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Malos aromas
Categoría: Ecología

El sábado 19 se apagó una antorcha de seguridad de la planta de Petrobras. El hecho trajo como consecuencia el escape de gases que provocaron fuertes olores e irritación en la población cercana.

Esta vez los incidentes en Petrobras trajeron preocupación desde varios sectores. Tanto el Comité Técnico Ejecutivo como el área de Gestión Ambiental del Municipio, no minimizaron el hecho sino que han manifestado en algunos medios de comunicación que no se ha tratado de un problema menor, por no hablar de una gravedad importante.
A su vez, ediles de diferentes bloques del Concejo Deliberante han pedido informes al Departamento Ejecutivo acerca de lo ocurrido en Petrobras, al tiempo de requerir la presencia de Fernando Rey Saravia, titular del CTE, y Sergio Montero, subsecretario de Gestión Ambiental, para dar las explicaciones del hecho.
El incidente arrancó luego de las 23 horas del sábado 19 de junio. Al apagarse una antorcha de seguridad se produjo un escape de gases no tóxicos sin pasar por el proceso de quemado. Los gases fueron percibidos por algunos vecinos por su fuerte olor, y hubo quienes habrían sufrido irritación de mucosas.
El problema no terminó allí debido a que la antorcha apagada no pudo volver a prenderse y la situación anómala se vivió hasta el mediodía del domingo cuando la antorcha pudo restablecerse.

Suma y sigue
La refinería no perdió protagonismo esa semana. El jueves 24 se informaba de un fuerte olor que percibían los vecinos, originado  nuevamente en la planta de Petrobras. En este caso, el titular de Gestión Ambiental señaló que se trató de un problema menor causado por la puesta en marcha de maquinarias.
Para conocer con profundidad la situación medioambiental y de seguridad que se platea en esta planta petrolera, EcoDias consultó a quienes tienen presencia directa en el lugar, es decir, los trabajadores.
Fabio Pierdominici, primer vocal de la Comisión Directiva del Sindicato del Petróleo, Gas y Biocombustibles de Bahía Blanca, La Pampa y Patagonia Argentina, explicó detalladamente las características del incidente: “Se apagó la antorcha, lo que provoca que todos los gases que se descartan de la producción, queden en el ambiente. Los gases que no sirven para nada -es decir, el residuo del proceso-, la manera de evacuarlos es quemarlos antes que vayan a la atmosfera. Al no estar el proceso de quemado, esos gases quedan en el ambiente. En realidad, son más molestos que peligrosos, es distinta a la situación de los escapes de gases que ha habido en el Polo donde se trataba de algo altamente tóxico como el cloro que te deshace los pulmones o amoníaco que te pueden provocar la muerte. Lo único que va a la antorcha (de Petrobras), que es peligroso únicamente en altas concentraciones, es el sulfídrico. El resto son derivados de gases que son vapores de naftas, pueden ser irritantes a la vista, a las vías respiratorias, pero no te matan”.

Investigación
Pierdominici señaló que en el ámbito de la refinería, ninguno de los trabajadores sufrió consecuencias, básicamente por los 84 metros de altura en que se encuentra la antorcha: “Sabemos cuál fue la consecuencia, sabemos desde qué unidad se puede haber empezado a provocar el problema pero no sabemos la dimensión total. Estamos haciendo nuestra propia investigando, al margen de la investigación de la empresa”.
Analizando las posibles causas, Pierdominici resaltó que el hecho resulta curioso por el sector en el que se produjo ya que esa área había sido renovada casi en su totalidad para su mejor funcionamiento: “Eso es lo que nos hace un poco de ruido. Nosotros habíamos denunciado falta de mantenimiento pero justo ocurrió en una unidad en la cual había habido un conflicto el año pasado, la empresa presentó un cronograma de acción acerca de lo que iban a hacer para mantener la planta, y justo esta unidad fue la que hace una semana se volvía a poner en marcha y estaba prácticamente nueva. Hubo una parada muy importante y quedó bastante completa. Justo la que provocó el problema es en la que le habían hecho un mantenimiento bastante exhaustivo”.
En la búsqueda de respuestas acerca de lo ocurrido en la refinería se está estudiando si se trató de un problema tecnológico de algún tipo de válvula que debe controlarse, y que al trabarse los niveles, los encargados no hayan podido visualizar el problema: “Para que la gente entienda, estos son todos ‘tachos’ cerrados, estancos, todo lo que ves es a través de sensores que hay adentro, es decir, no podés ver lo que pasa adentro. Se da la simultaneidad, por lo general se traba una lectura y estás leyendo otra, pero en lo técnico puede existir la eventualidad que se trabe más de una cosa o que deje de tener lectura de más de una variable y se pierda la dimensión de lo que está pasando adentro. En realidad, esto es todo muy supuesto porque estamos tratando de recabar toda la información posible a través de valores, y horarios.
Lo que sí, es una situación anormal y eso no podemos negarlo. De 20 años que estoy en refinería es la primera vez que pasa una cosa así”.

Posición del gremio
Ante los incidentes en Petrobras el sindicato petrolero planteó dos posturas. Una de ellas es que la empresa le facilite el acceso a toda la información para determinar qué fue exactamente lo que ocurrió: “Por otro lado, hay otra cuestión que puede haber incidido, nosotros venimos planteando hace bastante tiempo un programa más fuerte de capacitación tanto del personal propio como el personal fuera de convenio. Se ha ido jubilando y retirando gente con experiencia, ha entrado gente nueva y tal vez una de las patas que falta reforzar por parte de la empresa -y este tipo de situaciones lo pone de manifiesto- es la falta de experiencia”.
Son todos supuestos, las causas del problema todavía no están esclarecidas, y de allí la necesidad de una minuciosa investigación. Así y todo, existe una realidad y es la que tiene que ver con el mantenimiento de la planta. Según Pierdominici, hoy se encuentran “50 y 50: un 50 por ciento de la planta bien y otro 50 mal, con el compromiso de la empresa de reacondicionarla a fines de agosto, primeros días de septiembre. Se dilató a esa fecha por una cuestión de provisión de elementos, que son casi todos importados. Somos concientes de esa realidad”.

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2010-06-28 00:00:00
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