Desde hace varios años el instituto técnico La Piedad trabaja en la educación con perspectiva ecológica, intentando que este tema sea cada vez más central en la formación profesional.

Hace dos años armaron el eco galpón, un espacio de 5×12 mts. Está destinada al acopio de residuos, con la intención educativa de incentivar en el colegio y los hogares de cada alumno y alumna la cultura de la separación de residuos en origen. De esta forma, se busca la puesta en valor de residuos, tratar de llevar el cuidado del medio ambiente en cada uno de los ámbitos de la vida cotidiana. Además, en el plano de la formación académica profesional, el alumnado en un futuro llevará adelante un oficio o será personal técnico de una empresa, por lo tanto, la creación de estos hábitos pueden incorporarse a las actividades laborales.

El director de La Piedad, Diego Fonseca, comentó que cada año realizan una planificación distinta pensando en cómo llevar adelante las temáticas. A través de esta agenda verde, con eventos y certámenes, este año establecieron que entre el Día Mundial del Reciclado, el 17 de mayo, al Día del Medio Ambiente, el 5 de junio, se dispusiera la inauguración del eco galpón y la realización de tres semanas de reciclaje. Las y los estudiantes recopilaron el material en sus casas. Como resultado juntaron dos contenedores de residuos, separaron 1.200 kilos, con un valor de $30 mil.

La actividad la llevó adelante un grupo juvenil ecológico, que abrió el eco galpón por las mañanas y las noches, recibió y diferenció los residuos para llevarlos al depósito final. Al poner en valor los materiales, el dinero recaudado fue destinado a dos proyectos, uno de ayuda social, la compra de bolsones de comida para familias que lo requerían, y la otra mitad, será invertida en refacciones en el establecimiento, en especial el acondicionamiento de los juegos del patio.

Más iniciativas

En continua labor para reducir la huella ecológica, hace algunas semanas atrás trabajaron en la concientización sobre la separación de residuos y el uso correcto de los cestos destinados a esta función. Es posible depositar de manera diferenciada el papel, los plásticos, el aluminio y residuos orgánicos dentro del establecimiento. También cuentan con una compostera comunitaria. “La mitad de los residuos que generamos los humanos son orgánicos, entonces lo que tratamos de hacer es disminuir el impacto ambiental separando lo orgánico, junto con el trabajo de lombricultura”, explicó el director.

Equipos docentes, directivos y el alumnado en su conjunto se involucran en la reconfiguración de la agenda verde. Los proyectos realizados dan cuenta de los y las jóvenes en la tarea, y sobre todo, en la concientización del cuidado del medio ambiente dentro de la escuela y sus hogares.

Autor: Redacción Ecodías