Recientemente se conformó la Asociación Guías y Amigos de la Reserva Natural Monte Hermoso – Pehuen-Có. Se intenta agrupar la mayor cantidad de gente en pos de contribuir a preservar la reserva provincial.

Responsabilidad para trabajar: en ese concepto se resume la idea de un grupo de guías que se unieron para que la Reserva Natural Monte Hermoso – Pehuen-Có tenga un cuidado más importante del actual, un trabajo organizado y programático. Más allá de lo actuado hasta el presente, se pretende cumplir con creces con el objetivo de preservar este espacio, y superar el bajo número de participantes en lo que respecta a la tarea y poder actuar con protagonismo para llegar con un mensaje concientizador a las personas que habitan y visitan Monte Hermoso y Pehuen-Có.
Los “guías” son varones y mujeres que se especializaron en el cuidado de lo que es una reserva y que, en este caso, podrán trabajar de manera conjunta con los guardaparques del lugar.
Los que vivimos en núcleos urbanos, tal vez conocemos únicamente ciertos sectores de Pehuen-Có y Monte Hermoso, la zona de playas por ejemplo. Y quizás no le damos el valor que se merece al patrimonio que resguarda esta reserva provincial.
La puesta en valor, esa transmisión de conocimientos, es la que busca este grupo de personas que constituyó la “Asociación Guías y Amigos de la Reserva Natural Monte Hermoso – Pehuen-Có”. Del grupo forman parte jóvenes con el único fin de colaborar en la tarea. Una de ellas, Paola Barraza, señaló en entrevista con EcoDias que “la asociación se logra formar en base a la necesidad nuestra como grupo de guías de la reserva para proteger el patrimonio que resguarda esta reserva natural. Colaboramos como agentes civiles y apoyamos todas las necesidades de lo que es esta reserva. Como guías vimos justamente una responsabilidad de trabajar y reunir fuerzas para lograr justamente todos nuestros objetivos y proteger este patrimonio paleontológico, arqueológico, natural que tiene la reserva”.

Apoyar la causa
Los guías y amigos son alrededor de 40 personas y como institución ya tienen en claro cuáles son sus objetivos y modalidades de trabajo. Una de éstas consiste en el trabajo en conjunto por la misma causa: “Trabajar y protegerla junto a los guardaparques, geólogos, el Museo Darwin, es decir entes y personas que están trabajando en el lugar”.
El trabajo de los guardaparques es muy importante para la reserva, aunque sea un grupo reducido en número. “Imaginen que ellos están trabajando allá con cierto apoyo de los otros guías de Monte Hermoso, pero los vimos muy solos. La temporada de verano es muy difícil y más con un solo guardaparques tratando de explicarle ciertas cuestiones a la gente. Vimos que ahí hacía falta ayuda, y así surgió la idea de juntarnos”, dice Paola y amplía la posibilidad de acercarse a la asociación “para poder conocer nuestras actividades e invitarlos a que se asocien a nuestro lugar para poder trabajar en lo que son las tareas de la reserva”.

Programando el verano
El pasado 21 de septiembre, en los festejos por el Día de la Primavera, en la vecina ciudad de Punta Alta, la asociación dio sus primeros pasos en la práctica de su labor: “Estuvimos con nuestras áreas de difusión, mostrándole a la gente quiénes somos, cómo nos formamos. Trabajamos mucho también con los niños con los que pudimos lograr actividades interpretativas, que es uno de los objetivos al igual que la difusión y el hecho de concientizar”.
Los guías, que son de Bahía Blanca, Punta Alta, Pehuen-Có, Monte Hermoso, Sierra de la Ventana, entre otras localidades, coinciden en la idea de trabajar con los más chicos por el compromiso que asumen vitalmente y por el efecto multiplicador del mensaje: “Ellos son la semillita que a nosotros nos ayuda para que después a los grandes, con quienes la tarea es un poco más difícil, se le pueda trasladar la información”. Y adelanta Barraza que “ciertas actividades van a llevarse a cabo en la playa, en el área de la reserva para lo que es la concientización del lugar”.
Esa primera experiencia de la primavera sirvió para empezar a programar las actividades del verano que, debido al importante número de turistas, prevén será tensa: “El mensaje que damos siempre es que cuidando nuestro ambiente vamos a poder preservarlo para un futuro, para las futuras generaciones. Hay varios mensajes, ese es el principal: el poder cuidar el patrimonio actual, el que tenemos, que es del pasado para mantenerlo hacia el futuro”.

Rico patrimonio
También dijo Laura Barraza: “La reserva natural es provincial, que resguarda lo que es el patrimonio paleontológico, arqueológico y natural de la zona. Ahí podemos encontrar desde el ambiente de la playa, costa, medanos y pastizal que es lo que también se preserva hasta las huellas o pisadas de animales y de humanos. Es una reserva muy rica en la mayoría de esos ambientes”.
De allí que el trabajo de guías, guardaparques e instituciones sea destacado y necesite ser fortalecido para poder llegar a la gente y que, desde su lugar, colabore, lo cual no siempre es fácil: “Una de las cosas que explicamos es que no se debe pasar con el vehículo por las zonas donde tenemos las huellas porque se degradan. Hay gente que lo entiende y gente que no, y eso pasa con muchas otras cosas también”.