El
intendente Cristian Breitenstein presentó el programa piloto para que en Bahía
Blanca se comience con la separación de residuos en origen de manera
sistemática. Estuvo acompañado del otra vez subsecretario de Gestión Ambiental,
Eduardo Conghos, y de Hersen Porta, director de operaciones del complejo Dow
Bahía Blanca.

Finalmente y tras algunos años de promesas que venían quedando truncas,
pareciera que Bahía Blanca se dispone a comenzar con una deuda pendiente
respecto al cuidado del medioambiente, como es la separación de residuos en
origen. Al respecto, fue presentado en el Salón Blanco Municipal el programa piloto
de Gestión Integral de Residuos Sólidos Urbanos.
Dicho programa, del que en épocas anteriores habló en estas páginas Sergio
Montero, ex titular del área ambiental de la comuna, fue anunciado por el
intendente Cristian Breitenstein quien estuvo acompañado por Eduardo Conghos,
quien nuevamente se hizo cargo de la Subsecretaría de Gestión Ambiental, y de
Hersen Porta, representante del complejo Dow Bahía Blanca. Además de miembros
del gabinete municipal, y concejales de distintos partidos, estuvieron presentes
diferentes instituciones y alumnos y alumnas de escuelas de la ciudad.
Este programa de separación de residuos tiene como objetivos reutilizar y/o
reciclar residuos sólidos urbanos, prolongar la vida útil del relleno sanitario
y potenciar el funcionamiento del emprendimiento municipal – cooperativo de la
Ecoplanta. La gestión de residuos tiene como meta dar un destino y un
tratamiento adecuado, de manera económica y técnicamente factible,
ambientalmente sustentable y socialmente aceptable.
El proceso a implementarse comprende etapas como la generación, disposición
para recolección (diferenciada), recolección (diferenciada), transporte,
tratamiento y disposición final. Con esos fines se utilizarán tanto el Relleno
Sanitario como la Ecoplanta de General Daniel Cerri, así como también lograr
una mayor concientización en la población respecto a la separación en origen a
través de jornadas de capacitación en instituciones y escuelas, distribución de
imanes explicativos y charlas informativas a la comunidad y a alumnos y
alumnas.
La actividad se fortalecerá en Cerri y Cabildo y comenzará a implementarse en
Ingeniero White y los barrios 26 de Septiembre, Saladero, Boulevard, Kilómetro
5, Pacífico, Villa Libre Sur, Villa Soldati, Villa Loreto, Villa Nueva y Barrio
Obrero.
En la presentación, el intendente saludó al alumnado presente en el Salón
Blanco y señaló que en ellos se pone la principal esperanza debido a que “van a
ser, junto con los jóvenes, con las mujeres, seguramente con muchos actores
principales de la sociedad, los que nos ayuden a evangelizar (SIC) en materia
medioambiental, en un cambio de hábito, en un cambio cultural, en un cambio
educativo que sin lugar a dudas es uno de los principales desafíos que asume la
ciudad de Bahía Blanca, ni siquiera digo esta gestión, digo la ciudad en su
conjunto”:
Breitenstein habló de políticas públicas para solucionar problemáticas como la
de los residuos pero que siempre deben ir acompañadas por un sentido estricto
educativo. A la vez afirmó: “Sin lugar a dudas creo que dimos los pasos que
correspondían, el año pasado estábamos yendo por carriles parecidos pero
paralelos en el caso concreto de Dow que había generado un panel, un espacio
participativo muy interesante para precisamente plantear este objetivo y plantearnos
este objetivo a nosotros. Nosotros ya veníamos trabajando como entidad pública
en la necesidad de avanzar en la separación en origen de los residuos
domiciliarios. Y veníamos, la verdad, recogiendo los antecedentes y las
experiencias de muchas instituciones que están aquí presentes”.
Al respecto, nombró la campaña Ecocanje y la de recolección de residuos
informáticos “y que realmente han tenido multitud de personas que
voluntariamente iban a llevar su desecho, su residuo.
Tenemos la experiencia de una política de Estado que ha instalado y ha generado
una gestión anterior que sin lugar a dudas ha sido positiva como es la
Ecoplanta, que ha sido rescatada, profundizada, y que pretende consolidarse”.

Trabajo con recolectores informales
Luego de citar ejemplos de otros países en donde se llevan a cabo procesos
de este tipo, el intendente señaló que para lograr éxito en el programa se
deben fortalecer los lazos sociales, solidarios y mancomunados. Todo un trabajo
integral que incluye a todos los actores sociales cada uno definido con un rol.
En la faceta social, Breitenstein mencionó a los recolectores informales: “Me
parece que aquí hay una faceta, por eso hablé de ciudad sustentable, que tiene
que ver también con la faceta social, que es la de los cartoneros que genera
siempre matices encontrados. Para algunos, ven solamente la problemática del
orden del tránsito, una faceta que sin lugar a dudas es real pero que desde una
perspectiva de la sensibilidad social, no es la única. Aquí hay sectores que
han sido marginados de la cuestión de la inclusión laboral y que han articulado
mecanismos de supervivencia como muchos argentinos”.
A esos mecanismos, dijo, hay que darles capacidad de organización, generarles
nichos de mercado y posibilitar que se asocien “y que de alguna manera
comiencen a entender que tienen que depender de sí mismos en forma organizada,
hay que tenderles una mano. Esto tiende también a fortalecer las cooperativas
existentes de cartoneros que ojalá se multipliquen para que asociadamente avancen
en esta separación, en esta comercialización, en esta tarea que va a implicar
también que se sientan de alguna manera incluidos no solamente en un programa
sino en una ciudad. Por eso hablamos del equilibrio ambiental, del equilibrio
social y de la necesidad de seguir realizando inversiones y un crecimiento
económico que sea armónico y equitativo para todos. Pero lo que está en juego
aquí es básicamente el desafío colectivo de pensar que podemos hacer una ciudad
distinta”.
Finalmente, el intendente volvió a llamar a la concientización y toma de
responsabilidad por parte de todos respecto a la limpieza de Bahía Blanca y de
lo que tiene que ver con el tratamiento de residuos. Breitenstein opinó que no
estamos genéticamente mal predispuestos ni condicionados, “simplemente implica
hacer un cambio en el click del disquete mental para decir podemos hacerlo y
juntos, además, podemos hacerlo mejor”. Después de seis años en la intendencia,
los anuncios no han sido pocos; se verá si esta vez las palabras se traducen en
obras concretas.