En el Concejo Deliberante se presentó un
proyecto destinado a crear la mesa local de violencia de género. La misma, es
conformada por profesionales, organizaciones e instituciones que trabajan en la
problemática.

Según consta en el proyecto presentado por la concejal Gisela Ghigliani del
Frente para la Victoria PJ,
un paso necesario para romper la cultura del silencio y de la opresión es
visibilizar ante la opinión pública las distintas formas de violencia contra
las mujeres.
El trabajo que realizan diferentes instituciones y profesionales también
contribuye a quebrar esa cultura y de allí a la necesidad de darle un marco
formal a ese trabajo. Estamos hablando de la Mesa Local de Violencia
de Género para la cual la edil elevó un proyecto de ordenanza para su creación,
pero que en realidad viene trabajando desde hace un tiempo.
Las mesas locales son espacios constituidos por efectores que se organizan y
definen acciones en relación a la problemática de violencia familiar.
En el caso particular de Bahía Blanca, Ghigliani le explicó a EcoDias: “Esto
empezó el año pasado, más o menos alrededor del mes de julio, agosto cuando
estábamos con Susana Eliker que casualmente hoy es la subsecretaria de Niñez y
Adolescencia y con una compañera psicóloga, Angélica Padula, estábamos en la Dirección de Políticas
Públicas. Ahí comenzamos a pensar no en crear nada sino lograr casualmente en
una mesa sentarnos todos los operadores que trabajaban hasta ese momento bien
de manera directa en los temas de violencia”.
Así fue que se convocaron al Tribunal de Familia, a la Defensoría Oficial
de la Víctima,
ONGs como El Nido, Creer Sí, Mujeres Bahienses en Acción y la Comisaría de la Mujer, entre otras
entidades. En ese grupo también se incluye a representantes de la Secretaría de Salud
municipal, de Promoción Social y de Niñez y Adolescencia: “A partir de esa
reunión se empezaron a discutir aspectos relacionados con la ciudad que tenían
que ver con que todos estábamos trabajando, había una articulación de hecho
informal que es lo que permite darle formalidad a esto y nos sentamos en esta
mesa a discutir cuestiones de violencia”.
En razón de ello, se realizó un diagnóstico ya que no se contaba con buena
cantidad de datos en cuanto a estadísticas propias:”Lo primero que se hace es
diseñar un instrumento que permite la recolección homogénea de cierta parte de
la información que nos va a permitir a todos en esta red, contar con datos
propios de Bahía Blanca”.

Agilizar la comunicación
Lo importante de todo esto, señala Ghigliani, es que cada actor trabaja con
su propia lógica y especificad en su ámbito laboral. Ya sea éste la Justicia, una ONG “o lo
que fuere, pero que arman un instrumento común a todas estas instituciones y se
vuelca con un grupo de dos o tres personas, es un formato que se hace online, y
se pone esta información a disposición de esta red”.
Llevó casi todo un año discutir aspectos de trabajo, modalidades y ver la
viabilidad en la práctica de poder llevar adelante la recolección de datos. En
ese sentido, Ghigliani destacó “el compromiso muy fuerte que tienen todos los
que la integran porque realmente más allá de sus trabajos en forma particular,
se suman a este espacio y arman un instrumento que nos va a permitir tener esta
información”.
Por todas estas razones es que se intenta, si bien la mesa existía, darle un
marco formal y que quede constituida a través de la ordenanza: “Nos pareció que
dado el marco en el que estaban trabajando, darle la institucionalidad mediante
una ordenanza ubicando a esta mesa en el espacio de la Subsecretaría de
Niñez y Adolescencia donde también está el otro servicio municipal que es
Promover, que tiene sede en el Hospital Municipal y de quien depende también
recursos económicos y algunos planes para mujeres víctimas de violencia, así
como también el refugio”.
Si bien la recolección de datos recién comienza, según Ghigliani también se
pueden aportar aspectos para las capacitaciones futuras: “Es como que se va
estableciendo un diagnóstico y una realidad que es realmente bahiense y nos va
a permitir que sea una apoyatura fuerte para políticas públicas, si no, no es
que no haya información pero cotejar datos que vienen de ONGs muy serias como
se trabaja la Casa
del Encuentro por ejemplo en Capital Federal o como trabajamos con estadísticas
del Consejo Nacional de la
Mujeres, poder cotejarlas con nuestros propios datos”.
Otra cuestión importante que surge de esta temática es que el vínculo constante
que existe en este trabajo facilita la comunicación entre los actores: “Lo
interesante de esta mesa es que también se apunta a, al poder vincularse entre
sí, en lo cotidiano, mensualmente, se agilizan las formas de comunicación intra
red, es interinstitucional, entonces por ahí si hay alguna mujer víctima de
alguna situación de violencia que puede ir agravándose hasta llegar a un
femicidio, como que uno puede ir teniendo una lectura en el grupo. Eso
realmente es muy beneficioso para las intervenciones posibles sobre esta mujer,
ya sea sola o su grupo familiar”.