La Agrupación H.I.J.O.S convocó a una jornada conmemorativa, la cita fue en el Centro Histórico Cultural, en Rondeau 29, con una invitación especial a las y los jóvenes de las Escuelas Normal Superior y la de Agricultura y Ganadería, para que compartan las producciones realizadas este año durante el taller Jóvenes y Memoria.

Con una sala llena, se inició la tarde con la participación de Cristina Zuñiga, que recitó un monólogo que se llama El pañuelo, de Carlos Alsina. Después tuvo lugar la presentación del coro Canto Colectivo, y finalizó con las producciones juveniles. “El eje principal es la perspectiva de Derechos Humanos, incentivamos a que elijan temas para investigar que ayuden a ver cómo lograr un mundo más justo, algo que se pueda cambiar”, sostuvo el coordinador del grupo Jóvenes y Memoria de la Biblioteca del Consejo de Enseñanza Media y Superior de la Universidad Nacional del Sur, Pablo Iglesias.

La Escuela de Agricultura y Ganadería tituló su trabajo: Bahía Blanca, zona de sacrificios, eligió el eje temático del derecho a un ambiente digno y preparó un video sobre la fuga de gases y el impacto ambiental del polo petroquímico. Este grupo estuvo acompañado por la bibliotecaria, Paola Santiñan.

La segunda y tercera producción fue del mismo taller de Jóvenes y Memoria de la Escuela Normal que se llamó ¿Por quiénes caminamos? Se consultó a la ciudadanía bahiense si sabían quienes fueron Roca, Colón, esos nombres de calles por las que se transita diariamente. Las producciones finales fueron dos: una instalación y un video. Ambos proyectos fueron coordinados por la profesora de Historia, Luciana Pasquaré.

La cuarta en el orden de presentación durante el evento fue una obra de teatro llamada La cultura de las macetas, que se centró en el derecho a los lugares de esparcimiento, en particular la Estación Noroeste que hace 25 años es mantenido por vecinos y vecinas. Existe la posibilidad de privatización por parte del club Olimpo y sienten una falta de compromiso por parte del Municipio para respetar ese espacio y declararlo un bien público. La obra culminó con la presentación en vivo del Centro Murga Vía Libre. Este fue un segundo grupo de la Escuela Normal que trabajó con la coordinación de Pablo Iglesias.

Además se contó con el acompañamiento de docentes jubiladas que continúan siendo parte del proyecto como Alejandra Barna, Alexandra Continanzia, Cristina Sanueza, Patricia Bárcena, Miriam Wagner y Carolina Goldman.

Impulso

La Comisión Provincial de la Memoria de Buenos Aires abrió en 2002 el Programa Jóvenes y Memoria. La convocatoria se realizó para las escuelas interesadas en presentar una investigación sobre el eje Derechos Humanos, dictadura y democracia en sus propias localidades.

En las primeras ediciones fueron alrededor de 25 escuelas, con una asistencia total de 500 personas entre jóvenes, coordinadores y equipos docentes. En 2022, participaron 18 mil jóvenes, más docentes, y las temáticas tratadas fueron muy actuales. La conclusión del proyecto se hizo de manera presencial en Chapadmalal, como en las anteriores ediciones. Las y los participantes viajaron para presentar sus producciones junto a adolescentes de toda la provincia.

La Escuela Normal Superior empezó a participar en el año 2004 y en el 2012 incluyó el taller Jóvenes y Memoria en el diseño curricular. “En todo el proceso son les jóvenes que intervienen directamente, les coordinadores apuntamos a que adquieran herramientas o competencias con el trabajo de investigación o ver los formatos de entrevistas, pero la dinámica es llevada adelante por ellos”, remarcó una de las primeras coordinadoras y actualmente colaboradora, Alejandra Barna. Hace seis años que la propuesta fue asumida también desde la biblioteca institucional para difundir y acompañar a las escuelas de su dependencia.

DINÁMICAS
“El objetivo es darle visibilidad y difusión a una realidad en un espacio que participan jóvenes de toda la provincia, donde se ve la diversidad de problemáticas”, explicó Iglesias respecto a cómo se realiza la convocatoria de las escuelas.“Sin dudas, desde la primera etapa de la investigación, se da que muchos descubren cosas que no conocían de su propia ciudad”, añadió.
Luego de elegir la temática, hacer la investigación, eligen cómo quieren transmitir la información obtenida. En los inicios fue mayoritariamente audiovisual, actualmente se eligen también otros lenguajes artísticos como obras de teatro, instalaciones o murales.

Autor: Redacción Ecodías