Motiva
este escrito las declaraciones del presidente del Consorcio del Puerto, dr.
Otharán, de que aún es prematuro dar la palabra definitiva con respecto al
dragado a Cuatreros por parte de YPF Repsol. Es claro que sin dragado sería
imposible instalar una planta regasificadora en Cerri. Lo llamativo es que
nadie mencione el acuerdo preexistente entre la empresa Petróleos de Venezuela
SA (PDVSA) y la nacional Energía Argentina SA (ENARSA) para instalar una planta
regasificadora en el distrito de Coronel Rosales. Para ello la Base Naval de
Puerto Belgrano ha cedido terrenos y se están realizando trabajos de suelos.
¿Cuál es la razón para que se deje de lado el proyecto que suscribieron Néstor
Kirchner y Chávez? No escapa al conocimiento del presidente del Consorcio de que
en ese lugar las aguas tienen un calado natural de 60 pies.
Los estudios preliminares antes de decidirse por Punta Alta se habían hecho en
primera instancia en Bahía Blanca, teniéndose en cuenta aspectos que hacen a lo
ecológico y ambiental, para llegar a la conclusión de que el mejor lugar para
ubicar una planta regasificadora en nuestra ciudad se encontraba en cercanías
de la actual planta de gas de TGS, en proximidades de Cerri. Los geólogos
intervinientes tuvieron en cuenta esa ubicación por el efecto de los vientos
que llevarían los humos contaminantes al mar y no a la ciudad por la distancia,
entre otras razones.
Me llama poderosamente la atención que en el número 372 de EcoDias, julio de
2011, se publica una nota cuyo título es “Dragado. Proclamación de la UNS” y en
él se nos informa que quienes emiten su opinión son los departamentos de
Biología, Bioquímica y Farmacia. ¿Geología no tiene nada que decir? Sí, sabemos
que los estudios para la planta regasificadora de Punta Alta provienen de
geólogos. En su momento los elevé, junto a otros estudios, a los presidentes
Néstor Kirchner y Hugo Chávez, explicando las razones por las que debería
crearse una nueva planta de refinería de petróleo y otra de gas aquí en Bahía
Blanca. Se aprobó la de gas. De Presidencia de Nación y del Ministerio de Planificación
recibí respuesta. Y de Venezuela, a través de la embajada local en Buenos Aires,
recibí este mail: “Por órdenes recibidas agradecemos el valioso material que
nos envío, nos será muy útil”. Después vino el convenio PDVSA – ENARSA.
Hago público también que he hecho entrega de una voluminosa carpeta con
estudios e investigaciones al consejero económico y comercial de la Embajada de
la República Popular China en Buenos Aires, y procedo de esta manera por
indicación del ministro de Agricultura de China y del señor embajador. Son estudios
e investigaciones hídricas sobre la provincia de La Pampa, Río Negro y sur de
Buenos Aires, los partidos de Patagones y Villarino. A la vez, expongo mi punto
de vista con respecto al convenio firmado entre China y el gobierno de Río
Negro que afecta a 320.000 hectáreas que serían utilizadas para siembra y
cultivos tradicionales y propongo estudiar la posibilidad de extender ese
convenio a los partidos de Patagones y Villarino incorporando 500.000 hectáreas,
tal como lo explican los estudios enviados. Y a eso debemos agregar la
definitiva solución de agua potable para Bahía Blanca y Punta Alta.
Se dice que “las águilas no cazan moscas”. Traducido a nuestras necesidades
regionales: debemos pensar en grande, y con sentido de grandeza. Así como
creamos el complejo portuario que necesitamos para consolidar la única vía de
exportación por puertos de aguas profundas que tenemos con el plan
agroalimentario que nos propone el gobierno nacional -ambicioso proyecto de
elevar un 50 por ciento nuestra producción cerealera-, cuando hablamos de
complejo portuario, invocamos al puerto de Ingeniero White, Galván, Cerri Punta
Alta, Base Naval, con calados superiores a los 50 y hasta 60 pies en Punta
Alta. Hice conocer al Señor Ministro de Agricultura Julián Domínguez estudios
sobre cebada (que se siembra y produce en nuestra región), ya que es posible
elevar la siembra y la producción de cebada con destino a China, país con el
que se suscribió un acuerdo por dos millones de toneladas. Invito a los chinos
a que consideren la posibilidad de prolongar sus acuerdos hechos con el
gobierno nacional para invertir en el Ferrocarril Belgrano (en el norte) y que
se proyecten al Ferrocarril General Roca y línea de estado (Bahía Blanca-
Bariloche). Si incorporamos un millón de hectáreas bajo riego con las aguas del
Río Negro y Colorado, si miramos el mapa vemos cómo eso ríos que nacen en la
cordillera corren paralelos y a corta distancia uno del otro, que se crean
condiciones para construir diques y embalses, y lógicamente centrales eléctricas.
Asimismo, muy cerca de los dos ríos corren también paralelas las vías de esos
dos ferrocarriles (casi abandonados), y también en forma paralela las rutas
viales que van desde Bahía Blanca a Roca y Zapala, y de Bahía Blanca a Viedma y
Bariloche.
Riego, ferrocarriles, caminos, puertos, ¿no es esa la solución integral que
tanto soñaron los próceres del Colegio Libre de Estudios Superiores, antes que
se creara la UNS? ¿No son los sueños proyectados del ingeniero físico Domingo
Pronsato, y otros?