Salud Ambiental en Acción es una ONG bahiense que trata la contaminación y las consecuencias de su impacto en el medio ambiente y la salud de quienes la habitamos. Se constituyeron como tal en el año 2014, pero comenzaron trabajando en la temática un año antes como vecinos y vecinas autoconvocadas.

Se crea a partir de la contaminación electromagnética. En comunicación con una de sus integrantes, Gladys Girotti comentó que como grupo apoyan distintas movidas medioambientales de la ciudad, y aclaró que les preocupa la contaminación producida por elementos inalámbricos, antenas y celulares. “Hay muy pocas ONGs en el país que se dedican a esta contaminación”.

El fin principal sería poder reducir el impacto que genera todo lo que tiene ver con lo electromagnético. Girotti añadió que en la Argentina no existe una legislación que sea protectora de lo que significan los campos electromagnéticos, sino que se basan en la resolución Nº 202 del año 1995, que se basa en estudios que se realizaron entre 1970 y 1980 determinando un límite de potencia de emisión que es cien o mil veces por encima de lo que tienen otros países de Europa. “Marca un límite de su uso pero es tan excesivo que no protege a absolutamente a nadie”, sostuvo.

“Empezamos a trabajar porque veíamos que había una multiplicación sin ningún tipo de precaución de las antenas de telefonía celular. También nos dedicamos a hacer educación del uso de los elementos inalámbricos. La tecnología es fabulosa pero nos han brindado el avance tecnológico sin educarnos en cómo usarlo”, explicó Girotti.

Hacia un correcto uso

La contaminación electromagnética afecta el medio ambiente, impacta negativamente en la biodiversidad, como en los procesos de crecimiento de las plantas, las aves migratorias y las abejas que se guían en su locomoción por campos electromagnéticos, también sus consecuencias afectan al cuerpo humano.

Algunas de las recomendaciones apuntan a no tener el celular en la mano mientras se habla por celular, sino dejarlo apoyado sobre la mesa, apagar o poner el celular en modo avión de noche o desconectar el wifi. “Está comprobado, en el año 2011 la OMS determinó los campos electromagnéticos dentro del grupo 2B que son posibles cancerígenos humanos”, cerró Girotti. La notebook si se usa conectada cargándose emite mucha mayor potencia que si se usa desenchufada, nunca se debe disponer la computadora sobre la falda, tiene que estar sobre un escritorio para disminuir la radiación que ingresa al cuerpo. No debe estar apoyado en la cabeza y se recomienda no dormir con el celular conectado cerca de la persona ni llevarlo constantemente contra el cuerpo.

Autor: Redacción Ecodías