A la espera de la gran marcha hacia el ministerio de educación
nacional se realizaron abrazos simbólicos a las universidades públicas y una campaña
en redes que se viralizó.

En 57 universidades
públicas en Argentina las clases no comenzaron al regreso de las vacaciones
de invierno. La razón: en la paritaria docente, el Gobierno
ofreció un aumento del 15%, con una inflación que ya ronda el 20% en 7 meses. Se
suma que el presupuesto desde el Ministerio de Educación
para algunas de las universidades no llega ni para pagar los gastos y salarios.
Este es el marco que sostiene estas semanas en que se mantiene como medida de fuerza
el cese de actividades.
Se realizaron abrazos simbólicos, en diversos espacios de
las universidades y para el 30 de agosto se organiza la marcha «en
defensa de la universidad pública», que en CABA se convoca por la tarde desde
el Congreso hasta el Ministerio de Educación.
Una fuerte campaña se viralizó por redes sociales en repudio de la situación con
hashtagcomo #LaEducaciónNoSeVendeSeDefiende y #UniversidadesEnPeligro.
“Seguí la cadena, rompé el cerco mediático”, es la consigna para que estudiantes
y personas graduadas comparten en un breve texto dónde y qué carrera estudiaron.
El fin es lograr visibilizar el reclamo que está fuera de la agenda de los medios
hegemónicos de comunicación.
Como en el resto del país las y los trabajadores
y estudiantes de la Universidad Nacional del Sur hicieron visible este conflicto.
A pesar de la fría mañana se concentraron en Avenida Colón 80, sede del Rectorado
de la UNS, y reclamaron el aumento en los salarios y denunciaron la implementación
del ajuste también en el presupuesto que le corresponde a la educación superior.
Entre los discursos que se escucharon estuvieron los de Aduns; Graciela Ovejero
de Atuns; también tomó la palabra el Secretario General de Cultura y Extensión Universitaria,
Claudio Carucci, entre otros.
Varias autoridades de diversos departamentos de la casa de estudios como también
docentes y estudiantes no solamente de la UNS sino de otros espacios educativos
locales acompañaron el abrazo.
“Necesitamos visibilizar ante la sociedad nuestro reclamo. Celebro la presencia
de autoridades, porque se reconocen trabajadores universitarios que circunstancialmente
tienen cargos de gestión”, dijo Graciela Ovejero.
Por su parte Claudio Carucci mencionó que es él la primera generación de estudiante
universitario de una familia “tenemos que abrazar a la universidad no sólo contra
el ahogo presupuestario, sino también del discurso de los medios de comunicación
hegemónicos que tratan de deslegitimar el rol social y político de la universidad
pública y tratan de empujarla a la mercantilización. Tenemos que poner la universidad
pública en la agenda del gobierno, porque claramente está en la agenda social”.

Solo
para poner un ejemplo en la ciudad de Córdoba cerca de cien mil personas marcharon
en defensa de la universidad pública bajo la frase “La Universidad está en peligro”.
Allí las propias autoridades de la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), representantes
de gremios docentes, no docentes y el estudiantado consensuaron la acción conjunta
en defensa de la universidad pública y del salario.
La gigantesca columna partió desde la Ciudad Universitaria para llegar a San Juan
e Hipólito Yrigoyen donde se montó un escenario.
Nada fue publicado por los grandes medios nacionales.