del pago de salarios y del aguinaldo. Como no se logró llegar a un acuerdo entre las partes, la medida de fuerza empezó a generalizarse hasta alcanzar a los 500 trabajadores de la industria de aguas gaseosas de nuestra región reunidos en SUTIAGA.
“En solidaridad con los compañeros de la dadora de trabajo que es Quilmes central se decidió parar todas las cerveceras y los concesionarios del país. En Bahía tenemos Puerta de Sur, otra empresa de Olavarría y algunas más en la zona que están todas paradas desde la hora cero”, relató a EcoDias el secretario general Marcelo Colombo el miércoles 11.
A su vez aclaró que se trató de “un paro interno: entramos directamente, nos juntamos con los trabajadores, les explicamos cuál era la situación, que estamos siendo solidarios con los compañeros de Buenos Aires como por ahí mañana ellos pueden serlo con nosotros. Eso es lo bueno de los gremios: la solidaridad entre los trabajadores”.
“La compañía aduce que los distribuidores no pagan, que es otro tipo de conflictos, que es para conseguir un porcentaje mayor en las ganancias para hacer frente a los salarios… tal vez pueda ser algo de eso, pero nosotros hoy por hoy estamos parando para que a esos trabajadores se les cumpla con los salarios, son 4.000 afectados posiblemente, y como es de público conocimiento si se agrava más el conflicto, puede ser que la medida de fuerza se extienda a otras empresas como Coca Cola o distribuidoras de agua y jugos”, agregó Colombo.
Mientras las distribuidoras de los productos de la cervecería Quilmes, hoy en manos brasileras y belgas, adeudan a los trabajadores porteños “el 30% de los sueldos y los aguinaldos”, según el secretario del Sutiaga local “en Bahía estamos negociando un aumento de sueldo y el planteo del mismo concesionario es que no le dan las ganancias para poder aumentarlos, pero eso ya es un problema interno entre los concesionarios y las cerveceras de aumentar su porcentaje”.
“En la rama de las bebidas se consiguió un incremento muy importante, o sea que ahora nos falta ver la parte de los distribuidores. Estábamos sacando cuentas: hemos crecido desde 2001 a mayo de 2007, un 356% en los salarios y ahora cerramos un 19% más”, informó Colombo.