Después de largas reuniones con paro incluido el gremio logró un aumento del 18,5% y un piso salarial de 2500 pesos.

En el Sindicato del Personal de Industrias Químicas y Petroquímicas volvió la calma ya que después de varias y tensas reuniones se logró llegar a un acuerdo con las empresas del Polo Petroquímico.
“Se arregló con las empresas principales del Polo y también se firmó un acta compromiso para que garanticen los acuerdos salariales del resto de las contratistas”, le informó a EcoDias el secretario general del gremio, Julio Leguizamón.
Habiendo cedido en algunas cuestiones, como en toda negociación, los dirigentes gremiales se retiraron conformes de la última reunión celebrada en el Ministerio de Trabajo luego de que, a través de la intervención ministerial, se firmara el nuevo acuerdo. Éste incluye un aumento salarial del 18,5% más un 3% de incremento para los meses de verano: “Además, si hay alguna variación económica nos sentaremos antes a discutir la cuestión. También se garantizó el piso de 2500 pesos de bolsillo para el trabajador que menos gana”.
Si bien originalmente se reclamaba un aumento del 25% además de ese piso salarial mencionado, Leguizamón rescató lo obtenido más allá de resignar números en cuanto al aumento: “En el caso del aumento general llegamos al 18,5% y en el caso del piso pudimos llegar a esos 2.500 pesos que pedíamos. Nosotros tenemos gente que ganaba por parte de las contratistas muy poco, 1.700 pesos por ejemplo, entonces al llevarlo a 2.500 ya estamos hablando de aumentos importantes. Tuvimos que resignar algo para poder conseguir eso, hablamos de aumentos del 35 y 40%. El aumento general fue aceptado más allá de que no se llegó a todo lo que queríamos, porque se alcanzaron muchos objetivos especialmente los del piso salarial”.

Denuncias
El conflicto salarial del gremio y las empresas derivó semanas atrás en un paro de los trabajadores. A partir de ese paro, hubo denuncias por parte de algunas empresas acerca de diversos incidentes y robos que se habrían producido durante la medida de fuerza. Consultado al respecto, Leguizamón dijo que ese tema fue tratado en la última reunión: “Las empresas hicieron saber que sus estudios de abogados que están en Buenos Aires se están encargando de eso y nosotros dijimos que no hay problemas. Para nosotros el conflicto terminó, si ellos no lo cierran entonces dejarán el conflicto abierto pero no es la intención nuestra. Nosotros seguimos con la misma postura, creo que hicimos lo correcto dentro de un paro muy pacífico y normal. Pasa que las empresas jamás tuvieron un paro de esta naturaleza y no sabían cómo reaccionar. Creo que es la falta de costumbre de las empresas frente a un paro así, y el poder económico que a ellos les garantiza tener los mejores estudios de abogados para hacer lo que se les da la gana y muchos medios de prensa que colaboraron en desvirtuar el conflicto”.